Dos hombres y una pinta (2)

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Holly sale del cuarto en pijama y con cara de tener la resaca de su vida. Ni Brendon ni yo nos hubiésemos dado cuenta de su presencia si no fuera por el grito que acaba de pegar en el pasillo al tropezar con Evie. 

-¿Qué, la fiesta?-le pregunto a mi amiga, picarona.

-Calla, calla-sacude la cabeza mientras se prepara un vaso con leche y Cola-Cao- hacía milenios que no bebía tanto. 

Brendon, que había estado callado desde que Holly ha aparecido levanta la cabeza y se ríe. 

-¿En serio es tu método para la resaca?-pregunta divertido señalando el vaso.

-Sí, ¿qué pasa?-responde Holly sacudiendo los hombros.

-Los ingleses no tenéis ni idea- me meto-así cocináis-le digo riendo.

-¡EH!- se indigna- Al menos no es tan pesado como el bocata de calamares que me hiciste una vez para pasar la resaca, T/N.

-Touché.-admito- pero estaba bueno y lo sabes-mi amiga me da la razón.

-¿En serio metéis eso en un bocadillo?-pregunta mi novio, extrañado.

Asiento, impasible.

-Bueno, tortolitos. Me voy a compadecer de mi resaca a mi cuarto. Quién me mandaba a mí mezclar, joder...- se lamenta yendo hacia su habitación.

-Beebo-le digo mientras cierro la tapa de mi portátil-me acabo de acordar que he quedado con el becario al que tutorizo. Desde el lunes le debo una pinta de cerveza.

-¿En serio?

-Me ayudó cuando hubo la filtración y tal, además es fan tuyo.- Brendon hace un puchero- va, no estarás celoso,¿no?

Me sigue mirando haciendo pucheros y no me puedo resistir.

-Ven, si quieres. Os invito a los dos a una pinta y charlamos, eso sí, no le voy a decir nada de que vienes, quiero  verle la cara cuando te vea.-río-lleva dándome la paliza toda la semana de que quiere un saludo o un autógrafo tuyo.

Brendon acepta y mientras él termina me voy a duchar. Me visto con unos vaqueros azules rotos claros,una camiseta de tirantes gris claro y unas bailarinas. 

Mi novio entra en el cuarto mientras me estoy vistiendo y suspira al verme, sorprendido. 

-Estás guapísima, eso sí, te llegas a poner el vestido negro de la primera cita y no salimos de la cama en todo el fin de semana. 

-¿Qué?-me río- ¿tanto te gustó?

-Me pone. Qué quieres. Suficientes ganas tenía ya de besarte cuando viniste al concierto y en la cita me vas así- resopla, me da un beso en la mejilla y yo me sonrojo. 

De camino al pub que he quedado con Charles, Brendon y yo tramamos cómo sorprenderle. Mi becario acaba facilitándome las cosas cuando me escribe que ya está en el sitio sentado en un reservado. Aparco con la moto a una calle del pub.

-Cuéntame más del chaval, T/N.

-Bueno, es becario desde poco después de que vinieras al programa, a la dirección les gusta el chaval y se lo quieren quedar la temporada que viene, pero no me va a ayudar, lo contratarán para refuerzo de Max y su consultorio, necesitan a alguien que filtre los audios que envían los espectadores y haga un guión. Max es un caos a veces, muy gracioso, pero un caos. 

Brendon me escucha atentamente y va asintiendo.

-Obviamente, eso del contrato es secreto- añado- le tienen que hacer la oferta  a principios de julio, cuando cerremos temporada.  Y cuando se enteró de lo nuestro no para en que le saludes.  Se ve que estuvo en uno de tus conciertos en Bruselas. 

Victorious (Brendon Urie y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora