¡Vamos, vamos, vamos!

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Así que... estoy de vuelta.

Por fortuna Jessey estaba disponible para ir a recogerme, eso era lo único que necesitaba.

Estoy aquí, esperando, contemplando y pensando. Los ventanales son gigantescos, puedo ver cómo parten algunos aviones y se elevan y desaparecen en el cielo, como entrando a otra dimensión. Embobada, comienzo a caminar hasta que choco con alguien, una mujer.

-¡Ay, joder! Lo siento - digo al levantarme del suelo.

-Oh, rayos - chilla - Se arruinó mi camisa - era cierto, por mi culpa su café se había derramado.

-Perdón, de verdad, no te vi y... - intento limpiar.

-Está bien, déjalo así - me mira de mala gana.

-No, insisto, déjame reponer tu café - en ese momento llega Jessey, con sus gafas.

Si no fuese gay me sentiría mal diciendo que se veía muy guapo, pero como lo es, lo digo a los cuatro vientos.

-Hola, bonita. ¿Nos vamos?

-Hola, Jessey - la chica nos mira, y Jessey a ella, esperando explicación - En realidad quiero invitarle un café, mira cómo le dejé su camisa.

-Oh, dios - dice mi amigo cubriendo su boca -Nena, déjanos ayudar. Yo invito.

La chica le sonríe.

-De acuerdo, además no conozco muy bien aquí - sonríe.

Ella tiene una grande sonrisa, y un cabello castaño, es muy alta además.

-Bueno, me llamo Nelly - la saludo.

-Yo me llamo Taylor, Taylor Bagley. Un gusto - se dirige a mi amigo.

-Dime Jessey - le sonríe.

-¿Entonces qué? ¿Nos vamos? – digo cansada, pero con buen humor.

-Bien, vamos - dice alegre Jessey.

Caminamos en busca de nuestro equipaje. Bueno, el de Taylor y el mío. Ella parece estar encantada con Jessey porque hasta está colgada de su brazo.

-Alguien estuvo buscándote - me mira con picardía, yo ruedo los ojos.

Es increíble cómo Jessey se emociona más que yo.

-Creo deberías darle una oportunidad - frunzo mi ceño y río divertida.

-¿Qué hay de ti? - le dejo la boca cerrada con mi comentario.

-Yo ya aprendí a esperar, intento llevar las cosas con calma, porque sé que no hay mucho para mí; sólo mírame, ¿quién quisiera estar a mi lado? - voltea a verme torciendo la boca, dándose por vencido - En cambio ustedes... ¡Nelly, ambos se quieren!

-¿Quién dijo que yo lo quería?

-Exacto: no lo dice nadie porque es evidente, se nota a mil kilómetros.

-Am... Cállate, y mejor ayudame con mi equipaje.

Él murmura "Bien" y segundos después nos ayuda a la chica y a mí a bajar nuestras maletas, lo bueno es que yo sólo llevo una mochila grande, la cual puedo cargar, en cambio ella... Lleva más equipaje que nada, tal vez se quedará a vivir aquí, o pasará más tiempo, sea como sea, eso es algo que no debe importarme.

Y me pregunto cómo estará Alex. Seguramente estará pensado que estaba preocupada por él y su estúpida broma, y aunque sí, lo admito, me preocupé, no quiere decir que voy a aceptarlo, al menos no frente a él.

-¿A dónde quieres ir, pequeña? - pregunta Jessey con algunas maletas de la chica.

-A donde ella quiera ir - sonrío amable mientras prendo un cigarrillo.

Alex TurnerDonde viven las historias. Descúbrelo ahora