My Blight

[Capítulo 25]

Hexside

Lucía: Es tu culpa.- Era lo único que se había escuchado después de estar 20 minutos como niña regañada-.

Sí, después de tanto espectáculo que se causó en el lapso de 19 segundos, Amelia mandó a los dos ineptos de Lucía y Leandro al, pasillo. Nada más que, antes de salir, y con mucha vergüenza en su voz, la chica les pidió que se quedaran afuera esperando, y eso hicieron.

Todo alumno que pasara por ahí para ir a quién sabe dónde, para hacer qué, miraba extrañada a la pareja de “conocidos”, ya que, Leandro se encontraba sentado al lado de la puerta, y Lucía en la otra pared, delante de él.

En verdad parecían dos niños pequeños a los cuales regañaron hacer rato.

Leandro: No sé de qué hablas. Yo solo quería venir a ver cómo estaba Amelia.- Se defiende sin mucho más que decir, poniendo un toque de tranquilidad y paciencia en su voz-.

Noceda chasqueó su lengua ante tal respuesta. Si no fuera por culpa de él, probablemente.. Probablemente también estaría afuera esperando a que Amelia se cambiara, pero sabiendo que no está más enojada de lo que está.

Dejó sus manos descansar sobre su propio regazo mientras una sonrisa se dibujaba en su rostro. Si algo tiene que tener Amelia en cuenta, es que ella es más respetuosa que Leandro. Ese imbécil se quedó mirando a la Blight como si de una comida bien preparada se tratara.

Ella no hizo eso.

A ver, obviamente miró pero fue sin querer. No tardó ni tres segundos en alejar su mirada y comenzar a silbar como si jamás hubiera visto nada.

Aunque, eso sí, la imagen se le quedó grabada, y por cada vez que la recuerda (No es a propósito) su cara comienza a arder. Arde como si estuviese viviendo en el mismísimo Sol.

Lucía: Si no hubieses venido a molestar, esto jamás hubiese pasado.- Puede escuchar un leve "Click", alertando de que Amelia ya había quitado el cerrojo de la puerta- No seas tan molesto, ¿Quieres? No me gustaría convertir tu cara “Bonita” en mi nuevo saco de boxeo.- Acomoda bien su camiseta de educación física (Que dejaba un poco al descubierto su abdomen) y se levanta del piso, dejando de prestarle atención al chico-.

Okey.. Que agresiva.

Algunos intermediarios dicen que Lucía lleva muchísimo tiempo sin meterse en una pelea, así que.. Por más “Regular” que le caiga, para nada le gustaría meterse con ella.

Parecía la típica niña ligona que iba de sobrada por la vida, pero la verdad es que no tenía punta de tener una pizca de sobrada. Probablemente Lucía le meta una que lo manda al útero de su madre.

Para cuándo quiso contestarle, la puerta del cuarto se abrió, dejando ver, en efecto, a una Amelia bastante nerviosa y avergonzada por lo de antes.

No, es que, no había sido una persona, no. No una, si no dos, ¿Cómo puede tener tan mala suerte?

El de cabello castaño se levantó de inmediato, y se acercó a Lidia para quedar cara a cara con Amelia también (Aunque eso sí, aguardó distancia con Lucía).

Lucía, al contrario del varón, parecía tranquila. No había dicho nada desde que Amelia se había presentado, así que, si sigue los pasos de Lucía, lo más esperado es que lo haga igual de bien como ella.

Uh.. Al parecer la frase de “Todos quieren ser como Lucía” que siempre ronda por los pasillos de Hexside es verdad. No es algo que uno pida, es algo que te sale solo. Tanto ver cómo actúa Noceda, te hace querer ser igual a ella. Es como si fuera la estereotipo de Hexside.