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Febrero, 1953.

Las rutinas siempre fueron sus favoritas. Gustaba de armarlas y cuidar cumplirlas al pie de la letra. Hoseok siempre fue así en cada aspecto de su vida. Fue lo segundo que jamás cambió de él con el paso del tiempo.

Lo primero fue el amor que sintió por Min Yoongi.

—Señor Jung.

Pasó un tiempo para que volviese a escuchar aquellas dos palabras saliendo de la boca de aquella mujer en específico. Fue su primer fin domingo posterior a la salida del trabajo que regresaba a Dwaen.

Habían pasado un par de meses desde que abandonó todo y se escondió en Jaepil con ayuda de sus hermanos. En un principio no quiso aceptar nada que previniese de su familia, sin embargo, el orgullo fue más débil que el hambre, así que debió recurrir a quienes le parecían menos culpables de su dolor.

—Amelie —saludó entonces con una sonrisa.

Era un hombre diferente. Renovado. Un corte nuevo de cabello adornaba su cabeza, cabello cuyo brillo regresaba poco a poco. Aunque el cansancio en sus ojos aún era notorio, no se sentía incapaz de continuar como en algún momento lo hizo. Se denotó en sus acciones. Continuaba sanando.

Extrañaba a Yoongi, no iba a negárselo a nadie, pero le dedicó cada una de sus oraciones sin falta cada noche. Deseaba que todo estuviese bien con él en ese entonces. Su amor por él también continuaba sanando. Era la única forma de amarlo y protegerlo como debía.

—¿A qué debemos su honorable visita?

—Sólo estoy de paso. Resuelvo un par de asuntos y visito a un amigo.

Ambos caminaron hacia la Iglesia. Seokjin llevaba esperándolo desde el día uno de su partida. Él siempre cumplió con su palabra. Todo iba mejorando, por lo que regresar no le resultó tan complejo. Al menos, por el momento, sólo para verlo a él.

—¿Visitará a los Min después de esto? —preguntó Amelie.

—No. —Sonrió a medias—. No tengo nada que ver con ellos.

Supo que algo sucedía cuando Amelie lo miró de manera incómoda, estuvo por decir algo al respecto, pero al final se despidió y marchó.

Tuvo claro que Yoongi sabría de su visita sin falta.

Dolía no poder cumplir su promesa con él aún.

Pero no faltaba demasiado.

Sólo un par de meses más.

A un capítulo del final + epílogo

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A un capítulo del final + epílogo.
🥺

La fragilidad de un nudo ✄ yoonseok.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora