Empieza la discusión

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Ya hace un buen rato que estamos en una cueva pequeña y sencilla. El anciano me ha traído hasta aquí sin mediar palabra y nada más llegar se ha puesto a cocinar algo... Oigo el hervir del agua en una tetera y en poco tiempo tengo una taza de infusión humeante delante de mí. La cojo y el calor se extiende por mis manos... Un olor dulce, empalagoso, sube desde la superficie del líquido y me embriaga. No logro distinguir ninguno de los ingredientes de la mezcla, así que hago un rápido conjuro para comprobar si lleva veneno... No creo que este hombre intente envenenarme, pero después de lo que ha pasado en la cueva prefiero no arriesgarme.

No detecto ninguna substancia nociva en la bebida, por lo que le doy un largo sorbo que me llena de calor y me relaja. El anciano se sienta delante de mí y me mira con sus ojos, aclarados por el paso del tiempo y la vejez.

-Nunca llegué a pensar que pudieses llegar a ser nuestra aliada, Salem... Tenía mis dudas sobre si dejarte vivir o no en el coliseo, pero me alegro de no haber hecho nada en ese momento... Tus hermanos son unos buenos chicos, han hablado mucho de ti... Pero nunca imaginé que esa chica que describían pudieras llegar a ser tú... El mundo es un pañuelo... Pero no estamos aquí para hablar de eso, ¿Verdad?- El hombre me pregunta eso antes de darle un trago a su propia taza.

-No lo sé, señor, es usted el que nos ha traído aquí- Le contesto, confusa. La verdad es que no tengo nada claras sus intenciones.

-Oh, es verdad, que descortesía por mi parte... Dime, dragona,¿ hay algo que pueda ofrecerte? Lamentablemente no tengo nada digno de una comida, pero puedo ofrecerte algunas bebidas  que les gusta bastante a tu especie...- El hombre hace un ofrecimiento a la dragona, hasta ahora sentada muy cerca de la puerta, que lo rechaza con un leve movimiento de su escamada cabeza.

-Tienes razón, chica... La verdad, es que tampoco tenía ningún motivo en especial... Más que la curiosidad, claro... No te tomes lo que ha pasado como una ofensa, por favor, hemos aprendido a ser cautelosos con el paso del tiempo... Y no esperábamos tu llegada... Selene me dijo que había enviado a algunos alumnos a la capital, pero no teníamos manera de saber vuestro aspecto... Me alegra haberte visto, y veo que el comentario que hizo sobre tu... Peculiar alma no era desacertado, aunque si no me equivoco ya no se encuentra dividida- Menciona, escrutándome con sus órbitas blanquecinas.

-No... Dejamos de serlo hará unas semanas-

-Lo sé, pequeña, lo sé... Y también sé que nuestro querido Lineus ya te ha mencionado lo que eso supone... Un vínculo bastante peligroso... No temas, pequeña, no eres ni mucho menos la primera híbrida entre dos dimensiones...-

 Esta frase me sorprende mucho... Según lo que me dijo Lineus, era algo más que peligrosa... El hombre sonríe y empieza a darme explicaciones.

-Sí, ha habido mestizos antes que tú... Aunque no muchos que fueran una mezcla humana y diabólica... Eso es menos común... El problema, querida, es que ninguno de ellos vivió demasiado... Por eso no llegaron a suponer ningún problema para la integridad de este mundo.-

Esto me asusta... Puedo imaginar que no murieron por causas naturales... Y tengo miedo de que la única opción para mí sea la misma.

-No te asustes, pequeña, en ese momento no teníamos experiencia con ello y el miedo nos impulsó a hacer cosas horribles... Te prometo que pondremos todos nuestros esfuerzos en encontrar una medida mucho menos... Drástica. Se ha avanzado muchísimo desde entonces...-

Suspiro, algo aliviada... Por lo menos mi muerte no es la primera opción... Aunque sigue siendo una.

-La verdad, no me acordaba de que Selene dijo que eras una jinete.... La memoria puede llegar a hacerte malas pasadas... Les has dado un buen susto a los de ahí abajo. Eres alguien curioso, Salem... Es como si todas las características extrañas del mundo hubieran decidido alinearse para hacerte a ti... Híbrida, jinete, maga, Jag... Aunque puede que algunas de ellas estén relacionada entre ellas, sigue siendo curioso-

Danza de demonios: La chica y el dragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora