Criada y entrenada en un bosque a las afueras de la ciudad de Musutafu, hija mestiza de uno de los tres principales dioses de la mitología Griega.
Takahiro Chiho, una joven preciosa de cabellos dorados como el sol y ojos azules como el mar, guerrer...
Salió de enfermería unos minutos antes de que la batalla que se estaba desarrollando, de Midoriya y Todoroki terminará, se paseó por los pasillos tranquilamente, esperando despertar su cuerpo del todo, además de vigilar que todo estuviera bien. Sus pasos se detuvieron cuando frente a ella se alza en grande el héroe número dos, Endeavor.
-Con permiso. -trata de pasar pero el héroe se lo niega-
- Tienes muy buenas habilidades, señorita Takahiro. Me llama mucho la atención de que usted sea muy poderosa. Harías buena pareja con Shoto para que puedan ser mucho pero mucho más fuertes. -el héroe se cruza de brazos y sonríe de lado, quería saber que respuesta positiva recibiría-
-Le diré una cosa. -dice seria y observa al hombre con seriedad- Su hijo no es un objeto al cual utilizar como premio. Es una persona, como usted o como yo, una persona con sentimientos. Así que no me venga con decir que haremos buena pareja porque no es así. Usted que sabe sobre eso? Mmh?. -se cruza de brazos y levanta la mirada, como si lo retara- Su hijo tal vez no me caiga bien del todo pero, si hace falta, puedo defenderlo de personas como usted, que no merece siquiera el título que lleva. No es digno de una tarea tan grande y menos lo será si solo piensa en poder poder poder y más poder. No haga las cosas de forma estúpida, póngase los pantalones y sea un hombre de familia, no un maldito mortal que se aprovecha de que su hijo sea un buen objeto para alcanzar el sueño frustrado que usted, no pudo lograr por su debilidad. -las llamas del héroe aumentan bastante junto a su ceño fruncido- ahora si me disculpa, tengo una pelea que desarrollar y a unos dioses que sorprender. Con permiso.
La chica rodeó al héroe mientras que este se mantiene mirando hacia el frente pero lentamente fue girando su rostro hacia la joven que lo había retado. Gruñó y sus llamas aumentaron, desea tanto que su hijo se junte más con la semidiosa, que la generaciones futuras de los Todoroki lleguen incluso a ser también semidioses capaces de dominar la punta de la lista de los héroes más fuertes y poderosos del mundo, superando a All Might.
-Maldita mocosa... pero voy a lograr que te emparejes con mi hijo, voy a lograrlo y nada ni nadie se interpondrá en mi camino. -gruñe ante de dar media vuelta e ir a ver la batalla de su hijo-.
Recorrió los pasillos hasta que después de unos largos y estruendosos minutos, la pelea terminó, teniendo como ganador a Todoroki Shoto. Chiho no le interesó para nada ir a ver la pelea, así que fue a la sala de espera nuevamente, pero no estaría sola, sino la subdelegada estaría allí, esperándola con una nueva camisilla en manos.
-¿Momo?. -la rubia observa a la pelinegra- que haces aquí?
-E-Etto... -se sonroja cuando la mira y luego agacha la mirada a su regazo- Yo... q-queria darte esto! -extiende la camisilla negra en sus manos- Como la tuya se destruyó, usé mi habilidad para poder hacerte uno nuevo y así estés más cómoda!
La joven, sorprendida por aquello, tomó la prenda entre sus manos y extendió la prenda frente a ella para después, rápidamente colocarsela, observándose con detenimiento, sintiendo como aquella ropa le queda a la perfección.
-Te lo agradezco mucho, Momo~ -sonrie suavemente mirando a la delegada-
-De nada C-Chiho-chan-sonrie sonrojada mientras juega con sus dedos- Debo i-irme, veré tu pelea! Y voy a animarte mucho!! -sonrie sonrojada mientras se pone de pie-suerte, Chiho-chan!
Asintiendo con una sonrisa, observó como la vicepresidenta de su salón, se retira de allí lo más pronto posible. Se observó nuevamente y luego se estiró, la ropa le queda a la perfección y agradecía bastante a la pelinegra que le haya obsequiado aquello, luego vería como devolverle el favor.
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Su nombre fue anunciado y a pasos firmes se fue acercando a las afueras del túnel, donde el público grita de emoción, algunos ya se encontraban gritando el nombre de la rubia, deseosos de ver que movimientos haría ahora contra su contrincante.
Lentamente subió a la plataforma al igual que el bicolor, pero este, teniendo una mirada algo triste y decaída. Extrañada, ladeó un poco la cabeza y lo observó fijamente para luego escuchar la señal de inicio. Pero ninguno se movió, Chiho esperando a que el bicolor ataque y él esperando a que ella lo haga, pero ya no había ganas en él para seguir peleando, solo quería terminar con esto.
Su lado izquiero se prendió y extendió su manos hacia ella; la joven se preparó y generó sus rayos en las manos, frunciendo el ceño y posicionándose para pelear. Pero vaya sorpresa que se llevó cuando vio como el joven apagaba su brazo y mantenía la mirada gacha y perdida.
-Me rindo. -susurra el bicolor-
-¿Todoroki? ¿Te rindes? -pregunta la heroína mientras se acerca a él-
-Me rindo... no quiero seguir con esto... -susurra y observa a la chica desactivar su kosei- Lo siento... pero no quiero pelear...
-Esta bien..., hiciste un gran esfuerzo, Todoroki. -sonrie leve la mujer y alza su latigo- ¡¡TODOROKI SHOTO SE RINDE!!! ¡¡LA GANADORA DE ESTE FESTIVAL DEPORTIVO ES TAKAHIRO CHIHO!!! -anuncia la heroína-
La joven nombrada por la heroína, observó al bicolor, siendo ajena a la situación de festejo, fuegos artificiales y confeti. Solo observa al chico decaído ante una batalla; suspiró con pesadez y se acercó al muchacho, se puso las manos detrás de la espalda y le sonrió con calidez.
-Eres fuerte, Todoroki. Pero no dejes que un mal presagio venga a arruinarte la vida entera. -el bicolor alza la mirada hacia ella- La vida tiene muchos misterios y los dioses sabrán que camino debes tomar. -pone una mano en su hombro y sonríe con suavidad- no te rindas, guerrero de dos colores, pues es un camino largo el que todos debemos recorrer.
-Pero... tu querías pelear. -le mira decaído-
-Pero tú no. -le mira fijamente- no se trata de pelear por obligación. Debe nacer de aquí- coloca una mano en el pecho del bicolor- y tu voluntad debe estar allí también-sonrie cálidamente- No permitas que nadie te obligue a pelear solo para complacer a quienes disfrutan, si tu quieres pelear, bien! Pero si no, no te mortifiques y lucha por tu destino. Es tu poder y tu tienes la autoridad de hacer lo que quieres con ello. Nadie te pondrá una pistola en la cabeza para hacer lo que otros quieren.
-Takahiro... -se sorprende y se mira las manos- ya van dos...que me animan de esta forma...
- Para eso estamos los que nos ayudamos -sonrie y extiende los brazos- ¿un abrazo?.
-No soy de los que abrazan.
-Siempre hay una primera vez para todo. -sonrie, se acerca y lo abraza-
El público gritó con alegría y los fuegos artificiales aumentaron, al igual que la emoción y regocijo de los dioses. La semidiosa demuestra una vez más su buen corazón ante sus contrincantes.
El orgullo se alza en los corazón de los celestiales y de la madre de la joven guerrera.
Un corazón valiente, en una semidiosa pequeña.
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