El plan de los Riddle

32- Básicamente son psicópatas

— La tradición es ponerte el sombrero seleccionador para saber cual es tú casa, pero Dumbledore no se encuentra en este momento, así que pospondremos esto hasta mañana cuando Dumbledore este aquí —hizo una pausa— por mientras te quedaras con ....

— Con nosotras —se levanto de su asiento Ginny. 

Mcgonagall asintió y me hizo un ademan para que me fuera a sentar con ellas en su mesa. 

Luego de unos minutos empezó la cena y mientras comíamos, ellas estuvieron hablando animadamente. De un momento a otro, las puertas se abren de golpe, e inmediatamente el ambiente se volvió muy pesado y todos en el gran comedor, se empezaron quedar callados.

En la puerta iban entrando los hermanos Riddle, llamando la atención de todos, como si se tratara de las personas más importantes del mundo y los dos parecían disfrutar de las miradas que estaban recibiendo. Por unos segundo la mirada de los dos hermanos, se cruzo con la mía y aunque detestó a Matheo y Tom no lo tolero del todo, los dos me sonrieron levemente al pasar por la mesa, para después irse a sentar junto con los demás en una mesa al centro del gran comedor. 

— Oh no —las palabras de Hermione me hicieron salir de mi trance— Ni siquiera lo pienses. 

— ¿Qué cosa? —me hice la desentendida.

— Vi como los mirabas y no puedes hacerlo.

— ¿No puedo verlos? —cuestione confundida.

— No de ese modo —la mire confundida. 

No los mire de ningun modo especifico, como para que se hubieran dado cuenta que los miraba.

<<Eso es lo que crees tu>>

— Ellos son los Riddle —agregó Luna.

— Y no debes acercarte a ellos por muy perfectos que se vean —siguió Hermione.

Antes de que pudiera preguntarles el porque, Ginny me tomo de los hombros haciendo que la mirara.

— Todo lo  que se junte con ellos debería de ser exterminado de la sociedad.

— ¡Por favor! no pueden ser tan malos —le reste importancia.

— Oh no.

— Te aseguro que son mucho peor de lo que puedes imaginar —me aseguro Luna con una mueca.

— Además de que toda esa mesa de ahí —señalo la mesa donde estaban mis amigos— son un montón de idiotas.

— De eso no me queda duda —murmure.

— Son peligrosos y  si te llegas a meter con ellos  —trago saliva— se encargan de destrozar toda tu vida.

La media sonrisa que tenía en la cara se me borró.

— ¿Qué?  —pregunté confundida— ¿A ustedes les han destrozaron la vida? —eso me inquietaba un poco.

— Solo aléjate de ellos —ignoró mi pregunta— aléjate de los 7.

— Porque al final todos son igual de peligrosos.

— Se que parecen normales —hizo una pausa— pero no lo son.

— Son monstruos, así que no te dejes engañar.

— Sigo insistiendo que no pueden ser tan malos —murmure pero por la cara que pusieron las tres, se que lo escucharon. 

A ver, yo conviví con esos chicos por más de seis meses y admito que si son insoportables y de vez en cuando se comportan como unos verdaderos idiotas, pero no son unos monstruos. Eso ya es exagerar un montón. 

— Te explicaremos  —me dijo amable Luna. 

 — El primero es Draco Malfoy —Her señalo a mi rubio oxigenado favorito—  es sarcástico, misterioso, arrogante y tiene un sentido de lealtad increíble. 

Eso no lo vuelve malo, solo arrogante. 

— El segundo es Gilbert Carrow —Luna señalo al chico de los ojos color avellana— es como la mente brillante de los 7, porque a mi parecer, él es el más inteligente, es divertido, extrovertido y es uno de los más honorables.

Otro que tampoco es un monstruo. 

— El tercero es Aidan Dolohov —Luna señalo al castaño— es imprudente, valiente, no le da miedo nada y  es el mejor manipulador de los 7.

Igual no lo vuelve taaaan malo, que manipule a la gente de vez en cuando.

— El cuarto es Tom Riddle —Her señalo al chico delgado con cara de "odio al mundo y el mundo me odia a mi" —es uno de los más temidos, porque es arrogante, dominante, nunca demuestra sus emociones, lo que lo viene convirtiendo en un maldito bloque de hielo, el cual además demuestra con todas sus acciones que no tiene humanidad.

Bueno si, yo conocía a Tom y no puedo negar nada de lo que acaban de decir, pero insisto que no son un monstruo como ellas los pintan.

— El quinto es Mike Rookwood —Her señalo al pelinegro— él es tranquilo, un poco introvertido, descuidado y es uno de los más morales.

Mike es un amor, siempre y cuando este en sus 5 sentidos, de lo contrario se vuelve un dolor de cabeza, muy insoportable.

— El sexto es Regulus Black —Ginny señalo al chico de los ojos grises— es irónico, protector, por ende se mete en problemas las misma cantidad de veces en las que respira y sorprendentemente también es muy honorable.

— Y por último, el séptimo chico, es Matheo Riddle —Luna señalo a ricitos— es engreído, problemático, provocativo, atrevido, impulsivo, un tanto vengativo y al igual que su hermano, es temido porque parece que no tiene humanidad, así como tampoco es capas de sentir amor por alguien más que no sea él.

Chasque la lengua. 

— Muchos de ellos no parecen ser tan malos —me cruce de brazos.

— No te confundas Morgan —Her movió su cabeza de un lado al otro— aunque varios de ellos parecen que no mataría ni a una mosca, todos son del mismo grupo por una razón y esa razón es que a los 7 les gusta lastimar a los que se meten en su camino, solo por diversión y poder. 

— Básicamente son psicópatas.

El comentario que hizo Ginny me hizo apretar la mandíbula con fuerza. Si estoy conciente de que seguramente han hecho cosas muy malas en este lugar, pero eso no los convierte en unos psicópatas. 

— Si aprecias tu vida lo suficiente, evita cruzarte en su camino —Ginny me saco de mis pensamientos— porque se ha demostrado que si te llegas a meter con alguno de ellos, pueden arruinarte sin ningún problema.  

— No son psicópatas —proteste cuando Ginny termino de hablar— no deberían de decir eso de ellos.

— Te aseguro que si lo son —Her me miro feo— todos ellos disfrutan el sufrimiento ajeno.

— ¿Cómo sabes eso? —apreté el tenedor que tenía en la mano.

— Yo los he visto —abrí mi boca para hablar, pero Hermione se me adelanto— he visto la mirada de satisfacción que tienen en la cara cuando están torturando a alguien. 

Eso no los convierte en psicópatas —pensé.

— Yo los vi  matar a familias inocentes solo por diversión —habló Ginny apoyando lo que Hermione decía. 

Al escuchar eso todo el enojo que sentía desapareció y sentí como si me hubieran tirado una cubeta con hielos encima, estaba muy confundida, porque no podía creer que ellos pudieran ser capaces de matar a alguien y mucho menos si se trababa de gente inocente. Estaba consiente de que no eran ángeles caídos del cielo y que como cualquier persona habían llegado a realizar cosas malas,  pero definitivamente nunca imagine que fueran capaces de quitarle la vida a una persona, mucho menos a familias. Entre más le daba vueltas a eso, el nudo que se formaba en el estomago, cada vez iba creciendo más. 

— Todos tienen la sangre de personas inocentes entre sus manos —las palabras de Luna hicieron que me dieran ganas de vomitar. Por lo que me  levante de golpe de mi lugar y salí casi corriendo del gran comedor.