El minuto que cambia todo (Catnap x DogDay)

capítulo 75: Nuevo descubrimiento

Kickin luego de desahogarse llorando, se dispuso a guiar al can hacia el elefante, quien luego de ayudar a juntar a los niños a almorzar, se fue a reunir a algunos del Grupo para que pudiera hablar o abrazar al recién llegado.

- Pensé que estaban muertos... Que alivio... que alivio... -admitió Dogday sin dejar de abrazar a sus amigos con fuerza.

Bobby solo se dejó abrazar mientras lloraba abrazando un poco al contrario, y Hoppy también abrazó al can animada, pero quejando levemente de que el abrazo parecía querer romperle los huesos.

- Casi, incluso ella nos dió miedo, no dejaba de decir platillos con nuestras partes del cuerpo -Afirmó alerta kickin mirando de reojo aún alerta a la cerdita cocinera que alimentaba a los niños.

- Le ganaba el hambre y justo encontramos comida, estábamos más aterrados de ella que de cualquier otra bestia -Admitió Bubba con un fuerte escalofrío. - Es una información nueva, nuestra compañera puede hacer platillo con TODO si es que tiene hambre.

- ¡DogDay! -escuchó el mencionado, y al mirar hacia el sector en donde le guiaban, no pudo evitar ver con felicidad que estaban todos los niños a salvo, quienes se acercaron a abrazarlo dejando sus almuerzos de lado.

- ¡e-estan vivos, todos, que alegría! -Soltó ignorando el dolor de su restauración, meramente se agachó abrazando a todos los niños que le eran posibles.

- Jeje, dejemos que se quede con ellos un rato, un poco de ternura infantil puede hacer que olvide un poco lo que habrá pasado allá abajo -Comentó Bobby, siendo la idea aceptada por el resto.

Pasaron largos minutos en donde el Can pudo jugar y abrazar a cada niño del lugar, incluso a los que eran bebés debido a que también estaban allí. Teniendo que darse un descanso por que nuevamente sentía dolor en su abdomen, así que Bubba tuvo que retarlo para poder dejarlo sentado y acomodarle otra vez las vendas.

- Je... Me alegra que estén bien, yo estaba tan preocupado por ustedes -Sonrió DogDay luego de dejar de llorar de la alegría que sintió (y también por el dolor del abdomen).

- ¿Gatito también te ayudó? -La repentina pregunta de un infante petrifico al de pelaje anaranjado, quien miró rápidamente al niño que lo había comentado.

- ¿Catnap..?

- ¡sii! Nos hizo paseo hasta otro lugar jeje -Agregó otro niño con felicidad.

De la nada todos los infantes comentaban sobre el felino, quien había llegado y ofrecido a jugar con ellos a "Quien abraza al gatito, puede darle un besito", pero había una nueva regla, quien hiciera ruido, no podía participar, así que todos rieron lo más silenciosos que podían y lo siguieron corriendo, luego este se dejó abrazar a propósito en otro sector fuera de la escuela.

Dogday trataba de encontrar la incoherencia que le contaban, no sabía cuando había supuestamente sucedido, cómo y el por qué, por lo que no podía evitar mirar hacia sus compañeros, quienes parecían algo incómodos, y Bubba se mantuvo serio suspirando pesado.

- Ya deben de volver a sus puestos, si no comen, Picky se enojara de nuevo, recuerden -Avisó con firmeza el elefante, por lo que los niños, aunque algunos quejaran, igualmente se despidieron de Dogday y se dirigieron a sus puestos a comer.

- Lo que dicen sobre Catnap... -Insistió preocupado el can levantándose aún procesando aquello.

- Quisiéramos decir que mienten para hacer una muy mala broma, pero estuvimos investigando un poco y... Ha... Con el que venias, nos dejó un par de Cintas, y hay una que escuché hace poco sobre la escuela. Pero.... Ya les advierto que es algo perturbador -Avisó Bubba mirando preocupado a Kickin y a Hoppy, quienes se miraron preocupados.

- Quiero verla y escucharla -pidió Dogday inmediatamente preocupado de aquellos temas.- veamos todas, tal vez... Pueda ayudarles en algo, necesito saber que sucedió en mi ausencia.... Pero antes... Quisiera ver al resto de nuestros compañeros, Bubba...

- No sé si sea buena idea... Bubba usa el gas de Catnap contra Bobby luego de que se volvió... Algo loca, no se puede hablar con ella... Llora, y cuando no, se auto lastima, el tema de Catnap le afectó mucho e insiste que fue su culpa, pero nada de lo que digamos le calma -Explicó la concejal verde, apoyándose un poco en Kickin, quien la ayudó a equilibrarse al notar que andaba cansada de saltar con una sola pierna, ya que no tenia la derecha, y le dolía apoyarse mucho en el bastón que usaba.

- Y Crafty también a estado rara, no nos habla mucho, pareciera que se fuerza en sonreír también, no se a bañado la sangre que lleva desde que estábamos abajo, y solo dibuja... Ni siquiera sabemos que dibuja, son manchas Rojas siempre, a veces susurra cosas, pero no se le entiende nada, apenas come también -Agregó Kickin respecto a la compañera restante.

- ha... Yo... Necesito hablar con ambas... -Suspiro el can luego de recordar el vudú del felino- Tengo... Muchas dudas también, que creo que solo ellas pueden responderme... Bubba, ¿me guías hacia donde está Bobby? Por favor

Pidió con cierta firmeza y algo de seriedad, el tema de la pócima le preocupaba, sabiendo que por la culpa de aquella pócima, no se podía razonar con el felino, aunque en su mente también rondaba sobre que tipo de tratos o cosas le había hecho la unicornio al de pelaje morado.

Caminaron hacia una de las oficinas que estaban algo apartadas, cerradas por precaución, allí se encontraba la Osa, con cuerdas en sus manos cruzadas y apoyadas en su pecho que le prohibían lastimarse, al parecer el efecto del humo rojo había acabado, debido a los bajos llantos que se escuchaban de la peli Roja, quien tenía levemente una oreja rota al igual que una cicatriz en uno de sus ojos.

- Perdón... Snif.... Perdón... Soy horrible... Soy un monstruo... ¿Por qué lo hice?... No debi hacerlo... Todo es mi culpa... -Soltaba con dolor sin mirar hacia los que habían llegado a verla, mirando preocupada hacia la puerta cuando la escuchó abrirse.

- Bobby... Ey, si necesitas hablar, aquí estoy -Avisó Dogday al entrar mientras se acercaba con cuidado de no alertarla.

- ¿D-Dogday...?, ¡D-dogdayyy! Waaa.... -no podía evitar aumentar su llanto, apoyándose en el hombro del contrario cuando este se acercó a abrazarle.

- Desahogate... Eso... No te preocupes... Lograré resolver todo... Pero necesito que respires, si? Eso... Llora lo que necesites llorar, te acompañare hasta que te sientas mejor... -Insistió con una vida calmada para relajarse a su compañera.

Pasando varios y largos minutos de paciencia.