Cuando Simon llegó al apartamento de Magnus, estaba en silencio. Había un fuego parpadeante en la chimenea, y Magnus estaba frente a ella en un sofá, con los pies encima de la mesa de café. Alec dormía, con la cabeza en el regazo de Magnus y él giraba mechones del pelo negro de Alec entre sus dedos. El brujo miraba las llamas, de manera remota y distante, como si estuviera mirando hacia el pasado. Simon no pudo evitar recordar lo que Magnus le había dicho una vez, acerca de vivir para siempre:Algún día sólo quedaremos tú y yo.
Simon se estremeció, y Magnus levantó la vista.
―Isabelle te llamó, lo sé ―dijo, hablando en voz baja para no despertar a Alec―. Es cruzando el pasillo; la primera habitación a la izquierda.
Simon asintió con la cabeza y, con un saludo en dirección a Magnus, se encaminó por el pasillo. Se sentía inusualmente nervioso, como si se estuviera preparando para una primera cita. Isabelle, según recordaba, nunca había pedido su ayuda o su presencia antes, nunca había reconocido que lo necesitara de alguna manera.
Abrió la puerta de la primera habitación a la izquierda y entró. Estaba oscuro, las luces estaban apagadas, y si Simon no hubiera tenido la vista de un vampiro, probablemente habría visto sólo oscuridad. Siendo así, vio los contornos de un armario, sillas con ropa tirada encima de ellas, y una cama, con las sabanas echadas hacia atrás. Isabelle dormía de lado, con su pelo negro en abanico sobre la almohada.
Simon se detuvo. Nunca antes había visto a dormir a Isabelle. Se veía más joven de lo que aparentaba ser, con el rostro relajado, y sus largas pestañas rozando la parte superior de sus pómulos. Tenía la boca ligeramente abierta, y los pies encogidos. Sólo llevaba una camiseta, sucamiseta, una desgastada camiseta azul que decía CLUB DEL MONSTRUO DEL LAGO NESS: BUSCANDO RESPUESTAS, IGNORANDO LOS HECHOS en la parte delantera.
Simon cerró la puerta detrás de él, se sintió más decepcionado de lo que esperaba. No se le había ocurrido que ella ya estaría dormida. Había estado esperando hablar con ella, escuchar su voz. Se quitó los zapatos y se acostó a su lado. Ella sin duda ocupaba más espacio en la cama que Clary. Isabelle era alta, casi de su estatura, aunque cuando puso la mano sobre su hombro, sintió sus delicados huesos bajo su tacto. Pasó la mano por su brazo.
―¿Iz? ―la llamó―. ¿Isabelle?
Ella murmuró y volvió la cara hacia la almohada. Se acercó, ella olía a alcohol y a rosas por su perfume. Bueno, ahí tenía la respuesta. Había estado pensando en ponerla en sus brazos y besarla suavemente, pero "Simon Lewis, Acosador de Mujeres Inconscientes" en realidad no era el epitafio por el cual quería ser recordado.
Se acostó de espaldas y se quedó mirando el techo. El yeso estaba agrietado, y lleno de manchas de agua. Magnus realmente debía conseguir que alguien hiciera algo al respecto. Como si sintiera su presencia, Isabelle rodó hacia un lado presionándose contra él, poniendo su suave mejilla en su hombro.
―¿Simon? ―dijo adormilada.
―Sí. ―Le tocó la cara ligeramente.
―Viniste. ―Posó el brazo sobre su pecho, moviendo la cabeza, para acomodarse en su hombro―. No pensé que fueras a hacerlo.
Sus dedos trazaron patrones en su brazo.
―Claro que vine.
Sus siguientes palabras fueron susurradas en su cuello.
―Lo siento, estoy dormida.
Sonrió un poco para sí, en la oscuridad.
―Está bien. Incluso si lo único que querías era que viniera aquí y te sostuviera mientras duermes, lo habría hecho.
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Amor diferente (Malec) - Completa
FanfictionEs una recopilación de las historias de la hermosa pareja Alexander Lightwood (nefilim) y Magnus Bane (brujo) de la saga Cazadores de Sombras de la autora Cassandra Clare todos los créditos y felicitaciones para la escritora por darnos a esta linda...