El tiempo pasaba dentro de la prisión, Jace miraba con interés decreciente la lluvia plateada alrededor de él. Sus dedos habían comenzado a ponerse azules, lo cual parecía ser un mal síntoma, pero no había manera de evitarlo. Se preguntó si los Lightwood sabrían que estaba ahí, o si alguien que entrara en la habitación de entrenamiento se llevaría una desagradable sorpresa cuando lo encontrara encerrado ahí. Pero no, la Inquisidora no era tonta. Les habría dicho a todos que la habitación estaba fuera de los límites hasta que decidiera lo que haría con el prisionero, o lo cualquier otra cosa por el estilo. Supuso que debía estar enojado, incluso temeroso, pero no podía sentir nada de eso. Nada se veía real ya: ni la Clave, no el Convenio, ni la Ley, ni incluso su padre.Un leve ruido de pisadas le advirtió de la presencia de alguien más en el cuarto. Había estado acostado boca arriba, mirando al techo; ahora se sentó, mirando alrededor de toda la habitación. Podía ver una forma oscura detrás de la brillante cortina de lluvia. Debía la Inquisidora,de vuelta a molestarlo. Se irguió, sorprendido al ver una mata de cabello negro y una cara familiar. Quizá había algunas cosas que sí eran reales, después de todo:
-¿Alec?
-Sí
Alec se arrodilló del otro lado de la pared brillante. Era como ver a alguien por entre una cascada; Jace podía ver a Alec claramente ahora, pero de vez en vez sus movimientos parecían hacer ondular la superficie. Lo suficiente para sentirte mareado, pensó Jace.
-¿En el nombre del Ángel, qué es esto? –se acercó Alec a tocar la pared
-No –lo detuvo Jace- Te electrocutará, quizá te mate si tratas de pasar a través de ella
Alec quitó la mano con un débil silbido.
-La Inquisidora se tomó muy en serio esto
-Claro que sí. Soy un criminal peligroso. ¿No lo habías oído? –dijo ácidamente Jace, vió a Alec moverse, instintivamente.
-No te llamó un "criminal", no exactamente
-No, soy sólo un chico malcriado. Hago toda clase de cosas malvadas. Pateo gatitos. Les digo groserías a las monjas.
-No bromees. Esto es serio –los ojos de Alec se ensombrecieron- ¿Qué pensabas, yendo a ver a Valentine? Digo, en serio, ¿qué pasaba por tu cabeza?
Un gran número de respuestas sarcásticas se le ocurrieron a Jace, pero se dio cuenta que no quería decir ninguna de ellas. Estaba demasiado cansado.
-Estaba pensando que es mi padre
Alec lo miró como si mentalmente estuviera contando hasta diez para mantener la paciencia. -Jace...
-¿Qué si fuera tu padre? ¿Qué harías?
-¿Mi padre? Mi padre nunca haría cosas como las de Valentine...
Jace alzó la cabeza con furia.
-¡Tu padre hizo lo que Valentine! ¡Estuvo en el Círculo junto con mi padre! ¡Tu madre también! Nuestros padres fueron iguales. ¡La única diferencia es que los tuyos fueron castigados y el mío no!
La cara de Alec se tensó. Pero:
-¿La única diferencia? –fue todo lo que dijo
Jace miró sus manos. Las esposas encendidas ya habían durado demasiado. La piel debajo de ellas estaba manchada con gotitas de sangre.
-Sólo digo –dijo Alec- que no entiendo cómo podías querer ir a verlo, de luego de todo lo que le ha hecho al mundo, sino de todo lo que te ha hecho a ti
ESTÁS LEYENDO
Amor diferente (Malec) - Completa
FanficEs una recopilación de las historias de la hermosa pareja Alexander Lightwood (nefilim) y Magnus Bane (brujo) de la saga Cazadores de Sombras de la autora Cassandra Clare todos los créditos y felicitaciones para la escritora por darnos a esta linda...