Parte/20

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Patricia se había encargado de esparcir una historia ficticia entre sus amigas, dónde aseguraba que Baudelia, provenía de una familia muy acaudalada, uno de sus antepasado había sido el ilustre ex presidente de la república don Porfirio Díaz. Las mujeres no necesitaron saber más, con eso les bastaba para aceptar a Baudelia en su círculo social. Cuando su embarazo se hizo visible, las mujeres la felicitaron y se pusieron a sus órdenes.

Cuando tenía siete meses de embarazo, Juan Manuel se dio por vencido, su mujer seguía aumentando de peso y no daba señales de que fuera a perder al niño, es por eso que decidió darse un respiro en sus encuentros amorosos con ella y se dispuso a esperar el nacimiento del engendro como él llamaba a su hijo.

Baudelia fue a su consulta mensual con el ginecólogo. 

 —Señora ya tiene 38 semanas lo quiere decir que ya esta a punto de ser madre, cómo no se sabe la fecha exacta de cuando quedo embarazada, a partir de este momento ya no hay problema a la hora que su hijo quiera arribar a este mundo. Pero si le voy a encargar que en cuanto sienta los primeros síntomas se venga  inmediatamente al hospital, ¿de acuerdo?

—¿Cuáles son los síntomas que voy a sentir?

—Va a sentir cólicos como los que siente cuando tiene su regla mensual, a esos cólicos les llamamos contracciones a medida que va avanzando el tiempo, se van haciendo más dolorosos y frecuentes. Tome el tiempo entre cada contracción y cuando le den cada cinco minutos de diferencia entre un y otra, esa es la señal para se  venga al hospital, ya que la distancia de su domicilio no es muy grande ampliamente alcanza a llegar o si se puede venir antes es mejor.

—Está bien, gracias doctor por tus atenciones.

La salir del consultorio del ginecólogo le salió al encuentro  Octavio con una amplia sonrisa.

—¿Cómo vas cuñada?— ¿Ya mero llega el chiquitín?

—Dice el doctor que en cualquier momento llega. 

—Me da mucho gusto, estaré al pendiente.

Octavio la acompaño hasta la salida del hospital donde la esperaba el chófer con el coche , Octavio la ayudo a subir al auto y Baudelia regreso a su casa, unos día después recibió una llamada por teléfono de su madre.   

—Hija soy yo. 

—Si mamá ya  conocí tu voz —¿Qué se te ofrece?

 —Vine a visitar a tus tías y me encontré con la novedad de que tu tío Rigo viene a visitarnos, tambien vienen tu tía y tus dos primas, Joaquina y Sara. 

—¿Mi tío Rigoberto el que vive en Estados Unidos?

—Si hija mi medio hermano,  bueno tus tías van a preparar una comida para juntarnos toda la familia y quiero que vengas tú, junto con tu marido, ¿tú crees que él quiera venir?

—Depende de qué día sea la comida.

—Es el jueves, tu tío ya tiene casi dos semanas que del norte, llego a la casa de mi papá, la comida la vamos hacer el jueves ellos se quedan a dormir en la casa y el viernes salen tempano a los Ángeles.

—Yo sí puedo ir, pero Juan Manuel no sé.

—No hay problema que el no venga, lo que  importa es que vengas tú, a tí es a la que quieren ver. 

—Si mamá entonces nos vemos el jueves, pasado mañana claro si a tu nieto no se le ocurre venir al mundo.

En la noche cuando llego Juan Manuel le hice saber de la invitación.

—Mi mamá nos invitó a comer el jueves—¿Crees que podrás asistir?

—Me temo que no podré asistir, tenemos una auditoria en una empresa y tengo que auxiliar a, los muchachos saliendo del banco me voy para la empresa— ¿Y a qué se debe la invitación entre semana?

—Vino un medio hermanos de mi mamá de Estados Unidos, mis tías le van a hacer la comida en su honor, ya que se regresa el viernes muy temprano y mi mamá desea que lo conozcas.

—Siendo así yo te llevo en la mañana antes de irme al banco lo saludo y en la noche paso por ti, ¿Qué te parece?

—Me parece muy bien.

-Pues así lo hacemos, pasemos a cenar.

El Jueves llegamos a la casa de mis padres les presenté a Juan Manuel  a mi tío, a su esposa y a sus dos hijas, mi madre les sirvió un suculento desayuno, no sin antes lamentar que mi esposo no pudiera asistir a la comida familiar que se iba a efectuar esa misma tarde.

Mi tío y su familia salieron al centro de la ciudad concretamente al mercado de san Juan de Dios fueron a  comprar algunos recuerdos para llevarles a sus familiares y amigos, quedamos  en vernos en la casa de mis tías a la hora de la comida.

A las once del día, sentí un cólico, tan leve, que no le di importancia, media hora más tarde sentí ganas de ir al baño,  cuando me senté en el escusado sentí un retorcijón en el estómago muy fuerte, creí que me había dado  porque desayune muy pesado, empecé  a sentir los cólicos con más frecuencia, de pronto recordé lo que me había dicho el doctor sobre los dolores. ¿Seria posible que mi bebe me este avisando su arribo a este mundo? Vi el reloj era la una de la tarde ya estábamos en la casa de mi tío, me decidí a decirle  a mi madre lo que me estaba pasando.

—Mamá desde las once de la mañana he estado sintiendo fuertes retorcijones en el estómago, creo que tengo torzón, pero voy al baño y no hago nada.

—¡Ay hija !¿por qué no me habías dicho? Eso no es torzón esos son dolores de parto, creo que tu hijo ya quiere nacer.

—¿Crees que eso sea?

—Claro que si hija, te lo digo por experiencia propia, no dé en balde parí cinco hijos.

—En ese caso, me tengo que ir al hospital, me dijo el doctor que cuando me pasara esto inmediatamente me fuera para allá.

—Mira hija, cuando uno es primeriza hay falsas alarmas, lo que vamos hacer es irnos a la casa y te voy hacer un chocolate con ruda, eso te va a servir para dos cosas, si ya va a nacer tu niño o niña, lo que sea, eso te ayudara a que nazca pronto, pero si todavía no es tiempo se te van a detener los dolores.

—Está bien mamá vamos a la casa.

Nos despedimos diciéndoles lo que estaba pasando cuando llegamos a la casa de mis padres me dijo mi mamá.

—ahorita le digo a María que te lo prepare el chocolate con ruda, mientras sigue caminando, eso sirve mucho

A los pocos minutos llegó  mi madre con un jarro de la bebida sabía a rayos, pero me lo tomé, en cuanto me hizo efecto los dolores aumentaron estos eran más seguidos.

Nunca me amaste #SGAWARDS2017#CAJAWards2018Donde viven las historias. Descúbrelo ahora