NARRANDO LEDRA.
Muerdo mi labio, él consigue que me sienta mejor, que me sienta feliz aunque esté llorando.
— ¿Has dicho qué serías capaz de dejarlo por mi? —Pregunto en medio de una sonrisa.
— Por ti sería capaz de todo niña fresa, pensaba que lo tenías claro. —Responde.
— Mi madre no te aceptará.
— Por intentarlo no pierdo nada.
— Si, nos perdemos nosotros. —Suspira.
— Mandona, tú no me vas a perder ocurra lo que ocurra.
— Es una locura.
— ¿Qué sería de este mundo sin un poco de ella?
— Mañana mis padres no trabajan, yo saldré antes del instituto.
— Allí estaré.
— Gilipollas —Murmuro dulce.
— ¿Qué?
— Te quiero.
— Te quiero más.
— Buenas noches feo.
— Buenas noches fea.
CUELGO.
Mis hermanos me sonríen, yo también sonrío, no puedo creerme que vaya a hacerlo, que él venga aquí para hablar con mis padres.
— Ahora si estas menos fea. —Me dice Lorenzo.
— Bueno —Bromea Matías y me río.
— Sois los mejores, aunque eso no significa que os odie menos.
Ambos me abrazan, son unos idiotas pero les quiero muchísimo.
NARRANDO DANIEL.
Jesús y yo vamos a casa de Raúl, él ya ha asimilado lo que pasó entre su hermana y yo, de todos modos si no lo ha asimilado lo me importa. Entramos, nos piden mercancía, vendemos bastante y nos sentamos a beber algo.
— Vaya, Dani. —Dice Raúl sorprendido.
— ¿Qué? ¿Vas a sacar la pistola? —Pregunto desafiándolo sin ningún tipo de miedo.
— Tranquilo, he asimilado lo tuyo con mi hermana. —Responde.
— No te confundas, lo de tu hermana y mío solo fue sexo, no paso a más.
— ¿No te parece un buen partido?
— Es atractiva pero debería valorarse un poco más.
— Podríais intentarlo. —Insiste.
— No te esfuerces, no veo a tu hermana para una relación y no la veré nunca.
— ¿Sabes qué me está molestando lo qué dices?
— Si y espero que tú sepas que me importa una mierda. —Encono los hombros.
— Vámonos. —Me susurra Jesús.
— ¿Por qué? Estamos de buen royo ¿O no? —Le pregunto.
—Pues no.
— Tú única intención ha sido juntarme con tu hermana, pues mírame bien —Me acerco— ni loco.
Veo como saca la pistola y le pongo la mía en la frente, él me mira furioso mientras yo rio.
— Lárgate de aquí.
— ¿Tienes la pasta? —Le pregunto a Jesús.
— Si, vámonos, este gilipollas no merece la pena.
Nos marchamos, nos vamos a un hotel porque aún no tenemos donde vivir, me doy una larga ducha y seguidamente me acuesto, tengo que estar bien para mañana, me toca un día intenso.
Al día siguiente Jesús me acompaña a comprar la ropa para ir a hablar con los padres de Ledra.
NARRANDO LEDRA.
Estoy nerviosa durante toda la mañana, Alicia no deja de burlarse de mi, pero no es ninguna tontería, Daniel va a hablar con mis padres para que podamos estar juntos.
— Ese chico te quiere y mucho. —Me dice Alicia.
— Si —Sonrío— nunca me imaginé que sentiría algo así.
— ¿Dónde estuvisteis ayer? —Me pregunta.
— Pues por causa de su rabia llegamos a un bosque, empezó a llover y tuvimos que entrar al hotel.
— La lluvia duró poco.
— No quieras saber más. —Me rio.
— ¡No me digas qué —Se ríe— Dios!
— Me acosté con él ¿Vale? Quise hacerlo, estaba preparada y surgió, no pude haber elegido mejor.
— Dios —Reímos— ¿Y cómo te sientes? —Sonrío y muerdo mi labio.
— Extraña, diferente, no sabría explicarte —Muerdo mi labio— pero sentí que me amaba, tanto como yo a él.
— ¿Y?
— Somos pareja. —Pega un salto de alegría.
— Has cazado al chico más chulo, frío y loco de todos ¡Al más deseado!
— ¡A la, a la! Si desgraciadamente se ha acostado con muchas —Hago una mueca con la boca.
— Pero no ha amado a ninguna, jamás, dicen que tenía el corazón de acero, nadie pudo nunca derribar la muralla que tenía.
— Estas informada.
— Eres mi mejor amiga, tenía que hacerlo —Reímos.
— Me ha dicho que por mí será capaz de dejar la mierda en la que está metido.
— ¿Qué? —Su tono es de sorpresa.
— Si —Me rio.
— Está enamorado de ti, sin duda.
— Lo sé —Digo feliz.
NARRANDO DANIEL.
Me visto, estoy bastante nervioso, voy a conocer a mis suegros, aunque ellos no me acepten y intenten separarme de ella, necesito que sepan que la quiero bien.
— ¿Nervioso? —Me pregunta Jesús desde la puerta.
— Demasiado.
— Todo saldrá bien.
— No me quieren para su hija pero voy a intentar que acepten nuestra relación, voy a decirles que estoy enamorado de ella hasta las trancas.
— Recuerda que son fresas.
—Si, lo recordaré.
De repente mi móvil suena, es un número oculto.
LLAMADA TELEFÓNICA.
— Habla.
— Mi querido Daniel. —Dice Ezequiel.
— Aún tengo, iré cuando no tenga.
— No te llamo por eso, te llamo por mi propuesta.
— No me acordaba —Digo mirando a Jesús.
— Yo te la recuerdo, ganarás muchísimo dinero.
— Lo sé.
— ¿Y bien? ¿Aceptas? Mañana empezarías todo.
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Nuestro amor es animal.
Romance"Si me pides fuego, arderá todo. Yo no se amar de otra manera. " BORRADOR. ✘FANFIC ✘ • ────── No se permitirán plagios, ni copias de ningún tipo, serán denunciados inmediatamente.