36 - La discusión

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POV HARRY

—¡JA! ya te cueto —la chica se centró en mi— los hombres son más infieles, porque no respetan ni a las amigas. Al hombre no le importa si es la hermana, la prima, incluso la tía  —la sonrisa que tenía en la cara se me borro al escuchar eso— no saben cuál es la diferencia entre noviazgo y soltería. Y se quejan cuando una mujer hace lo que ellos hacen todos los días.

— No somos infieles, eso es solo un cuento —proteste de nuevo—. Somos educados, no somos coquetos. Ustedes en cambio no tienen remedio, siempre hay un ex o un amigo en el medio. Dicen que es gay, que plan de mujeres, desaparecen después de las 9. Tienen un trabajo, aparecen el jueves. Son fieles hasta que tu lees sus cartas.

— Tienen a Daniela, Juliana, María. Su amigo el mecánico, esa es Lucia. Su pana del trabajo, Estefanía. Su profe en verdad, una tal Valentina.

— ¿Ese es tú primo? No lo conocía. Que raro, otra vez tu sin energía ¿Te quedaste de nuevo en casa de tu amiga? que no me contestes, no me extrañaría. 

— Ya fue suficiente —se interpuso Mcgonagall en medio de los dos. 

Estaba tan concentrado discutiendo con Morgan, manteniéndole la mirada que no me di cuenta en que momento me levante de mi lugar y llegue al centro del salón para enfrentarnos cara a cara. 

— ¿Qué fue eso? —me pregunto Luna en cuanto me volví a sentar en mi lugar.

— Díganme que no fui la única que sintió la tensión que había entre los dos —me miro divertida Her.

[...]

— ¿A ti que te pasa? —me preguntó Ron mientras jugaba con su comida.

— Resulta que ya conocí a la famosa Morgan Mikaelson.

— ¿Y cual es el problema? —pregunto mi mejor amigo confundido. 

— Tuvieron un enfrentamiento —sonrió Her como si estuviera recordando el momento.

— ¿ Y ganó la chica o por qué estas tan molesto?

— Ninguno ganó, Mcgonagall intervino antes de que se mataran mutuamente.

— No pensaba matarla —les informé.

— Pues no parecía eso ... —murmuró Luna. 

— Debiste de haberlos visto. 

— Se podía sentir como la tensión iba creciendo con cada cosa que decían.

— Están exagerando —me cruce de brazos. 

—¡Porque siempre me pierdo lo interesante! —hablo Ron frustrado.

— No exageramos, se sentía claramente la tensión que había entre los dos —Her hizo una pausa— era tanta la tensión que tenían, que si no hubiera sido por Mcgonagall probablemente se hubieran matado o  besado.

— TE IBAS A BESAR CON LA CHICA NUEVA —chillo emocionado el pelirrojo. 

— NO —no esperaba que Her dijera algo así— claro que no ¿por que besaría a una chica que no conozco?

— Porque te gusto —me dijo Luna haciendo un bailecito raro. 

— Y antes de que intentes negarlo —se adelanto Her— la cara que pusiste cuando la viste por primera vez nos dejo en claro que te gusto.

— Pues si, tal vez me había llamado  la atención, pero luego de esa discusión se me quitaron las ganas de hablarle de nuevo, es más creo que ahora la od...

Deje de hablar cuando vi a Morgan caminar junto con Ginny.

— ¿La que? —pregunto divertida Luna.

— La odio —deje de mirar a Morgan para mirar a mis amigos. 

— Deberías limpiarte la baba  amigo, se te esta escurriendo.

— Cállate Ron.

POV MORGAN

Estaba buscando un libro en la biblioteca para mi clase de mañana, cuando sentí la presencia de alguien en mi espalda.

— ¿Cómo va el plan? —me preguntó Tom.

— De maravilla —respondí sarcástica sin mirarlo.

— ¿Si? —pregunto sorprendido.

— No - se adelanto Mike a responderle. 

— ¿Qué fue lo que hiciste esta vez? —me pregunto divertido Regulus. 

—Conocí a Potter, pero no sabia que era el y en toda la clase, me encargue de llevarle la contra solo para molestarlo. 

— Y al final estuvieron discutiendo —agrego Gilbert y lo mire mal. 

— Pudiste omitir eso —fingí una sonrisa.

— Es información importante —me dijo Gilbert mientras se recargaba en el librero.

— Además de que al final de su discusión estuvieron a nada de matarse. 

— ¡Ya basta! —gruñí— nadie iba a matar a nadie, solo están exagerando. 

— ¿Por qué no intervinieron? 

— ¿Hablas en serio? —gruño Aidan

— ¿Qué se supone que tenías que hacer? —Gilbert no le dio tiempo a responder, porque siguió— Quiero ver como intervienes tu  a la próxima.

— No fue para tanto ....

Empecé hablar para intentar hacer que se relajaran pero Tom me interrumpió. 

— Ve a disculparte con el —lo mire incrédula.

— ¿Estas loco? No voy hacer eso.

— Si era de esperarse —rodo los ojos Mike.

— Es una orden —me informó Tom y sonreí.

— ¿Una orden? —le pregunte mientras me reía amargamente y el asintió— al diablo las órdenes. Yo no sigo tus órdenes, ni las de nadie. 

— Bien, entonces espero que tengas el valor de ir con mi padre y...

—  Y decirle que ya arruinaste todo el plan —la voz de Matheo se hizo presente en el lugar— solo porque tú orgullo es tan grande que ...

— Váyanse al infierno los dos —espete molesta.

— Ya estamos en el infierno, princesa —Matheo me sonrió de lado.

— Solo que ahora nos vas acompañar —agrego Tom.

— No me voy a disculpar - repetí.

— Entonces te deseo suerte, porque sino lo haces no vas a salir viva de esta. 

— Yo quiero ver la cara que pondrá nuestro padre cuando se entere de todo. 

— Nadie le dirá nada —mire a cada uno de los chicos de manera amenazante— yo me encargare de esto. 

— ¿Vas a pedirle perdón? —me preguntó divertido Matheo

—  Yo soy Morgan Mik.... —deje las palabras en el aire— soy Morgan —corregí omitiendo el  apellido— y JAMÁS le pedirle perdón a alguien.

Matheo se acerco peligrosamente a mi, pero no me pudo decir lo que quería, porque un chico se le adelanto. 

— ¿Eres Morgan? 

— Si. 

— Minerva te busca. 

— Gracias  —le dije y el niño me regalo una sonrisa antes de salir corriendo. 

— Debe de ser el momento de la selección —habló Mike.

— ¿Qué selección?

— La del sombrero, la cual va a determinar a que casa perteneces —me dijo Regulus sonriéndome.

El plan de los RiddleDonde viven las historias. Descúbrelo ahora