Cap 21.- Corazón

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Despierto de golpe. Me quedé dormido.
Al instante siento un peso más que me acorrala al sofá, la simple idea de tener a Nelly sobre mí, tan cerca de mi cuerpo, cruzando la línea de amistad, hace que un deseo prohibido se encienda.

Con mucho cuidado, para no despertarla, la voy moviendo, de manera que al final queda acostada sobre el sillón; le coloco una almohada bajo su nuca, y el otro almohadón ella misma lo abraza. Es tierno verla así.

Me siento en la mesa de centro que tiene, y la miro respirar. Sus pechos suben y bajan con delicada tranquilidad.

Miro la hora del reloj de la cocina, el cual alcanzo a ver desde el punto en el que estoy: 8:57 pm.
Me levanto y voy a su cocina, me preparo café y luego regreso a verla dormir mientras bebo sosegado.

Nelly es bonita, de eso no hay duda. Alexa... Alexa es preciosa, tampoco hay duda de eso. Son muy distintas ambas.

Cómo te extraño Alexa, me haces falta, mucha falta; tus risas, tu cabello, tu cintura, tu voz, tus manos, tus gloriosos besos... No se comparan a nada, ni mucho menos a nadie, ni siquiera Nelly puede superarte; aunque no niego que Nelly es demasiado bonita, toda ella es distinta, su cabello, sus ojos, sus labios carnosos, su piel suave, su mirada, la manera en que habla, en que camina, en que se ríe y juega con los chicos, lo que más me gusta de ella es la manera en que piensa, es como estar a la espera de una tormenta.

Me termino el último trago de café, entonces abre los ojos, algo somnolienta y sobresaltada.

-¿Qué? - murmura - ¿Alex?

-Te quedaste dormida - le notifico.

-Lo... lo siento - se endereza y se cubre con las mantas.

-No hay problema, te veías ... - hermosa, pienso; me detengo en seguida al darme cuenta de lo que iba a decir - ... muy cansada - finalizo.

-Creo que tuve un sueño - comenta y bosteza.

-¿Enserio? - me hago el impresionado.

-Si, algo raro, por cierto.

-Oh, si, claro, raro, como tu digas - hablo estupideces.

-¿Y qué haces aquí?, ¿A qué hora llegaste?

-Pero si comimos juntos...

-¿Cuándo? - pregunta desorientada.

-En la... hace... Ay, ya olvídalo.

-Bueno... - se talla los ojos, sonrío de medio lado - Tengo sueño, Alex - bosteza de nuevo.

-Duerme.

-Um... Si - mira el suelo - abrazame - murmura.

-¿Qué? - me sorprendo

-¿Qué? - repite ella.

Alex TurnerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora