Abrió la puerta y salió del baño con una toalla envuelta en su cuerpo bajo sus axilas. Bruno oyó una puerta cerrarse a lo lejos. Él miró hacia atrás y vio a Alisson envuelta en la toalla pasar rápidamente hacia su habitación. Bruno cerró fuertemente sus ojos y sonrió, continuó con la comida y trataba de olvidar lo que acababa de ver.
Alisson cerró la puerta de la habitación luego de entrar. Escogió la ropa de su maleta, se vistió y peinó su cabello con una coleta. Tomó su celular y llamó a Vanessa, pero no le contestaba. Siguió intentando pero Vanessa seguía sin contestarle. Alisson vio el paisaje de la ciudad de Los Ángeles tras los enormes vidrios del gran ventanal de la habitación. Suspiró sin saber qué decidir con su vida y recordó que debía encontrar un lugar para vivir. Decidió que más tarde iba a hacer unas llamadas con personas importantes que conocía, para ver cómo conseguir ingresos, ya que debía aprovechar que su familia ya le había dado mucha fama y sería fácil que la quisieran contratar para alguna u otra cosa que le llamara la atención.Alisson abrió la puerta de la habitación y se dirigió a la sala de estar, que tenía una enorme alfombra negra que estaba bajo dos amplios, cómodos y lujosos sofás de madera y cuero marrón acolchado junto a un enorme televisor. La sala de estar tenía una gran puerta de cristal que daba vista al lujoso patio que tenía grandes piscinas. El comedor estaba allí, al aire libre. Alisson no veía a Bruno por ninguna parte. Revisó en la cocina, que estaba al lado de la sala de estar pero tampoco estaba allí. Miraba a su alrededor dirigiéndose al patio y vio en el gran comedor dos platos con un desayuno recién preparado. De repente Alisson es levantada por los brazos de Bruno, quien comienza a caminar directo a la piscina. Ella se sacude asustada.
-¡Aahh! -gritaba intentando bajarse de él- ¡Qué diablos haces?
-Te llevo a la piscina.
-¡Qué! Acabo de bañarme.
-Pues te bañarás dos veces.
Bruno se lanzó a la piscina con Alisson en sus brazos.
La piscina salpicó agua por todos lados. Alisson salió a la superficie y tomó aire, retirándose el agua de sus ojos. Bruno aún estaba sumergido y luego de unos segundos salió también a la superficie.
-¡Estás loco! -dijo Alisson riendo mientras le salpicaba agua en la cara.
Bruno cerraba sus ojos para que no le llegara el agua que Alisson le salpicaba mientras se acercaba a ella para detener sus manos. Luego de unos segundos lo logró y sujetó ambas manos de Alisson, quedando prácticamente inmóvil. Ambos quedaron frente a frente y su respiración estaba agitada. Gotas de agua resbalaban por el rostro de ambos, especialmente en los hoyuelos de Bruno, quien le sonrió.
-Buenos días -le dijo Bruno en voz baja.
--ara darme los buenos días no necesitas lanzarme a una piscina -le dijo Alisson soltándose de sus manos.
-Ya tenía esto planeado. No fue mi culpa que te hayas bañado primero, eso no detendría mis planes -le guiño el ojo.
Alisson puso los ojos en blanco.
-¿Y ese desayuno también es parte de tu plan? -le preguntó nadando hasta la orilla de la piscina para salir de ella.
-Oh, una chica muy lista -le contestó observándola salir de la piscina-. Y hermosa.
Alisson cogió una toalla que había cerca y se cubrió con ella desde la cintura para quitarse el pantalón que tenía puesto y que ahora estaba empapado.
-¿Te gusta desayunar empapado y con frío o qué?
Bruno reía mientras salía de la piscina también.
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QUILATES DE MAGIA
FanfictionLa niña Duque conoce al famoso Bruno Mars en su pleno arresto por posesión de drogas. Para Bruno, el oro y la magia tienen 24 quilates... Ahora conocer a Alisson le hará ver a ambos de cuántos quilates es el amor.