Es lunes, llego al trabajo y ya tenemos reunión de buena mañana. Al parecer la audiencia está subiendo desde hace un par de semanas y nos reúnen a todo el equipo en una sala. Hasta el propio Jerry ha decidido presentarse.
El director de la productora, alguien a quién sólo vi cuando firmé el contrato, llega demasiado contento. Digo demasiado, ya que tiene ese semblante de estar serio la mayoría del tiempo.
Entro, me siento, y pongo mi bolso reservando el asiento de al lado para cuando venga Holly.
El director empieza a hablar y se abre la puerta, llega Holly usualmente despeinada y con cara de cansada. Después de las miradas iniciales, se sienta en el lado que he estado guardando para ella. Tiene la respiración acelerada y se arremanga las mangas de la camiseta. Echo una mirada rápida y se me hace un nudo en el estómago. Tiene una mancha en uno de sus brazos.
-Holly¿qué tienes ahí?- susurro señalándole la mancha.
-Nada, T/N- contesta escueta mientras se tapa la mancha.
Mi cabeza se nubla. Holly siempre va bien peinada a todas partes y siempre me da ochenta mil explicaciones de todo. Cada vez que se hace una herida o le sale alguna cosa rara en la piel, tiene una historia que contarme que siempre acaba de manera divertida. La miro de reojo y se le marcan las ojeras, esas que siempre corrige con tanto esmero para que sus clientes se fíen de sus habilidades.
Aparto de la mirada de Holly, que sigue concentrada en lo que dice el director, pero no puedo prestar atención. Espero que no haya sido nada.
Mis pensamientos se ven interrumpidos por unos aplausos, que decido seguir. No me he enterado de nada, ya preguntaré.
Nos levantamos y Holly se va corriendo con los de maquillaje y me quedo sola. Ni adiós me dice. Me quedo un poco desconcertada hasta que noto una mano en el hombro.
-¡T/N!- comenta David- ¡felicidades por la parte que te toca!
Le interrogo con la mirada, no he estado escuchando nada.
-Los invitados-prosigue- les hemos hecho una encuesta sobre el trato que les han dado desde producción y sobre las preguntas de sus entrevistas y sacamos un¡ 9,5/10!
Suelto una risita ahogada.
-¿Y el 0,5?
-Hugh Grant- sonríe David- anda- me da un golpecito en el hombro- vete a trabajar que hoy toca Josh Widdicombe.
Me río otra vez. Antes de volver a mi ordenador, saco el móvil y le envío un mensaje a Brendon.
-Beebo, ¿te han pasado una encuesta desde el programa?
-Sí- me contesta- se la pasaron a Zack durante la semana pasada y la contesté.
-Las hemos aprobado y la audiencia ha subido- tecleo rápido, muy contenta.
-Debe ser por la matrícula de honor que te di, preciosa.
Se me suben los colores y dejo el teléfono.
Me pongo a trabajar buscando datos del invitado y elaborando su dossier, a la hora de la comida decido escribirle a Holly.
-¿Estás bien?
Y tick azul, en visto. Sin respuesta.
Intento repasar mentalmente todo lo que pueda haber hecho mal para que Holly se cabrease conmigo.
Llega la hora del programa y cuando me voy a cambiar me enseñan que ya han cambiado y han puesto nuevas taquillas. guardo mis cosas dentro y me cambio de ropa.
Sigo el procedimiento habitual pero un poco más relajado por las buenas noticias de esta mañana. Saludo a Josh, el invitado, comprobamos sus datos y me lo llevo a vestuario. Al pasar por maquillaje, entro y Holly no me saluda. Maquilla a Josh y al él salir de la sala me quedo en el marco de la puerta para pedir explicaciones a mi amiga.
-T/N, no me agobies, ya hablaremos- dice bruscamente, mientras me cierra la puerta en la cara.
Josh me interroga con la mirada y sacudo la cabeza.
-Nada grave, vamos a la sala de espera.
Lo de Holly no se quedará así.
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Victorious (Brendon Urie y tú)
ФанфикT/N trabaja en un late show en Londres. Al llegar al trabajo, un día se encuentra que le toca estar codo a codo con el cantante de Panic At the DIsco, Brendon Urie. T/N no quiere sentir nada por un famoso, pero no será tan fácil como piensa. No se a...