Shura miraba a Camus dormir y una sonrisa se escapaba de sus labios... era tan hermoso, tan dulce y lo amaba tanto...
Sus pensamientos lo llevaron a cerca de dos años atrás cuando en una noche, mientras observaban la puesta del sol, su hermoso príncipe se entregó a él en cuerpo y alma...
FLASHBACK
Shura estaba tendido sobre una sábana en medio del claro del bosque, en una pequeña colina que le daba vista perfecta al atardecer...
Sus brazos tras su cabeza, miraba embelesado a su amado futuro consorte que, recostado a su lado, tenía la cabeza apoyada en su pecho mientras su mirada se perdía en el horizonte.
Los últimos rayos anaranjados del sol, reflejaban en su rostro y sus ojos azul violáceos se llenaban de un color rojizo, haciéndolo increíblemente sexy.
Sintiéndose observado, Camus levantó la mirada para encontrarse con esos ojos verdes que tanto amaba y lo miraban con...deseo?
Hacía pocos días que habían regresado del campamento militar y estaban trabajando duro para abastecer a los soldados y hospitales con los suministros necesarios...
Shura había descubierto sabiduría en Camus, una predisposición altruista que lo enorgullecía y hacía que lo amase más cada día...
A pesar de saber que ya se había entregado a Kanon, él no daba un paso para pedirle estar juntos...lo deseaba como nada pero temía el rechazo...
Camus se incorporó un poco, su rostro se acercó poco a poco al contrario y selló sus labios con un beso tierno...
Lo miraba a los ojos, se perdía en su mirada tranquila y en su sonrisa... ese hombre había cambiado por él, lo consideraba lo suficientemente importante y valioso como para resarcirse de sus errores y tratar de ser mejor persona...
Su amor por el ibérico crecía día a día y sus deseos de demostrárselo se le estaban haciendo insoportables.
Su beso fue tornándose más pasional, su cuerpo comenzaba a trepar el contrario mientras acariciaba su rostro y le sonreía...
-Dime algo Shura... qué tanto me amas?
Shura se sorprendió ante la pregunta porque era obvio que lo amaba como a nadie
-Eres mi vida entera, copito! no soy nada sin ti!
-Y confías en mi? te pondrías en mis manos?
Camus acariciaba su pecho y desprendía los primeros botones de su camisa.
-S...si, claro...
Su respiración se aceleraba ante los toques del menor...
-¿Qué quieres hacer?
-Sólo déjame hacer, por favor...
Camus volvió a besarlo cada vez con más pasión, le abrió completamente la camisa y sus labios se movieron desde su boca hacia su cuello, siguiendo su descenso hasta las tetillas sin dejar de mirarlo a los ojos...
Pasaba suavemente su lengua por una de ellas, mientras acariciaba la otra, provocando suaves suspiros en el mayor...
Cambió su acción y besó su pecho, comenzando a bajar lentamente hasta su abdomen sin dejar lugar de su piel sin besar o acariciar...
Shura sentía perderse en las sensaciones que el toque de su amado le brindaba, lo estaba enloqueciendo de deseo por poseerlo pero no sabía hasta donde Camus se atrevería a avanzar.
El menor se incorporó un poco y de un solo movimiento se quitó la polera que traía, dejando expuesta su piel nívea...
Luego bajó sus manos hasta el cinturón de Shura y lo desprendió, para luego hacer lo mismo con el botón del jean... ante ésto, Shura lo detuvo por la muñeca y le preguntó
-Estás seguro de esto?
Recibiendo una sonrisa por respuesta.
Sin necesidad que lo pidiese, levantó sus caderas para que el menor bajara su pantalón y él mismo terminó por quitarlo del todo.
Su erección era evidente y Camus se relamió nervioso... se acercó despacio y pasó su nariz sobre el bóxer, sintiendo la esencia de su amado a través de la tela...
Lo volvió a mirar y con una sonrisa ladina, puso el dedo en el borde de la prenda, acariciando su piel con agónica lentitud hasta rozar su erección.
Con los dientes tomó la tela y la tironeó hasta dejar al descubierto el objeto de su deseo... lo desnudó por completo y se acomodó entre sus piernas tomando con sus manos el enhiesto miembro, comenzando a masturbarlo para luego acercar su boca y dar una primera lambida.
Otra vez no le resultó repulsivo y tomando confianza se dejó llevar por sus sentidos, escuchando los jadeos y gemidos de Shura, que se aferraba a la sábana debajo suyo.
Cada gesto del ibérico le mostraba lo que más le gustaba, los puntos que lo hacían vibrar, estremecerse de placer...
-Ya basta mi amor... voy a acabar...
Shura jadeaba sin parar pero Camus no lo soltó y por el contrario, lo tomó bien profundo hasta que sintió el líquido caliente en su garganta...
Tras limpiarse la boca sonriendo, se acercó a su novio que aún respiraba con dificultad y lo besó en la mejilla.
-¿Lo hice bien, amor? ¿Te gustó?
Shura lo tomó entre sus brazos y de un sólo movimiento, lo puso debajo suyo, besándolo con lujuria, sintiendo su propia esencia en los labios contrarios.
-Me has dado un placer único e increíble! ahora es mi turno!
Lo desnudó en segundos, no deseaba perder tiempo para disfrutar de ese cuerpo que lo enloquecía...
Estaba sucediendo, estaban juntos por primera vez y quería aprovechar cada instante posible.
Lo asaltó con su boca haciéndolo gritar de placer, besando, lamiendo y acariciando cada parte de su cuerpo adolescente, dejando marcas en su piel, declarándose dueño de ese ángel...
Llegó a su vientre y sin previo aviso lo tomó entero en su boca, lo engulló y succionó con avidez, su lengua trazaba las venas y su mano seguía el movimiento de su boca.
Camus se arqueaba de la satisfacción que sentía, gemía y pedía más... se separó un momento y puso dos de sus dedos en la boca del menor, que los lamió sonriendo.
Volvió a su felación mientras que separaba aún más las piernas y acariciaba suavemente la pequeña entrada.
La excitación de Camus era muy grande, el amor de su vida lo haría suyo al fin, su entrega sería total...
Un dedo comenzó a hurgar probando, pero desistió al momento y, levantando aún más las piernas del chico, separó sus nalgas y su lengua le dio el primer beso negro de su vida.
Camus saltó ante la extraña sensación pero luego su cuerpo cayó rendido ante las olas de placer que le brindaba su amante al traspasar su primera defensa con la lengua, lamiendo, besando, abriéndolo para él...
Su cuerpo ya no sabía a qué sensaciones respondía, era un manojo de gritos, jadeos... el orgasmo lo golpeó y sintió la invasión en su cuerpo, un dedo, luego dos y un tercero...
Shura alineó su miembro y conquistó ese cuerpo deseado; su corazón latía con fuerza, así que esperó a que su amante se acostumbrara para comenzar a moverse.
Todo se redujo a pasión, deseo y lujuria entonces... lo tomó tantas veces como pudo hasta que sus cuerpos dijeron basta y quedaron rendidos, abrazados a la luz de la luna... la única testigo de aquella perfecta primera vez...
FIN DEL FLASHBACK
-¿Te sientes mal? ¿por qué no me dices nada?
Camus le hablaba pero Shura estaba perdido en sus recuerdos; lentamente, como volviendo a la realidad, lo miró a los ojos y éstos estaban dilatados...
-Camus... necesito tenerte... ahora...
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Enemigo íntimo
Hayran KurguUna guerra inminente, una amenaza mortal a dos países pacíficos y blancos fáciles para sus enemigos, pero enemistados entre sí... una alianza que se cumplirá sacrificando lo más sagrado de sus regentes: sus hijos... Disclaimer: Los personajes perten...