El minuto que cambia todo (Catnap x DogDay)

capítulo 40: No voy a soltarte

- ¡Catnap no continues! -pidió Bobby preocupada, pero Hoppy no le dejó acercarse por seguridad.

- aún así, incluso te regalo mi fiesta de cumpleaños, te regalo mis regalos. Quédate con todo.... Porque en algo tenias razón cuando afirmaste que por algo estaba solo antes... Y es porque a mí nunca me hizo falta estar con alguien -Finalizó aún con molestia, para luego retirarse corriendo.

- a-agg... ¡Catnap! -llamó DogDay al levantarse y correr detrás del felino, ignorando los llamados del resto, corrió lo más rápido que podía hasta que logró alcanzarlo, sujetando su brazo en un intento de detenerlo, logrando esquivar un rasguño del contrario, pero al hacerlo, ambos tropezaron y cayeron adoloridos al suelo. - Auch... Catnap, relájate, por favor

Pidió levantándose para sujetar al contrario, quien negó soltando leves maullidos alertas, sujetando con fuerza al Can de la cintura con su cola para alejarlo, pero éste le había sujetado los brazos y negaba soltarlo.

- ¡Catnap enserio me lastimas! -Pidió al sentir las garras del contrario al mismo tiempo que sentía la cola estrujandole, hasta que tuvo que soltarse y taparse la cara al ver que expulsaba su humo rojo.

Fue apartado, a lo que el felino se dispuso a tratar de levantarse y correr nuevamente, pero DogDay con determinación se volvió a levantar corriendo otra vez donde el contrario, aun tapándose la nariz para evitar respirar el humo que soltaba.

Y de un salto, logró atraparlo de nuevo, quedó arriba suyo abrazandolo con fuerza mientras usaba el cuerpo del felino para evitar respirar el humo, aunque la falta de aire le mareara un poco. Pero vió que el contrario soltaba leves risas, así que trató de alejarlo del sector del humo, logrando por fin respirar, revisando sin dudar al que aun abrazaba con su vida.

Notando que a pesar de haberlo escuchado reir, tenía un mirar vacío mientras lloraba, por lo que lo abrazó dejándolo en sus piernas, apoyándolo en su pecho, pero notó que nuevamente trató de alejarse.

- (¿es por el olor a Crafty? ) -se preguntó para luego tratar de abrir la cremallera de su chaleco, y al lograrlo, nuevamente volvió a apoyar al contrario en su pecho, notando que aunque se removia para alejarse, poco a poco fue cediendo.

- Deberías estar abrazandola a ella... No a mí... -Escuchó por fin por su parte luego de escuchar su llanto y sus leves risas.

- ella puede abrazar al resto, en cambio tú no. -respondió sin dejar de abrazarlo, apoyándose levemente en su cabeza.

- Tengo a Bobby...

- pero me tienes a mí también, y yo estoy aquí, no Bobby, así que yo tengo derecho a abrazarte. -afirmó sin dudar, viendo de reojo la cola del contrario, moviéndose lentamente.

- pero con ella es diferente... -La repuesta del felino, sin saberlo provocaba nuevamente aquella molestia en el pecho al Can, quien sujetó sus brazos para alejarlo y obligarlo a mirarle. - Tú mismo lo dijiste, Crafty es diferente a Bobby...

Habló antes que el contrario, quien le miraba apenado, sin soltar los brazos del contrario, para luego abrazarlo de nuevo, pero sujetando la cartera de éste para sacar la libreta.

- ¡Sueltalo! -gritó inmediatamente catnap sujetando al libreta para evitar que lo lea.

- ¡necesito saber que han hablado para poder comprenderte, catnap!

- ¡Nada de lo que no hemos hablado tú y yo! -afirmó aun sin soltar la libreta alerta de que lo leyera.

- Entonces si es algo que sé, ¿¿por qué no me dejas verlo??

- ¡Porqué es privado, no ando diciéndole a todos los que hablamos tú y yo!

- ¡Apenas y hablas con el resto!, ¡Siempre tengo que estar vigilando todo porque te cuesta hacer las cosas! -Aquejó el Can, sintiendo como se caía de espaldas adolorido, teniendo la libreta en manos, pero miró preocupado al contrario, notando su mirada dolida.

- entonces Craftycorn tenía razón...

- Ni siquiera has hablado con ella, Catnap

- Lo intenté, pero nunca quiso hablarme y cuando lo hizo fue para decirme exactamente lo que ahora me dices... -Lo dicho confundió al sol, quien ni siquiera había alcanzado a abrir la libreta, mirando hacia el felino. - Si ya estabas harto de estar siempre detrás de mí, lo hubieras dicho, de que estabas cansado por mí culpa.

- N-no no, catnap, yo no me refería a eso, no estoy cansado de tí o de ayudarte -Afirmó levantándose al apenas ver que se levantaba el contrario.

- ella sabía que dirías eso je... También que por mí culpa tienes rasguños, que no estás atento a tu trabajo, que has estado cansado de tener que verme siempre, pero nunca diras nada porque eres tan bueno... A diferencia de un monstruo como yo... -comentó riendo levemente por la situación mientras trataba de dejar de llorar. - Perros y gatos no deben ser amigos... Y esta es la razón...

Finalizó queriendo irse, pero suspiro pesado cuando sintió que nuevamente el contrario lo abrazaba.

- no te soltare. -Habló determinadamente el Can, sentándose bruscamente aun sujetando al contrario.

- Sueltame. -Ordenó catnap con agobio, seguido por morder con fuerza el brazo del contrario, escuchando un quejido adolorido, pero meramente siguió abrazandolo.

- ya dije que no eres un monstruo... Ya dije que somos amigos, no porque seamos un perro y un gato debemos de seguir aquel supuesto odio... Yo no te odio, ni te tengo miedo, yo te quiero y mucho... -Habló aun aferrado el contrario, sintiendo que de a poco dejaba de morderle. - La diferemcia entre Bobby y Crafty, fue que Bobby te llenó de regalos... No sabía cómo podías reaccionar, no pude ver bien si estabas asustado o no, meramente te quedaste quieto viendo todo con tu pelaje erizado y pensé que te habías abrumado... Me preocupe por eso y... Me enoje al pensar que Bobby aunque tuviera una buena intención, nunca consideraba si te sentirias cómodo o no con su atención... Cómo cuando te abraza cuando no quieres o intenta darte besos sin tu permiso...

Explicó algo avergonzado, ni siquiera sabía si aquello había sido la razón por la que se había molestado, pero después de pensarlo supuso que pudo haber sido aquello.

- No quería enojarme con ella... Es tu mejor amiga, pero no sé si sé autonombró tu mejor amiga para tenerlo de excusa para abrazarte de la nada o abrumarte con cosas... -Admitió separándose un poco del abrazo al notar que ya no tenía intenciones de huir, pero no dejaba de ver su herida. - si... E Estado cansado, pero no del cansancio de estar contigo o ayudarte, solo cansado de no entender lo que sucede... Porque todos se ven felices y falta un pequeño error para que dejen de estarlo y se alejen de tí... Ellos te temen, especialmente si tienen poca información de tí...