Capitulo 34

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A peticion de CarolinaRivera890  aquí está el siguiente CAP!! Pero tengo que advertir que no subiré hasta el mArtes besos

Sorprendida lo miro de arriba abajo, un gorro cubre a medias sus rizos dorados, sus ojos siguen teniendo ese verde acaramelado que siempre me gustó, lentamente la comisura de sus labios se eleva en una gran sonrisa, tan bonitos como lo recordaba, lleva puesto una camisa gris y pantalón jean, cejas de color castaño claro, pestañas cortas pero medio rizadas, cara alargada, nariz grande pero no demasiada, labios gruesos y perfilados, alto pero no tanto como Axel, su complexión es delgada, siempre lo fue.

– esto es lo que me querías mostrar?– pregunta con palpable felicidad.

Había soñado con este momento, siempre me imaginé ir corriendo hacia el, lanzarme a sus brazos y besarlo con vehemencia, soñé en repetirle una y otra vez cuando lo amaba, pero nada de eso pasó, estaba herida y decepcionada, por lo que cuando se acercó a mi, para hacer todo lo que había soñado, lo único que pude hacer es abofetearlo con fuerza, su rostro impregnado de sorpresa no hace más que enfurecerme, con fuerza lo empujo cuando hace ademán de abrazarme.

– Sam, estoy aquí, no me rechaces – mi pide con la voz rota.

Axel por otro lado coge a su hermano del codo y lo separa de mi antes de que decida hacer una tontería, solo me hace falta mirar a Axel para que se forme un nudo en mi garganta y el lo nota, pero no me toca, sabe que sería peor, su mirada expresa miles de cosas, cosas que no me permito identificar.

– cómo pudiste?– le digo con la voz rota.

– Sam, tienes que perdonarme yo...

Con una mirada hago que Matt se calle, no estoy hablando con el, no quiero saber sus excusas, quiero que Axel me diga, ¿por qué?

– por qué!?– le grito golpeándole el pecho con mi puño –tu sabías que...

– quiero el divorcio, Sam, se acabó – dice cogiendome de las muñecas para que no lo golpee.

Niego con la cabeza y me alejo de el como si sus palabras hubieran sido igual de efectivas que un puñetazo en mi cara, dolía pero aún albergaba la esperanza de que en cualquier momento se ría, y que me diga que solo bromeaba, no sucedió, en cambio del bolsillo trasero de su pantalón saco una hoja blanca doblada por mitad, media arrugada.

– te casaste con ella?!– exclama Matt pero ninguno le presta atención.

Con el ceño fruncido lo cojo y lo abro, la hoja se resbala entre mis temblorosos dedos al comprender de que se trata, es un acuerdo de divorcio parecido al que yo redacté hace tiempo, mentalmente repasó los momentos que hemos compartido, intentando encontrar algo que me diga que es lo que hice mal para que de pronto quiera el divorcio, todo se vuelve más confuso recordar lo sucedido horas antes, en aquel cuarto de limpieza, de sus palabras, de su confesión, no entendía nada, pero ni falta que hacia, solo una palabra se me viene a la mente, solo podía pensar en que lo llevaba encima haces unos minutos.

– mentiroso – la comisura de mi labio se eleva en una media sonrisa – te amo, te amo, te amo, te amo, te amo – repito imitando de mala manera su voz, no se parece en absoluto pero el lo entiende pues frunce el ceño – bravo! Bravo! Que le den un maldito oscar por su perfecta actuación, Bravo!– exclamo aplaudiendo con dramatismo– deberías ser actor, en serio me tragué tus mierdas y mira, hasta lo disfrute, pero ya sabes lo que dicen de la mentira y el amor, al principio es dulce y al final amargo, te felicito.

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