POV MATHEO
El ver la manera en la que esa chica termino lastimando a Morgan con puras palabras, me hizo replantearme la manera en la que yo también voy por la vida soltando verdades que hieren a los demás a mi alrededor, solo que la diferencia entre esa chica y yo, era que mi único fin de hacer todo eso, era por venganza, o de menos así era al inicio, porque si lo pienso bien, actualmente ya no me importaba si la otra persona me hacia algo o no, simplemente lo hacia porque de cierto modo disfrutaba que me tuvieran miedo.
El golpe en la puerta me hizo salir de mis pensamientos y me di cuenta que Morgan había salido corriendo, así que sin pensarlo dos veces y salí corriendo de tras de ella.
— ¡Morgan! —le grité para que se detuviera pero siguió corriendo— ¡Espera! —ella no me hizo caso y siguió corriendo.
Para cuando la alcancé, la vi de rodillas en el piso, con la cabeza agachada y llorando desconsoladamente. Verla de ese modo generaba muchas emociones encontradas, así que sin pensarlo dos veces me puse a su lado y la abracé.
— Tranquila —la apreté contra mi cuerpo.
— Toda mi vida ha sido una mentira —lloró.
Coloqué mi mano sobre su cabeza y empecé a frotar mi mano en su espalda, para calmarla un poco, mientras ella seguía llorando en mi pecho. Para cuando se separó de mí, me miro y vi que sus ojos estaban cambiando de color.
Se estaban poniendo rojos.
— Morgan, tus ojos...
Deje mi frase a la mitad, porque pegó un grito desgarrador y me volvió a abrazar. No sabía que era lo que estaba sucediendo.
— ¿Qué tienen? —sollozó sobre mi pecho y como no le respondí, se volvió a separar de mi, para observarme a los ojos nuevamente. Solo que ahora, el color rojo de sus ojos empezaba a desaparecer.
— Nada... —me rasqué la nuca nervioso.
— Este es el peor cumpleaños del mundo —me dijo con una sonrisa triste en la cara.
— Sé que puedo hacerte cambiar de opinión —le aseguré y me incline hacia ella.
Su mirada se encontró con la mía y tomé su cara entre mis manos, con el único fin de besarla, ya que solo estábamos a centímetros de distancia, pero no lo hice cuando note que se empezaba a calentar, pero cuando digo calentar, en realidad me refiero a que estaba hirviendo, así que me separe de ella, desconcertado.
— ¿Todo bien? —me preguntó también desconcertada.
— Estás caliente —le informé y me miro aún más confundida que antes. me levante del suelo—. Creo que voy a buscar algo de agua para ...
Ni siquiera pude terminar de avisarle lo que iba a hacer, cuando ella se desmayo. Nuevamente me acerqué a ella y cuando iba a tocarla, se le formó un circulo al rededor de fuego, por lo cual retrocedí.
— ¡Qué demonios esta sucediendo!
En el momento en el que el fuego desapareció, Morgan cayó al suelo, solo que ahora se estaba retorciendo de dolor, mientras murmuraba cosas que no entendía.
— Morgan —me volví acercar a ella.
De un momento a otro, dejó de moverse, así que rápidamente me acerqué a ella y me di cuenta que de nuevo estaba inconsciente, así que la levante con cuidado y la cargue para llevarla con sus hermanos.
Tal vez ellos supieran lo que estaba sucediendo.
[...]
— Necesito ayuda —grité en la entrada y todos sus hermanos salieron de la casa.
ESTÁS LEYENDO
El plan de los Riddle
Fiksi PenggemarEl señor tenebroso decide llevar acabo su plan para deshacerse de un adolescente, un adolescente que no es como los demás, ya que el es el único en el mundo que tiene el poder, la magia y la fuerza para derrotarlo de una vez por todas. Esta histori...