Family of the Past

Extra 7: Six Traits of Personality (5/15)

-... que no es mucho, pero me preguntaba si... - Esperaba que no fuera el muy posible desastre que se iba a encontrar cuando volvieran lo que lo tenía así de nervioso.

- Ha sido una salida fenomenal, Tsunayoshi, mira. - No sabía cómo rayos había convencido a todos esos locos paranoicos en venir aquí sin ninguna clase de guardaespaldas, pero lo apreciaba muchísimo. - ¿No es precioso? - Solo ellos dos, en uno de los sitios más hermosos que hubiera visto.

Las estrellas en el cielo, las olas suavemente dándose a conocer, la frialdad de la arena bajo sus pies, uno que otro cangrejo escondiéndose de la vista. Había sido un día maravilloso, una velada única, solo ellos dos. De dónde había sacado la idea, como había convencido a los propietarios de alquilar la playa solo para ellos dos, incluyendo la cabaña más grande... Más difícil debió haber sido convencer a sus guardianes. Que podría haber hecho...

- No me estas ayudando Akane. - Una queja casi infantil.

Iba a preguntar a qué se refería, cuando noto algo entre sus manos.

- ¿Eso es lo que creo que es? - No podía ser, ¡no podía ser!

- Este es mi tercer intento, ¿sabes? - En lugar de negar o afirmar, su novio jugueteo con lo que sea que tenía entre manos, sin mirarla. - Esto es mucho más difícil de lo que creí. - Ja, pobrecillo.

- Es lindo de tu parte intentar irte por la tradición, ¿pero desde cuando seguimos la norma? - Y ella creyendo que los nervios eran producto del casi seguro desastre que se encontraría cuando regresaran a casa. - ¿Puedo verlo? - Si era lo que creía que era-

- No. - ¡Picaron!, ¡para eso si me miras y sonríes así! - No puedes verlo hasta que me dejes ponerlo, de otra forma no tiene chiste. - ¿Es en serio?

- Te pasas. - Pero no le negaría. ¿Quién negaría esto en su lugar? - Adelante, voy a hacer de cuenta que no estás aquí. - Más le valía que se apurara, quería verlo.

- Lo lamento si no es lo que esperas. - ¿Uh? - Akane, ¿te casarías conmigo? - Quizás no debió de sorprenderse que primero se arrodillara en una rodilla y le preguntara, pero no abriera la ******* caja. - Se que es muy pronto y probablemente-

- Tsunayoshi, dormimos juntos más veces que las que no. - No sabia como no lo habían notado a estas alturas. Estaba segura de que esas cosas no deberían pasar. - ¡Por supuesto que sí!

- Uuufff... - ¿Esperaba algo diferente?, lastima.

No lo iba a soltar pronto, en especial si no dejaba que viera el anillo.

-x-x-x-

- Creí que era un anillo. - Si había uno, era lo más importante, ¿cómo lo iba a olvidar?

- Sé paciente. - La verdad es que un simple anillo lo vio muy... triste, muy plano, así que improviso. - No abras los ojos, no seas tramposa. - Era muy probable que lo hubiera arruinado, no sabía casi nada de joyería y pues... improviso en todo.

Había estado planeando esto por casi un año. Moviendo los fondos personales, ahorrando y haciendo de cuenta que no existían, y principalmente manteniendo a todos a oscuras. Ninguno aprobaba esta relación, lo toleraban. No tenian porque decirselo, no era tonto, podia verlo. O sentirlo, mejor dicho. Más bien había tenido la fortuna de que nadie le dijera nada de frente. Había tenido los ojos en esta chica desde que en aquel futuro ella lo cuidó y se quedó con él. Quizás una razón sumamente egoísta, quizás tonta, pero le valía un colmillo.

Si se enteraban de lo que estaba haciendo, no tenía duda de que se meterían y se lo arruinarían. Así que se había asegurado que ni su propia sombra supiera. Nadie sabría nada hasta que fuera demasiado tarde.