Nueva Especie

XLI

Estaba Derek sentado en el borde de la cama, observando a Elías y Tobias dormir. Al parecer, ellos ni habían escuchado la discusión de apenas unos minutos atrás.

Kyle entró a la habitación, mirando a su hermano.

—Es obvio que mi madre lo va a dejar quedarse, y él tampoco se irá, por ahora... Siempre se va de todos modos, se quedará un rato a jugar a la "familia feliz".

—Gracias por dejarnos pasar la noche aquí, pero mañana partiremos —le dijo sin mirarlo.

—¿A dónde irán? Tú sólo tienes cuatro años, Derek, ante los humanos, eres un niño, y cuando ellos los encuentren a ustedes tres solos, los encerrarán y separarán. No tienes que tener contacto con él, quédate aquí hasta que seas mayor.

—Mi madre me dejó una enorme suma de dinero, por un tiempo podré vivir con mis hermanos.

—Necesitas la figura de un adulto para poder pasar desapercibido entre los humanos —le dijo serio.

Derek asintió con la cabeza, mirándolo.

—Buscaré un humano, y lo controlaré, así como lo hice con nuestra niñera. Haré lo mismo, pondré un aviso de niñera, y la que de con un buen perfil, la usaré.

—No sé que tan malo sea para la humana controlarla mentalmente, Derek. Eso podría degenerar su salud mental —pronunció preocupado.

—No tengo opciones, no tengo una madre como tú.

Kyle respiró profundo, bajando la mirada.

—Mi madre está enferma ahora, no sé por cuánto tiempo la tendremos tampoco.

—Se salvará, descuida, se nota que es una mujer fuerte.

—Si fuera una mujer fuerte, no habría aceptado tan fácilmente a ese hijo de puta —masculló con rabia.

—El amor es extraño, Kyle, y nosotros no podemos entenderlo por completo —murmuró acariciado el cabello de Elías—. Tal vez el más cercano a entenderlo, sea tu hermana.

—Ariadna es muy sensible, como mi madre.

El pequeño castaño asintió con la cabeza, y volvió su mirada a Kyle.

—Él intentó asesinarme, días antes de que matara a mi mamá. Ella se sacrificó para que nosotros huyeramos, luego de ver lo que hizo. Pero gracias a eso, de llevar a mi cuerpo al límite, pude respirar bajo el agua.

—No sabía que podíamos hacer eso, pero tendré que ponerlo en práctica también. Yo por mi parte encontré que el agua nos ayuda a sanar más rápido, tuve un accidente cortando mi pierna cuando estaba en la piscina, y la herida se cerró muy rápido. No quedó cicatriz ni nada.

—Gracias por la información, sé que esto nos ayudará a futuro.

***

—Cuando estabas creciendo y desarrollándote en el vientre de tu madre, yo comencé a tener sentimientos por ti, Ariadna —le contó en un tono suave, acariciando su cabello—. Tú ibas a ser mi mayor legado, por quién más estaba esforzándome para darle todo, y que nacieras perfecta.

La pequeña sonrió emocionada, abrazada a su papá. Ambos estaban acostados en el sofá de la sala, y la niña a su lado. No había querido regresar a su habitación con su mamá y hermano.

—Estaba... Emocionado por tu llegada, ya quería conocerte. Y sí, es verdad, yo elegí tu sexo por el motivo que ya conoces, porque estoy seguro que tu hermano te lo dijo ya —pronunció indiferente—. Pero... Algo cambió cuando te vi por primera vez, cuando naciste. Tan pequeña, tan frágil, que todo lo que había deseado para ti, se esfumó rápidamente.

—¿Me querías, papi?

Bajó su mirada y observó sus grandes ojitos azules, expectantes, brillosos, atentos a su respuesta.

—Yo no sé lo que es amar, Ariadna, yo no voy a mentirte para hacerte sentir bien. Pero puedo asegurarte que si dejé que te quedaras con tu madre, que si decidí renunciar a ti, fue porque sabía que con ella llevarías una mejor vida que conmigo. Porque ya no quería que tú cumplieras con el objetivo con el que fuiste creada.

Ariadna sonrió y le acarició suavemente la mejilla a su padre, la barbilla, sintiendo su poca barba.

—Yo creo que eso es amor, papi. Cuando uno ama a otra persona, es capaz de abandonarla si sabe que no es bueno para ella. Y se siente una presión en el pecho, y nuestro corazón late fuerte, y sólo queremos abrazarlos y besarlos mucho.

La miró por un momento y la abrazó con ambos brazos, mirando el techo.

—No estuvimos mucho tiempo solos, pero cuando sólo viviste conmigo, dormíamos de este modo juntos. Siempre estaba al pendiente de ti y tus cólicos, sufrías de muchos cólicos —sonrió recondando aquello—. Pero de cierto modo... Era lindo escuchar tus quejidos, ver cómo tu pequeño cuerpo se encogía molesto. Siempre fuiste muy bonita, Ariadna. Mi única hija y mi más hermosa creación.

—Es porque me parezco a mi mamá —sonrió orgullosa.

—Mm, sí, es verdad, te pareces a tu madre físicamente. Y emocionalmente también si me pongo a pensarlo, eres como ella.

—Eso quiere decir que nos quieres a ambas —sonrió cerrando los ojos.

Adrián observó el techo en silencio, pensando en aquello... No sabía si era amor, o sólo que ella era especial por haber sido la primera en todo.

...

Estamos en el puesto #1 de ciencia ficción!! Muchas gracias, amores míos ❤️❤️✨ esto es sólo gracias a ustedes 🥺❤️✨