My Blight

[Capítulo 12]

Boiling Park

Ya habían pasado varias horas desde qué Lucía se había quedado ahí "vigilando" a la Blight.

Ni Alexander ni Amelia se había dado cuenta de la presencia de Lucía, cosa qué frustraba un poco a Lucía... No debería estar así, sólo acaba de descubrir qué está enamorada, y está celosa a muerte.

Lucía:- Mira a la pareja riendo desde lejos- Tsk, si estuvieras conmigo, no estarías aquí haciendo éstas tonterías con él, estaríamos juntas en casa, abrazadas sin querer separarnos jamás..- Nah... Esos pensamientos nunca duran cuándo Lucía observa el cuerpo de Amelia- O podríamos estar follando, ¿Quién sabe..?- Ríe levemente al decir aquella tontería-.

Un poco cansada de estar allí, la humana saca su celular, observa la hora y miles mensajes de su entrenador, Luz, y más gente.. (Supuestamente, fans de ella).

Lucía: Dadme una hora más.. Ahorita les contesto, ¿Sí..?- No podía hacerlo, porqué no siempre tiene autocontrol emocional en sí misma, y si llega a ver algo malo, se enojará, y probablemente sea descubierta-.

Minutos después, Lucía se queda callada al ver una escena qué podría serle de mucha ayuda. O eso cree.

Alexander, sin razón alguna, trató de acariciar, o tan siquiera tocar las orejas de Amelia, pero ella se reía y negaba ante eso; no puede arriesgarse ahora qué están en la calle.

Lucía: Uhmm.. A mí me dejaste tocar tus orejas, Amelia...- Frunce su ceño ante eso; ella tiene curiosidad ahora, en qué le podría estar pasando a Amelia, para denegar algo así-.

. . .

Amelia: Hasta luego, ¡Te escribo cuándo llegue a casa, lindo!- Anuncia y halaga la Blight, recibiendo la misma despedida qué su novio-.

La bruja no dudó en sacar su celular sin demora, y comenzó a caminar hacia su casa. Tiene sueño, están a Sábado, y apenas pudo terminar sus malditos estudios.

Amelia: Uhmm...- Le escribe a Amity, quién le había escrito hace rato preguntado sobre su paradero- Tranquila, pequeña, yo jamás te dejaría al merced de esos malditos abusadores- Sonríe, no pudiendo esperar más para ver a Amity- Te compraré algo de camin-

Sus palabras quedaron entrecortadas al sentir cómo alguien tomaba de su antebrazo; ella no podía mentir, se asustó mucho, pensando qué era alguien.. No muy buena onda, podríamos decir.

Lucía: A-amelia, espera, no te marches por favor..- Jadea Noceda, notando cómo Amelia volvía su mirada desinteresada hacia ella- ¿P-podemos hablar, por favor..? Necesitamos habl-

Amelia: Lucía, de verdad, quiero irme a casa y... Si me tienes así, muy difícil de qué lo haga, jaja- Vuelve su atención hacia aquella aparato humano- ¿Puedes soltarme-

Lucía: ¿¡Qué más hay qué hacer para qué veas qué ese tipo te hará daño, qué más hay decirte para qué puedas darte cuenta de qué saldrás herida!?- Suelta el antebrazo de Amelia, para no enojarla más- Amelia, escúchame por favor. No me hagas caso con ésto si quieres, pero hay algo sobre mí, qué deberías sabe-

Amelia: ¿Qué, eres una bruja? Vamos Noceda, deja de decir tonterías, ¿Quieres?- Ella estaba apunto de irse, pero un suspiro con bastante tiempo la detiene-.

Lucía:- Comienza a erguirse, para no parecer la inútil aquí- Espera... Jaja, y-yo debería hacerte esa pregunta, "humana"- La bruja se queda callada, y atiende a lo qué iba a decir la Noceda- L-la... La última vez qué mis manos tocaron tus orejas, gemiste cómo si nada; y hace rato, ví qué él te trataba de tocar, pero lo evitaste cómo si dependieras de ello, ¿Qué significó eso?