Narra ____:
La luz no llegaba muy lejos pero lo suficiente para ver más allá de unos metros. Estaba todo tranquilo, pacífico y silencioso, demasiado silencioso. Algo ocurría y no era bueno, lo sabía, no sé cómo pero lo sabía, esos bichos nos estaban rodeando y yo sola no podía contra ellos. Tenía que protegerles pero a la vez necesitaba avisar hasta que alguien nos encontrara.
No tardé en decidirme. Creé una burbuja y los encerré mientras que yo me quedé fuera lanzando rayos para que alguien les salvará.Las criaturas cada vez estaban más cerca y yo más cansada. Escuchaba pasos a mi alrededor.
-¡FUERA O NO DUDARÉ EN ATACAR!- el sonido solo se acercaba más- ¡NO VAS A CONSEGUIR HACER DAÑO A MIS AMIGOS! ¡LLÉVAME A MÍ PERO NO A ELLOS!
-¡____!- era la profesora McGonagall quien corría hacia mí, seguida de ella iban otros profesores.
La abracé y le pedí que los pusieran a salvo y volvimos al castillo.
Me quedé en la enfermería esperando a que se despertara Harry, Sirius estaba encerrado. Cuando Harry se reanimó Hermione le contó todo a Harry mientras que yo peinaba un poco el cabello de Ron.
Dumbledore entró en la sala y Harry se lanzó sobre él junto a Hermione consiguiendo que le contara algo a esta última de lo que no me llegué a enterar pero sabía perfectamente lo que le había dicho.
-Sácalo de una vez y arregla todo esto- dije después de que se fuera el director- podéis hacerlo, lo sé.
-Pero ____...
-Lo vais a conseguir, creed en vosotros.
Ambos se desvanecieron gracias al giratiempos y aparecieron al instante por la puerta.
-¡¿Pero cómo?!- balbuceo Ron.
-¿Qué pasa Ronald?- preguntó Hermione.
-Sí, ¿qué ocurre?- continuó Harry.
-¿Lo habéis conseguido?- pregunté ansiosa, a lo que Harry contestó dándome un abrazo.
-Lo logramos, tenías razón, él me quiere de verdad.
Suspiré y pasaron varios días que pasé en la biblioteca investigando sobre mis "poderes" por así decirlo. Al cuarto día fui al patio donde me encontré a todos aplaudiendo a un Harry feliz sobre su nueva escoba obviamente regalo de su padrino. Entre la multitud pude diferenciar a uno de mis pelirrojos favoritos.
-Hola Fred- se veía emocionado mientras hablaba, supuse que era porque mañana nos daban las vacaciones.
-Adiós- contestó cortante.
-¿Qué te pasa?
-¡¿Que qué me pasa?! ¡Te intento ayudar, te apoyo y lo que recibo de ti es ese golpe del otro día!
-¡SABES PERFECTAMENTE QUE YO NO ERA ESA!
-¡YA NO PUEDO MÁS ____! ¡ESTOY CANSADO DE TODO ESTO, ESTOY CANSADO DE TUS PROBLEMAS, TUS QUEJAS, YO SOLO INTENTO AYUDAR! Y YA NO PUEDO MÁS...
-Fred...- apenas pude hablar por el nudo en mi garganta.
-¡Toma, Héctor, tu Héctor te ha enviado una carta diciendo lo preciosa que eres!- me tendió un sobre abierto.
-¡¿Has leído mi carta?!
-¡Ahora el malo soy yo ¿No?! ¡NO ME HABLES, NO ME MIRES, NO ME ESCRIBAS! Me voy con MI novia.
-Ten un buen verano...- susurré llorando.
El día transcurrió en despedirse de los demás, contestar a la carta tan dulce de Héctor y hacer las maletas.
Después de un año vuelvo a casa, el tiempo se ha pasado volando y yo... Espero que Fred esté bien sin mí.
*FIN DEL TERCER CURSO*
ESTÁS LEYENDO
La rarita sin casa [Fred Weasley y tú]
FanfictionHola, soy ____, tras un pasado complicado voy a entrar por fin a Hogwarts, desde pequeña ese a sido mi sueño, solo espero estar tranquila pero, ¿quién sabe lo que me espera? Dumbeldore me pidió que accediera a la escuela e incluso convenció a mis pa...