MUÑECOS ROTOS [+18]

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Zoe gritó cuando sintió el desgarro de los dientes de Yoongi debido al empujón que le metió Taehyung, el moreno se quedó estático en el sitio sin poder creérselo y de repente se puso rojo de ira y se lanzó encima de él aprisionándolo con su cuerpo.

— ¿¡Qué coño te crees que estás haciendo!?— le gritó.

Tae se revolvía y le metía manotazos por todas partes.

— ¡¡Me haces daño Yoongi!! ¡Me duele!

— ¡Pues haberlo pensado antes jodido gato esto ya es lo que me faltaba!

Forcejearon unos minutos en el suelo ante la mirada atónita de Zoe, que se lanzó encima de ellos a separarlos, Yoongi la empujó también.

— ¡No lo soporto! ¡Ya no sé qué mas hacer para que me quieras!— gritó Taehyung con los ojos en lágrimas.

Yoongi dejó de forcejear en el acto, pero sus ojos se oscurecieron y se cerraron hasta ser solo dos rendijas.

— ¿Vas a empezar de nuevo con eso?— dijo apretando los dientes.

— ¡Me engañaste! ¡Me trajiste aquí haciéndome creer que íbamos a estar juntos!

— ¡Jamás te dije nada igual, te ofrecí ser mio y tu aceptaste pero nunca dije que yo fuera a pertenecerte! ¡Firmaste el contrato por voluntad propia!

— ¡Porque no quería separarme de ti! ¿Qué otra cosa podía hacer Yoongi? ¡Me separaste de mi familia y me trajiste a la otra punta del mundo! ¡Lo dejé todo por ti!

— Yo no te obligué ni te puse una navaja en el cuello para que me siguieras.

— Lo se Yoongi. Pero ya era tarde, en cuanto te ví me enamore de ti...

La mirada del moreno pareció ablandarse con sus palabras y miró fijamente a Taehyung agarrándolo suavemente de la nuca. Después deslizó la vista hasta sus labios y se humedeció los suyos. Y cuando Zoe estaba a punto de suplicarle a Dios que se besaran Yoongi cerró con fuerza los ojos y empujó de nuevo a Tae haciendo que callera de espaldas.

— Te quedarás a vigilarla mientras estoy en el Etéreo. Quiero el contrato firmado cuando vuelva y los dos con las putas manos en los bolsillos porque como os toquéis un jodido pelo os juro que os las corto ¿Os ha quedado claro? Y tú Yoonhori vete preparándote para lo que te espera.

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Dallas daba golpecitos con el pie de la copa en la barra con insistencia mientras miraba a su alrededor. Jungkook estaba acabando con sus nervios y su paciencia, tenía una erección constante por su culpa y le hervía la sangre en el cuerpo solo de pensar en como se estaba revelando contra él. No se daba cuenta de que cada cosa que hacía, por muy cruel y enfermiza que fuera la hacía por él.

Vio a Yoongi cruzar el Etéreo como un huracán y fue detrás de él con una sonrisa maquiavélica en la cara. Se cruzó de brazos mirándole mientras el moreno se cambiaba una camiseta por una camisa ambas negras.

— ¿Y Yoonhori?

Yoongi se sobresaltó y se giró con una sonrisa chulesca. No le había escuchado entrar.

— No sé. Tendrá la regla.

El lobo se rió enseñándole los colmillos.

— Ya veo... Vienes un poco acalorado Yoongi. Te ves igual que cuando follábamos, ¿recuerdas? Tan duro...

— ¿Qué quieres Dallas?— dijo el moreno levantando la barbilla.

Le había costado mucho tiempo olvidarle como para que empezase su juego con él de nuevo.
A veces incluso pensaba no haberlo conseguido, sobre todo si le miraba como lo hacía ahora; paseando la mirada deliberadamente por su cuerpo y con el labio inferior entre los dientes.