Capítulo 66 • Una hermosa sorpresa

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Narrador

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Narrador

Por la mañana del día siguiente, cuando despertaron. Diana y Carl estaban abrazados desnudos con radiantes sonrisas en sus rostros. Habían permanecido en actividad gran parte de la noche, así que se sentían bastante agotados.

La chica misteriosa se acomoda sobre el torso de Carl para mirarlo muy atentamente mientras el chico del sombrero acaricia la espalda de Diana y juega con su cabello.

Al mismo tiempo intercambian sonrisas, recordando todo lo acontecido desde que salieron a mirar las estrellas.

— Buenos días —sonreía Carl.

— Hola, amor —le dijo Diana.

Unieron sus labios en un corto beso y luego siguieron observándose, como si no pudieran creer que habían tenido la fortuna de coincidir en esta vida

— Se hace tarde, van a preocuparse si no salimos de casa pronto —menciona Diana.

— Yo prepararé el desayuno. Tú vístete porque hoy irás al bosque —dijo Carl.

Diana sonrió, acariciando y besando el pecho desnudo de Carl antes de levantarse.

El chico del sombrero también se puso de pie para ponerse su ropa tan rápido como pudo y observó con una sonrisa a Diana caminar lentamente hacía el baño mirando distraída el anillo en su mano. Carl luego bajó las escaleras hacia la cocina, desde donde estuvo al pendiente de la puerta para hablar con el hermano de Diana en cuanto llegue.

Se puso a picar fruta en lo que espera, repasando lo que ha planificado para ese día. Pero no tardó mucho hasta que vio entrar a Sergio y se acerca de inmediato hacia él.

— ¡Sergio! Quiero pedirte un favor —le dijo Carl.

— Primero que nada buenos días —dijo Sergio entre risas.

— Cierto, lo siento. Es solo que debo hablar contigo antes de que Diana baje a desayunar —explica Carl.

— ¿Por qué? —le pregunta Sergio.

— Tengo planes y necesito de tu ayuda —dijo Carl.

Sergio queda en silencio y lo mira con confusión. Aunque en cuanto supiera que solamente se trataba de algo que haría muy feliz a su hermana, accedería ser parte de la idea que Carl tenía.

Mientras tanto, Diana estaba en su habitación y para salir al bosque se había puesto una de las camisas a cuadros de Carl junto a unos jeans negros que combinaban. Ha decidido que quiere usar la ropa de su chico del sombrero más seguido.

Cuando estuvo lista siguió observando su anillo y sonreía sin darse cuenta porque estaba más que contenta de ahora ser la esposa de su chico del sombrero.

Bajó las escaleras con calma y llegó hasta la cocina, donde solo la esperaba su hermano.

— ¡Sergio! Estuviste haciendo guardia toda la noche, ¿verdad? —pregunta Diana.

El Chico del Sombrero • Carl GrimesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora