Capítulo 43.

12.1K 584 13
                                    


NARRANDO DANIEL.

Ella se separa de mi, me da una fuerte patada en la entrepierna y ríe.

— ¿Ahora qué quieres? ¿Volverme loca? —Pregunta furiosa.

— ¿Y tú quieres dejarme sin descendencia? ¡Puta loca! —Exclamo.

— ¡Vete con tus amigas! A ellas puedes follártelas.

— Vete tú con ese, quizás te haga sentir mejor que yo.

— Solo por tu actitud de chulo lo haré. —Saca la lengua.

Frunzo el ceño, ella agarra el brazo del chico y camina con él, los miro muy furioso, Jesús me agarra y niega con la cabeza.

— Es lo que quiere. —Me agarra Jesús.

— Como la toque lo reviento. —Advierto.

— Se hace la dura —Le miro— la has herido hermano.

— Lo sé —Suspiro— no sé que me ocurre, pienso que es mejor que no esté cerca de mi pero la necesito cerca, no puedo estar sin ella.

— Estas enamorado y los enamorados sois bipolares, por esa razón yo no quiero novia —Se ríe.

— He visto como miras a Alícia —Le miro con cara de pillo.

— Es guapa —Se ríe— cualquiera la miraría.

— Tiene novio.

— No soy celoso. —Bromea.

Vuelvo a mirarla, ella ríe con ese chico, eso me revienta por dentro, quisiera ser yo y no él pero lo he fastidiado todo, mi horrible carácter, mi manera de ser tan horrible. . . Y por querer alejarla de mi cuando muero por tenerla a mi lado.

— Te juro que lo mato.

— Sabes qué a ella no le gustará que lo hagas, tranquilízate y haz como si nada.

— Lo intentaré.

Él compra otra cerveza, sacamos unos cigarros y nos sentamos a hablar como nunca antes lo habíamos hecho.

— Mamá nos ha llamado quince veces.

— Sabía que nos dolería ver a esa basura, no debió hacerlo, ahora que no espere que vuelva porque eso para mi es una traición...

Nuestro amor es animal. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora