—El antídoto debería hacer que te recuperes, pero tendrás que descansar hasta que el entumecimiento remita —explicó Nozomi una vez Kankuro se hubo bebido una taza con la mezcla.
—Vosotros también deberíais dormir esta noche —sugirió Baki—. Os hemos preparado unas habitaciones.
—Pero hay que encontrar a Gaara —dijo Naruto mientras fruncía el ceño.
—Aceptamos de buen grado vuestra hospitalidad —agradecieron los dos Hatakes al unísono.
—Qué repelús —susurró el Uzumaki. Le daba bastante mal rollo que hablaran igual.
—Mañana llegan los refuerzos, lo mejor es esperar —habló Kakashi.
—De acuerdo. —El Uzumaki aceptó a regañadientes. —Nozomi, dame tu mochila, yo te la llevaré a la habitación, debes estar muy cansada.
—No hay necesidad, no te preocupes, muchas gracias —dijo la chica, colocándose un asa en el hombro, pero su amigo se lo impidió.
—No quiero que pienses que te ayudo porque creo que eres débil, me has demostrado que no es así. Te ayudo porque eres mi amiga, así que, por favor, acéptalo —explicó el rubio seriamente. Ella dejó escapar una sutil carcajada y asintió.
—Naruto —susurró Kankuro—, salva a mi hermano.
—Tú déjamelo a mí —respondió el nombrado—. Después de todo, algún día seré el Hokage, de veras. Me irá bien que el Kazekage esté en deuda conmigo.
El grupo de la Hoja siguió a Baki hasta llegar a sus respectivas habitaciones. Kakashi y Naruto se quedarían juntos y Nozomi dormiría en una habitación a parte. Una vez dejaron las cosas en sus respectivas estancias, el Hatake se dedicó a seguir investigando a los Akatsuki mientras sus alumnos recorrían la Arena.
—¿Qué has hecho mientras yo no estaba? —preguntó el Uzumaki, poniendo sus manos en su nuca, mientras ambos caminaban por las calles del lugar.
—No demasiado, básicamente he estado entrenando y he hecho nuevos amigos gracias a Lee —explicó la chica, sonriendo.
—¿Nuevos amigos? —susurró Naruto, mirándola con curiosidad.
—Sí, Neji y Tenten, creo que era algo que debía pasar, al fin y al cabo, he estado con Lee mucho tiempo entrenando —respondió Nozomi, parando delante de un escaparate con dangos.
—¿Quieres parar a comer? —La chica enrojeció y negó varias veces. —¡No me digas que sigues sin tener dinero!
—Bu-bueno, algunos nos estamos comprando una casa honradamente —susurró ella, queriendo continuar con su marcha, pero el rubio agarró su muñeca.
—No te preocupes, ya pago yo —dijo, sonriendo ampliamente.
—No hace falta, Naruto, deberíamos volver ya...
—¡Venga, eres incapaz de rechazar unos dangos! —La arrastró hacia dentro del lugar y ambos se sentaron en una de las mesas del fondo. —¿Qué te apetece?
—Un Mitarashi, un Anko y un Hanami —contestó ella, mirando la carta.
—Está bien, ahora voy a pedirlo —susurró el Uzumaki con una sonrisa.
—Si ves que es demasiado caro, puedes quitar el Hanami.
—¿Caro? ¡Tengo que compensarte por todo este tiempo sin haberte comprado comida, estás más delgada por mi culpa, de veras! —exclamó antes de hacer el pedido. Nozomi observó el lugar, era bastante más acogedor que el resto de la Villa, pese a que también basaba sus cimientos en la arena, el interior estaba exquisitamente decorado.
ESTÁS LEYENDO
Smile | Naruto Uzumaki
FanfictionSonreír nunca se nos hizo fácil a ninguno de los dos, quizá a mí más que a Nozomi. Su nombre significaba esperanza, y eso es justo lo que me dio. Cuando nadie podía amarme, llegó ella, y, por Dios, lo puso todo patas arriba. -aerhyan | 2019