capítulo 31: No quiero un cumpleaños

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- (¿A caso me está evitando? Llevo todo el día sin haberlo visto, ¡pero todos dicen que lo han visto!)-pensó agobiado y algo cansado el can, sin poder comprender que era lo que pasaba por la cabeza del felino.

Aún así, al llegar a su casa, quiso pensar todo lo que pudo como podría hacer el cumpleaños del felino, darle un día en aquel mes o escoger otro pero celebrarlo en aquel mes, se quedó viendo todos los eventos que tenía anotado, sabiendo que no había ninguno importante a finales de aquel mes.

Aunque igualmente se puso a pensar como podrían ser las decoraciones, la comida, de donde conseguirian todo, que regalo podría darle, estaba totalmente sonrojado pensando en las posibles reacciones del felino, habiéndose animado y quitado todo pensamiento malo sobre lo de aquel día.

Pensó lo más positivo que podía, hasta que notó que en las casas había una señal leve del humo rojo que expulsaba el felino, por lo que se fué sin dudar a su habitación animado de la noticia del cumpleaños del felino, habiendo memorizado exactamente lo que le diría y como, estando impaciente a que llegue, moviendo con rapidez su cola al notar el leve movimiento del árbol que estaba frente a su ventana.

- ¡Catnap! -saludó enérgico al verlo, alejándose de la ventana para que pudiera entrar, notando que no entraba. Aun asi, quiso contarle su plan. - ¿Bobby ya te comentó lo que pedí?, ¡Igualmente te lo diré, te haremos una celebración de cumpleaños!

Avisó enérgico, viendo que el contrario se acercaba al marco de la ventana, pero meramente para sentarse en esta y mirarle con sus orejas agachadas, negando con la mirada.

- ¿Te parece... Mala idea? -preguntó confundido, viendo que asentía a lo dicho. - Pero... Je.. ¿Por qué?, podrás escoger la decoración que quieras, las comidas que quieras, tu decides que puede haber y... mh... ¿Es por... La fiesta de Crafty?

Cuestionó sin querer acercarse para evitar tensar más al felino de lo que estaba, viendo que asentía a lo dicho, por lo que pensó un poco.

- te prometo no dejarte solo en ningún momento de la fiesta, ¡seré tu acompañante y alfritrion! No te dejaré ir solo a ninguna parte si así te sientes seguro, ¡seré como tu guardaespaldas! -Trató de animar enérgico, viendo apenado que seguía negando. - Por favor no odies un cumpleaños porque hubo un malentendido en uno, por favor... Déjanos compensarte, me disculpo en el nombre de todas las criaturas sonrientes, las cosas que dijeron no debieron ser dichas, ¡debi callarlas apenas las escuché! Debí escucharte también, no sólo dejarme influenciar por los comentarios

Se disculpó apenado, bajando sus orejas las cuales cubrieron levemente su rostro y su mirada preocupada, sujetando su propio brazo con tristeza.

- ni siquiera debería excusarme... Me dejo llevar emocionalmente y eso que ni siquiera sé identificar bien lo que siento o lo que el resto siente, siempre cuando me doy cuenta es tarde... Hay una gran posibilidad de que también hayas dejado de confiar en mí porque no noté que tal vez todo el ruido y los gritos te hayan asustado, no noté que tal vez te sentias solo en un ambiente en el que no estas acostumbrado... -Hablo con tristeza, aún sonriendo levemente- Pero si te sientes seguro con Bobby...¡no tengo problemas que ella te cuide y...!

Antes de poder continuar, al elevar la mirada, se tensó al notar que el felino estaba frente suyo, agachandose un poco para abrazarlo y apoyarse en su pecho levemente con las orejas bajas, por aquello, el can quiso abrazarlo notando que se alejaba esquivando su abrazo.

- Eso es... Un "" a la opción de irte con Bobby, ¿verdad...? -preguntó tratando de no mostrarse dolido por aquella decisión, viendo que el contrario desviaba la mirada, pero negaba levemente.

Así que le miró con esperanza, seguido por olfatearse de reojo, notando que tenía el olor a jazmín, viendo alerta que el contrario se disponía a devolverse a la ventana para irse.

- ¡e-espera! Quédate esta noche, si quieres hacemos pijamada o descansamos -pidió inmediatamente, viendo que el contrario se detenía mirándolo de reojo, asintiendo levemente devolviéndose.

Y al ver que se dirigía a la puerta, supuso que pensó que podía quedarse, pero en el sillón, por lo que rápidamente se sacó el chaleco que llevaba y caminó a la cama.

- d-de hecho... Aún le temo a la oscuridad y... ¡No no-! -soltó rápidamente al ver que el felino le iba a lanzar el humo rojo- ¡Me es cómodo dormir por mi cuenta! Pero... No quisiera estar solo

Se excusó casi inmediatamente, dándole un espacio al felino de acostarse mientras se adentraba en las tapas y se las elevaba sonriente, mirándole casi en ruego, para luego sonreír más animadamente y enérgico al ver que se sacaba su chaleco dejándolo en una silla para así acercarse a la cama.

Cuando vió que se acostó, no le importó que le diera la espalda al hacerlo, bueno, si le dolió un poquito, pero agradecía que al menos se animara a acompañarlo.

- Catnap... -llamó en susurros, notando que movía sus orejas levemente, así que supo que fue escuchado. - Me sigue dando miedo la oscuridad jeje...

Soltó avergonzado, moviendo su cola enérgico al notar que el contrario se giraba a mirarlo algo confundido.

- Nunca me dijiste a que le temes... -Le volvió a susurrar mirándolo curioso, viendo que desviaba la mirada sobandose levemente su mano.

- al fuego... -Soltó bajo el felino, seguido por mirar al can, quien le miró cada vez más emocionado.

-Entonces si que te salvé de la broma de Kickin -Afirmó orgulloso de si mismo.

- je... Si

- Llevaré siempre una botella de agua, así si vemos aunque sea un pequeño fuego, te salvare -Le prometió mirándole animado. - por lo que... En tu cumpleaños no habrá fuego, así que llevaremos muchas linternas, ¿mañana vamos al sector de juguetes para escoger las decoraciones?

El felino negó, por lo que el can pensó un poco, mirándole nuevamente al ocurrirsele algo.

- ¿quieres que hagamos manualidades como decoración? -el contrario volvió a negar. - Mh... ¿Solo linternas y regalos?

- No quiero un cumpleaños...

- ¿Por qué? Si quieres Bobby puede acompañarte...

- No es por eso... -Lo que decía el de pelaje morado mantenía confundido al Can, quien pensó un poco- No quiero un cumpleaños porque ya soy distracción suficiente como para gastar más sus energías...

Aquello era algo que no esperaba el contrario, pensando inmediatamente que podría decir, rogando que su comentario sea el correcto, debido a que notó que cualquier cosa y palabra podía desanimar o animar al contrario, debía de ser cuidadoso.

El minuto que cambia todo (Catnap x DogDay) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora