Day 26.

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El vuelo hacia Argentina fue eterno, cuando por fin dijeron que el avión comenzaría a descender casi lloro de alegría debido a que tenía a Nash babeando en mi hombro y a un niño dando patadas en mi asiento. Pero era lo suficientemente educada como para no girarme y arrancar su pierna. Podía aguantar, o eso creía porque al final acabé gritándole un par de cosas que le hicieron llorar y para colmo todos me regañaron a mí.

El tiempo, a diferencia de Estados Unidos, era genial en Buenos Aires. Pero llegamos tan cansados al hotel que tan sólo nos dirigimos a nuestras habitaciones y dormimos. O eso fue lo que yo hice junto con Shawn y Jacob, ya que la habitación era triple y Bart no me dejaría dormir con ninguno otro. Aunque creía que era más bien ideas de mi padre y que Bart sólo obedecía. Realmente daba igual con quien durmiese en la habitación, habíamos dormido todos juntos, en una misma habitación muchas más veces.

Me levanté porque mi móvil no había parado de sonar en ningún momento, quien fuese el de los mensajes me estaba molestando demasiado. Cogí el móvil, dispuesta a decirle cuatro cosas a quien fuese y me sorprendí al ver que eran las cinco de la tarde. Entendía entonces que me despertasen. Sin embargo Aaron se había pasado, tenía cerca de cien mensajes suyos y todos eran diciendo que si me bajaba con él a la piscina. Le contesté con un simple "sí" y me levanté en busca de mis cosas.

Miré hacia las camas de mi lado, donde aún dormían Jacob y Shawn. Intenté hacer el menor ruido mientras cogía el bikini y algo de ropa y me cambié en el baño para después tomar una toalla, el móvil y salir de la habitación. Le pregunté a Aaron cual era su habitación y me dirigí hacia ella cuando me lo dijo. Golpeé la puerta repetidas veces hasta que Cameron me abrió, fulminándome con la mirada porque lo había despertado. Me reí ante su expresión y revolví su pelo por lo que se quejó y golpeó mi mano para que la apartase.

Entré en la habitación, seguida por Cam y vi a Sam tumbado en su cama, durmiendo plácidamente. Cameron también se volvió a tumbar y yo me senté, esperando a que Aaron saliese del baño.

—¿Dónde vais? —murmuró Cam, por lo que me giré en su dirección.

Él tenía su cabeza sobre la almohada, mirando en mi dirección, su pelo estaba revuelto y sus ojos hinchados de dormir. Me acerqué y lo empujé para que me hiciese un lado, tras eso me tumbé junto a él. Cam pasó su brazo por encima mía y yo enredé mis piernas con las suyas. Cameron era como un hermano para mí y el que más me cuidaba junto a Shawn.

—Vamos a la piscina —anuncié y él hizo una mueca de desagrado.

—¿Aaron y tú solos?

—Así es —le respondí y él se removió.

—Pensé que la perderías en una cama, no en una piscina con público incluido —se burló por lo que no pude evitar pegarle en el brazo.

Tras eso me levanté y aporreé la puerta del baño, recibiendo un "ya voy" de Aaron.

—No te enfades Iv —pidió Cam.

—No me gusta que hagáis bromas sobre eso. Sabes que yo siempre soy la primera que bromeo pero eso no me gusta —me quejé, sincerándome por una vez.

Aaron salió del baño, por lo que no le dio tiempo a Cam de responder, tan solo asintió y después me guiñó un ojo. Antes de marcharnos me acerqué a la cama de Sam y di un grito cerca de su oreja. Él se despertó gritando y después comenzó a insultarme, pero estaba ocupada riéndome como para prestar atención a lo que decía.

Cuando íbamos bajando, se nos acercaron dos chicas vestidas de stitch, junto a dos pijamas más en sus brazos. Sí, eran fans y querían que nos vistiésemos junto a ellas, por lo que nos causó gracia y lo hicimos. Tras eso bajamos hacia la zona de la piscina junto a las chicas que intentaban hablarnos en inglés pero por los nervios les costaba.

I'm not the Magcon girl.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora