Victorious (Brendon Urie y tú)

Garabatos

Debo estar volviéndome loca, pero nadie, salvo Holly y supongo que Zack, sabe lo que hay entre Brendon y yo. Bueno, es un decir. Ni yo sé qué tengo exactamente con Brendon. ¿Él lo sabe? No lo sé. Parece que va siempre a la suya y sabe lo que quiere. También lo dejo todo fluir pero durante el día me encuentro más de una vez recordando cómo me mira, cómo me besa y cómo me habla. Cuando recuerdo, en el trabajo, que también me hace sentir segura, le echo un ojo a la nota que me han dejado hoy en el buzón y se me pasa de golpe.

¿Es Brendon poniéndome a prueba? Recojo el correo cada mañana y ayer por la mañana no estaba. Si me he dormido en las piernas de Brendon, no duermo tan profundamente como para que salga, deje la nota y vuelva a poner mi cabeza a sitio. 

De tanto pensar se me nubla la cabeza y decido ir un momento a la máquina de agua que hay junto a maquillaje. Veo la puerta de maquillaje y me da una punzada el corazón. 

Holly. 

Mientras lleno mi vaso oigo unos pasos por el pasillo, levanto la cabeza por instinto y veo a mi no-sé-ya si mejor amiga con otra maquilladora parloteando tranquilamente. Al cruzarnos, convencida de que Holly no quiere saber nada de mí, bajo la cabeza.  A mi sorpresa, Holly se para cerca de mí mientras su compañera sigue andando y noto una mano en mi hombro. 

-¡Hola chochete!- me dice, alegremente. 

Intento disimular mi sorpresa cuanto puedo y le devuelvo la sonrisa, aunque me siento algo incomoda. Echo un vistazo rápido y veo que lleva manga larga... No me da tiempo a contestarle que Holly me interrumpe.

-Deberíamos quedar para cenar los cuatro.En nuestra casa. 

Entrecierro un poco los ojos. Flipando.

-¿Los cuatro?-musito, sabiendo a lo que se refiere. 

-Sí, claro- me asegura- Tú, yo, Dan y Brendon. 

-Ah, claro- finjo entender- sí, claro, ya-ya se lo diré. 

Holly y yo nos despedimos y vuelvo a mi ordenador, aún más desconcertada que antes. Guardo la nota corriendo en mi mochila, no quiero verla más. 

El programa y todo fluye con normalidad, hasta la visita breve a la garita. Holly yo charlamos mientras ella maquilla el invitado con cierta cordialidad. 

El teléfono vibra al salir. Es Brendon, me envía una foto de Evie dormida en su regazo en mi sofá. "Tal gata tal humana", me escribe. Me hace sonreír, esto me hace tremendamente feliz. 

Cojo la moto y llego a casa y por primera vez en este piso, tengo que llamar al timbre. Me abre Brendon, sin camiseta, en vaqueros y Evie le sigue. 

Me invade una ola calurosa y se me suben los colores. No me importaría encontrarme esto cada día al volver a casa. 

Vuelvo en mí rápido y le beso en los labios rápidamente. Descubro que ha preparado una ensalada variada para cenar y cenamos viendo algún vídeo de YouTube. Al cabo de un rato, me dice que se tiene que ir y nos despedimos. 

Al recoger los platos veo una servilleta con garabatos. Y esta letra me suena demasiado.