Enemigo íntimo

61- Instrumentos de venganza 1° parte

Kanon encontró pastando a los caballos pero no había señales de los adolescentes.

Comenzó a estudiar los alrededores, se acercó al arroyo y vio pisadas recientes... las fue siguiendo, mirando ramas rotas y de pronto el par de pisadas se convertían en tres.

Un agudo dolor en el pecho le cortó la respiración y cayó de rodillas, justo cuando llegaban los reyes y Saga.

-Algo le pasó a los niños, a Ángel... lo puedo sentir...

Se tomaba la ropa a la altura del corazón y se ahogaba en su angustia...

-¿Qué sientes Kanon, por favor? Qué encontraste?

Camus lo abrazaba con aflicción...

-No están... sólo sus caballos... hay un par de pisadas aparte de la de ellos... es un hombre adulto y pesado... se hunde en el pasto mucho más que los niños...

Camus volteó hacia Shura con toda la desesperación en su rostro

-¿Quién pudo entrar aquí y llevarse a nuestros hijos?

Shura estaba pálido y miraba a su consorte sin reaccionar

-¡Shura!

-Nadie puede entrar a las tierras del palacio real, están vigiladas metro a metro...

-Me estás diciendo que nuestra propia gente se ha llevado a los niños? Con qué propósito? Shura por favor, llama a nuestros padres y cierra las fronteras del reino!. Quiero a los pequeños de vuelta!

Estalló en llanto, mientras Kanon miraba a todos lados sin comprender lo que sucedía...

Apenas habían dejado la tranquilidad de su hogar para darles un regalo a sus hijos y ahora uno de ellos había desaparecido con el príncipe...

¡Era una pesadilla!

Saga y Shura se les acercaron y les contuvieron como podían, mientras Degel contemplaba la escena y su vista se perdía a lo lejos...

-Puede tratarse de alguien de aquí o no...

Su voz se escuchó y todos voltearon

-Quiero decir, que pudo haber sido un enemigo con algún cómplice dentro del palacio o simplemente alguien pagado para hacerlo...

-No lo digas por favor... no lo hagas... Emmanuel y Ángel son chicos inocentes y el reino ha estado en paz por años... ¿quién querría hacernos daño?

-Ya envié el emisario y mi padre cerrará las fronteras y accesos a puertos...

Kanon, puedes ayudarme con la búsqueda? Sé que es difícil para ti también, pero necesito de tus ojos amigo...

El gemelo levantó sus enrojecidos ojos y asintió.

-Aquí hay huellas de a dos, estaban juntos y solos; aquí ya hay tres pares de pisadas y... mira, aquí alguien cayó al piso y fue arrastrado... no... por favor no... hay sangre...

Camus vio todo dar vueltas a su alrededor y debió sostenerse de su hermano para no caer. Degel lo abrazó fuerte

-Todo estará bien, hermanito...

Él veía a Shura y los gemelos haciendo rastrillaje y sus ojos se llenaron de lágrimas.

-Si algo le pasa a los niños, yo no podré vivir...

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Lejos de allí, el extraño hombre aguardaba a que la noche avanzara para sacar a los adolescentes de esas tierras enemigas...

Estaba alterado, no había salido tal cual lo planeado; el príncipe estaba acompañado de un hermoso adolescente que se había empeñado en arruinarle los planes...