Alex Turner

cap 14

-Oh...- Nelly se ve algo confundida- cla...claro Alex, so...solo pon tu...pie ahí- me dice con las palabras entrecortadas

-¿Así?- le pregunto mientras me acomodo como ella me indicó. Siento que voy a caerme y de un momento a otro la abrazo gritando: ¡No mames!

-Alex- dice ella sobresaltada correspondiendo mi abrazo- No te muevas solo... solo suéltame y no te muevas- poco a poco se separa de mi y me toma de un brazo para que no me caiga

-Creo que ya lo tengo

-Ahora impúlsate con el otro pie, y cuando te sientas seguro subes ambos pies a la patineta, de esta manera-me dice y yo me bajo de la patineta para otorgársela y que me enseñe como se hace. Claramente es una experta, pues lo hace tal como lo dijo- Ahora tu- me deja la patineta y entonces lo intento: subo un pie, lo mantengo en equilibrio y cuando estoy listo comienzo a empujarme con el otro, me voy deslizando por el pavimento y ya que tomo una velocidad estable acomodo el otro pie. Lo estoy logrando. Me detengo con un poco de dificultad y repito el mismo proceso de regreso- Lo has hecho bien Alex- me sonríe mientras baja la mirada.

-Con una maestra como tu ¿quién no puede?

-Creo que Matt- dice ella todos (a excepción de Matt) reímos.

-Muy chistosa Nelly- dice Matt- déjame que te muestre lo que el sabroso de Matt sabe hacer- toma la patineta y en un impulso sube el pie, se empuja con el otro, se tambalea y cae al suelo de puras nalgas. Todos reímos como maniáticos al ver a Matt sobándose el poco trasero que tiene.

-Ay Matt- digo yo- de por si no tienes atributos y todavía los aplanas más- mi comentario causa risa en todos, incluso en Nelly, quien casi nunca se ríe de lo que digo.

La tarde se nos pasa tan rápido que el cielo está oscuro. Los cinco estamos sentados sobre una banqueta, yo alado de Nelly, y los demás a mi costado libre. Matt se levanta y se excusa con alguna basura de pretexto, y como es de esperarse los demás le siguen y se van, menos Nelly, quien sigue aún sentada junto a mi. Nos quedamos en silencio viendo un panorama oscuro, que cuanta con algunos autos estacionados y lámparas altas. Ella de momentos saca una cajetilla de cigarros y un encendedor, pone uno de estos entre sus labios, hace una flama y apunto de encenderlo me mira

-No te molesta ¿cierto? - pregunta un poco torpe al tener el cigarro entre sus labios, yo la miro y niego con la cabeza. Entonces lo prende dando una gran calada, después guarda el encendedor en las bolsas de su pantalón. Yo me dedico a mirarla, se le ve tan bien de esa manera, con un cigarrillo en los labios y el humo saliendo su boca esparciéndose por su cabello negro y corto- ¿qué me miras tanto?- pregunta mientras saca el humo fuertemente.

-No te miro nada- contesto mintiéndole, porque no pienso decirle la verdad de por qué la miro tanto. Ella no contesta y simplemente se queda callada.

-¿Por qué ibas a besarme el otro día?- su pregunta me toma por sorpresa y abro tanto los ojos, que podría compararlos con dos llantas de tráiler.

-Yo...- sinceramente no sé qué decir, y es obvio que no debo decir la verdad, cómo decirle "iba a besarte porque se me antojo ya que eres jodidamente sexy y no pude resistirme". No, eso si que no- Yo no iba a hacerlo- ella me mira y sonríe, yo miro su cigarrillo

-¿Quieres uno?

-No debo besarte Nelly- le contesto sin pensar

-Un cigarro, idiota- ríe tiernamente y me ofrece su cajetilla, yo accedo y tomo uno, luego me presta su encendedor y hago que con una calada mi cigarro esté listo – ¿Entonces... no ibas a besarme eh? - pregunta distraídamente