I'm not the Magcon girl.

Day 7.

Había estado hablando con los chicos porque estaba aburrida y quería hacer un directo con alguno de ellos, pero la mayoría estaban ocupados o no querían venir a mi casa. Al final, les di pena a los Jacks y ambos se presentaron en mi casa, aunque sabía que muchas ganas no tenían.

—Podéis alegrar la cara —sugerí mientras configuraba el ordenador. Las dos veces que los había mirado estaban pendientes de sus móviles y serios.

—Podemos irnos también —sugirió Jack G y yo me giré para fulminarlo con la mirada. Él se encogió de hombros y volvió su vista al móvil.

Una vez que terminé de configurarlo todo, avisé por mis redes sociales y comencé el directo, no sin antes obligar a ambos chicos a ponerse a mi lado y colaborar un poco. Unos minutos después Jack J se disculpó, diciendo que había algunos problemas con su parte en la maqueta de una canción y que tenía que irse, por lo que G y yo nos quedamos solo. Yo comencé a leer algunas de las preguntas y a responderlas, mientras que Jack, bueno, él seguía a su bola.

—¿Es verdad que Jack y tú os odiáis? No hay muchas fotos vuestras —leí y solté una carcajada ante tal cosa. Jack Gilinsky era muy callado, y tenía un carácter fuerte y algo serio, pero no nos odiábamos, solo que nuestro carácter no se parecía.

Jack levantó la cabeza y moduló una sonrisa al verme reír.

—He perdido por tu estúpida risa —dijo mientras me enseñaba el juego que tenía en su móvil.

—Has perdido porque eres malo —le contradije y evité reírme, pero al final no pude aguantarme. Él frunció el ceño y rodeó los ojos.

Miré a la cámara y sonreí de forma traviesa, haciéndole entender a los que me veían que le jugaría una mala pasada a Jack. Cuando él volvió la vista hacia su móvil, tomé su cara con ambas manos y me puse a repartir besos por toda su cara mientras le chillaba como una abuela haría con su nieto. Jack comenzó a reír, como nunca lo había visto a hacer y comenzó a echarse hacia atrás para que lo dejase, lo que hizo que casi me cayese encima suyo por lo que me agarró de la cintura. Aun así, no dejé de molestarlo hasta que me lo pidió por favor.

—Iv, tengo todas tus babas en la cara —se quejó haciendo una mueca y yo le saqué la lengua.

—Y así es como tenéis que hacer que vuestro chico ría —dije mientras guiñaba un ojo y me sentaba de nuevo al lado de Jack, con su mano aún puesta en mi cintura. Tras eso seguí leyendo —. Lo siento, pero no me gustas y menos que estés tan pegada a los chicos. Todos los días estás con uno nuevo.

Vaya un comentario de odio entre los muchos que me enviaban. Jack me miró un poco afligido y yo me reí, no era nuevo para mí.

—Agradecería que os ahorraseis esos comentarios —masculló Jack un poco enfadado y yo puse mi mano en su pierna para darle un pequeño apretón para que se calmase.

—Estoy todos los días con uno nuevo porque son mis amigos y salgo con quien me apetece —comenté y volví a reír ya que su comentario cada vez carecía de menos sentido para mí —. Además no podéis echar odio a cada persona que se les acerquen, son personas, van a tener novias, se casarán y esas cosas.

Tras eso, los comentarios de las fans que me odiaban incrementaron, diciéndome de todo. Desde que no merecía lo que tenía hasta que era una zorra que solo los quería por dinero y fama y yo llevaba con ellos desde un poco antes que fuesen famosos. Dudaba mucho que fuese por dinero. Jack se enfadó al leer lo que me ponían y me hizo terminar el directo antes de lo planeado. Tras eso planeó una reunión urgente con los chicos, y como no, sería en mi casa.

Como Jack era tan serio, todos los chicos se lo tomaron muy a pecho y la mayoría llegaron minutos después de que él mandase el mensaje. Todos fueron a la cocina para coger algo de comer y después se sentaron en el sofá o donde quisieron. La confianza daba algo de asco. Yo me senté junto a Shawn, apoyando mi cabeza en su hombro y al otro lado se sentó Nate, el cual me saludó con un choque de manos.

—Tío habla ya que estaba haciendo algo importante —bufó Taylor y Jack lo fulminó con la mirada.

—Hacerte una paja no es más importante que esto —masculló de la mala gana y de inmediato sentí unas manos que tapaban mis orejas y otras que tapaban mis ojos.

—Shawn, déjame ver —repliqué mientras reía y quitó su mano, sin embargo, Nate siguió tapando mis orejas.

—Vais a quitarle la inocencia a esta pobre niña —se quejó Nate y reí aún más fuerte, eran unos idiotas.

Pero era mis idiotas.

—De inocencia no le queda nada —dijo Sam y yo le tiré un cojín que tenía detrás de mí, dándole de lleno en la cara por lo que todos rieron.

—A ver, ¡silencio! —dijo un poco más enfadado Jack y todos nos callamos ante su tono serio —. En serio, no me ha gustado los comentarios que ha recibido hoy Ivie, y creo que deberíamos hacer algo.

Todas las miradas se centraron en mí, después la volcaron en Jack, y después de nuevo en mí. Yo escondí mi cara, porque no me gustaba que me mirasen de aquella forma y Shawn pasó un brazo por mis hombros mientras me acercaba a él y me daba apoyo.

—Yo los he leído Jack, pero sabes que son las fans y que sin ellas no estaríamos aquí —dijo Cameron algo apenado y me miró con arrepentimiento.

Asentí con la cabeza y le sonreí, no necesitaba que hiciesen nada porque estaba acostumbrada y porque sabía que gracias a sus fans estaban donde estaban y entendía que tenían que estar con ellas y decir cosas que las complacieran.

—Yo opino como Jack, y sabéis que a mí me la suda un poco y que siempre digo lo que quiero —dijo Matt y se encogió de hombros.

—No hace falta nada de esto, sabéis que a mí no me afecta nada —dije yo finalmente y todos volvieron a mirarme, haciendo que mis mejillas se encendieran.

Jamás me acostumbraría a tener todas sus miradas puestas en mí.

—Yo opino que podemos pedir para cenar y comentarlo mientras comemos —propuso Aaron y todos asintieron.

—Sí, pero que pague Ivie —dijo Nash y yo lo fulminé con la mirada, pero todos le dieron la razón y sabía que oponerme no serviría.

Me gustaba estar con ellos, eso nunca lo negué, pero no me gustaba tanto cuando gastaban mi dinero. Finalmente llamé y pedí comida china mientras todos los demás debatían entre qué deberían hacer para acabar con los comentarios de odio. Yo no quería que ellos se pusieran en contra de sus fans por mí, pero sí valoraba que ellos intentasen que me sintiese bien con ellos y que nadie se sobrepasase conmigo. Eran muy protectores conmigo y la verdad, yo también lo era con ellos.

En cuanto llegó la comida todos empezamos a comer, robando comida de los platos de los demás y pidiendo de aquellos a los que no alcanzábamos. Todos reíamos, pero las risas se acabaron cuando la puerta de casa se abrió y, debido a que el salón daba a la entrada, tuvimos un primer plano de mi padre besándose con la señora Williams, la cual, si no recordaba mal tenía marido e hijos.

—¡Papá! —chillé horrorizada y ambos se separaron con rapidez. Se quedaron mirando en mi dirección y abrieron sus ojos al ver que no estaba sola.

No sé qué le pasaba en la cabeza a mi padre, pero desde luego él la estaba cagando y encima tendría a todos mis amigos preguntando por aquello.

—Ivie, pensé que estarías sola —dijo avergonzado y yo negué con la cabeza.

—Dios papá... —murmuré apenada y llevé una mano a mi frente. Solo esperaba que eso no le metiera en más problemas, no cuando ya había conseguido salir de los que había tenido.

N/a: espero que te haya gustado y si es así no te olvides de la estrellita 🌟. María xx