El plan de los Riddle

74- Expertos en el tema

Íbamos caminando en el pasillo cunado reaccione y me zafe del agarre de Harry bruscamente.

— Puedo irme sola —protesté pero a él le valió mi comentario, porque nuevamente me tomo de la muñeca y me siguió jalando.

— Silencio Morgan —me ordeno, poniendo su mano en mi boca.

Y antes de que pudiera hacer otra cosa, me empujo levemente hacia el interior de un salón. 

— Sálganse de aquí —fueron las palabras de Nott al vernos entrar al salón.

— Si salimos nos descubrirán —habló Ron a mi espalda.

Si el chico no hubiera hablado, tal vez nunca me hubiera dado cuenta que no veníamos solos. 

— Ese no es nuestro problema —le dijo María.

— No nos saldremos —les informó Hermione.

— Sálganse ustedes —lo rete.

— Bien, nosotros nos vamos —habló Nott dirigiéndose a la puerta, seguido de sus dos secuaces, por lo que yo aproveche para irme a sentar en el escritorio. 

— ¿Qué esperan para salir? —presiono Ron, al ver que los 3 estaban parados en la puerta nada más.  

— Cerraron las puertas —habló Cho apretando los dientes.

— Cierre de emergencia —comentó Hermione— las puertas no se abrirán hasta mañana. 

— ¿Estas diciendo que nos quedaremos los 7 aquí? —cuestionó Harry con fastidio aunque todos sabíamos ya la respuesta. 

— Los 8 —corrigió Newt saliendo de las sombras.

La tensión en el salón empezó a crecer y no me podía concentrar en lo que ellos estaban diciendo después, porque no podía dejar de ver a un unicornio sentado en una moto.

— ¿Alguien más ve al unicornio? —pregunte señalando la esquina y  todas las miradas se pusieron en mi.

— ¿Qué te pasa? —me pregunto Ron—tienes los ojos bien rojos.

— Está borracha —aseguro Nott y negué.

— No es verdad —protesté— solo tomé dos vasos de vodka. 

— Comió pastelitos mágicos —Newt me delato. 

— ¿Pastelitos mágicos? —preguntó confundido Ron.

— La princesita se drogo —aclaró  Nott con diversión. 

— Esto será divertido —murmuro María viéndome maliciosamente y yo me gire para el otro lado, para evitar verle su sonrisa maliciosa.

[...]

Cuando abrí los ojos me di cuenta de 3 cosas alarmantes, la primera es que no estaba en mi cuarto, la segunda es que estaba abrazando a Newt, la tercera es que  estaba en un salón junto con otras 7 personas más, las cuales no eran mis chicos y todos parecían estar durmiendo plácidamente.

 << Sería una lastima que alguien los despertara>>

Al parecer alguien escucho mis plegarias de despertarlos, porque a los segundos la puerta se abrió de golpe, provocando un fuerte ruido, que hizo que todos se despertaran alarmados. 

— ¿Tienes algo que decir en su defensa? —nos pregunto Dumbledore viéndonos a cada uno.

— ¿Qué fue lo que pasó? —pregunte confundida.

— Yo no recuerdo nada —murmuro Ron frotándose los ojos.

— Solo se que amaneció —se encogió de hombros Nott.