La Bratva ha decidido abandonar "La asociación" comandada por Eiden Palacios, con ello, consolidan una vez más su enemistad.
Madaby Palacios no es ninguna paloma blanca, a pesar de los esfuerzos vanos de su hermano mayor, se verá atraída por los be...
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NUEVA YORK – ESTADOS UNIDOS DE NORTEAMÉRICA.
— ¿Estás seguro, Saga?
— Si, estoy seguro que están planeando algo, hice números, los más probable es que Darién haya partido de Jordania o un país cercano, estoy casi seguro que se vio con alguien, es zona de guerra.
— Bueno, dudo que pretenda mandar un misil para eliminarme, piensas demasiado, Saga, como siempre, te va a explotar la cabeza si sigues así.
— No es eso, vos no entendés que es serio, y luego, estás solo allá.
— No me va a pasar nada, además está increíble el clima aquí y voy a verme con Jared, creo que tendremos una cena de esas de hermanos que no habíamos tenido antes.
— ¿Y Llaó?
— Ese hermano mío se la pasa golpeando sacos, quiere ser campeón, sin saber que ya lo es, pero mira, sigue vigilando las formas en que los árabes o talibanes o no sé quién mierdas pueda atentar contra nosotros, vigila a Darién y no le quites el satélite de encima a Briar, debemos cuidarnos mucho de ese hijo de puta ¿De acuerdo?
— ¿Desde cuándo vos sos tan despreocupado?
— Desde que tu cerebro cumple con esa función, adiós. – le colgué antes de llegar al restaurante en el que Jared me esperaba, el problema con los neoyorkinos se había resuelto más fácil de lo que pensé, así que hoy mismo volveré a casa.
— ¿Qué onda? – miré raro a mi hermano.
— Hola ¿Cómo estás? Así se dice, Jared. – me senté.
— Vamos, tu eres el chic aquí, yo soy el metalero de los tatuajes.
— Tienes razón ¿A qué hora llega Zetha?
— Pronto, cuando aterrice su avión me llamará.
— ¿Te casarás con ella? Eres el que falta, que, por cierto, deberíamos organizar algo para hacer oficial el matrimonio de Llaó e Isabel.
— ¿Tú organizando eventos?
— Las cosas cambian en muchos años, digo, tú piensas casarte, yo estoy casado y tengo un niño precioso.
— Es una maravilla el piolín, se parece a su tío Jared. – me reí.
— Quisieras que en un futuro te salga un hijo tan genéticamente dotado de hermosura como Yoan. – le mostré mi fondo de pantalla y la foto de mi querido y perfecto hijo.
— Es una divinidad, mira como frunce el cejo, como tú.
— Es medio corajudito.
— Anderson a la vista. – toqué marida, auxilio, no más por favor, mi hermano rió de mi reacción.
— Ojalá que sea muy Palacios, de otro modo corre el riesgo de ser como, el tío Jackson. – Jared se frotó los brazos, como si tuviera escalofrío, yo hice lo mismo, qué miedo.
