Capitulo 67: Caída.

2K 198 142
                                    

Capítulo 67 Primera parte:

—No puedo transformarme, si no lo hago si no puedo si quiera hacerlo ¿qué pasará con todo?

Me deshice del agarre de Mason mientras veía en sus ojos el miedo, Scott estaba en silencio.

— ¡Soy Illazki! — El pánico en mi voz incrementaba — ¡No tengo los elementos ni la transformación! ¡No soy nada!

—Aidan— Mason intentó tocarme de nuevo, negué.

—No soy nadie— musité dando las espalda —si tan solo los solitarios lo supieran, si Gadrel lo sabe estamos perdidos.

—No lo harán— Mason aseguró —si lo hubiese sabido habría atacado.

— ¡No lo sabes con certeza! —limpié mis mejillas, no podía siquiera detener el llanto y el miedo circulaba por mi cuerpo.

—Debes tranquilizarte, todo está bien, por favor— habló Scott, pero sus palabras carecían de peso.

—Nada está bien, nada lo está, Ilikai no está conmigo, si van por él no podré hacer nada— miles de escenas pasaban por mi mente, una más aterradora que la otra —si a Ethan lo lastiman, o si, o si, llámalo Mason, habla con él— mis manos temblaban y presioné mi cabeza, me comenzaba a marear de nuevo —¡Llámalo, Mason!

— ¡Basta ya Aidan! — El chico de ojos negros me tomó por los brazos —todo estará bien, estoy contigo, nadie te lastimará ¿bien? — La presión fue decayendo un poco —vuelve a ti.

¿Vuelve a ti?

Cuando intenté cubrir mi rostro él me lo impidió.

—Ilikai estará bien, Ethan y los Alfas lo cuidarán, todo está bien— pronto me di cuenta que mi respiración se fue normalizando y los temblores se desvanecieron —yo te protegeré.

El abrazo de Mason fue mi protector y mi tranquilizante, ese chico era de las pocas cosas buenas que tenía, él era importante para mí ¿me perdonarás?

—Entremos, mejor que nadie sepa de ello— fue lo que escuché del futuro Alfa.

No me separé de Mason ni él lo hizo.

Scott nos seguía en silencio cuando entramos de nuevo a la recamara nadie dijo nada, solo me acompañaban.

Tocaron la puerta.

—Alfa, las comunicaciones se perdieron.

— ¿Se perdieron? Es algo imposible— el pelirrojo se puso de pie, me miró rápidamente —tranquila Aidan, ha llovido mucho, debe de ser algo—pero en su mirada podía ver la ansiedad.

—Envíen a un grupo de soldados para el mensaje, hagan que Kala lidere ese grupo para dar aviso a los Alfas— dije.

—No creo que sea necesario, solo nos esperaremos a...

—No— interrumpí —les dije que algo no está bien, no es normal que en una manada no haya comunicaciones, Mason, da la orden.

—Bien— se fue detrás del soldado. Solo quedamos Scott y yo, él me sonrió.

—Checaré cual es el error, por el momento descansa ya es tarde.

Sentada en mi cama y con una gran debilidad me encontraba la noche del 28 de junio.

Habían pasado varias horas desde que supe lo de los elementos, pero el miedo que sentía no se iba por nada, más al saber que mis sentidos habían bajado al punto de no poder percibir a alguien a la distancia, Scott estaba abajo, eso lo sabía porque él mismo me lo había dicho, Mason seguía con las órdenes hacia los soldados élites, habían acordado sacarme de la manada Tierra, solo por protección.

Mi Luna AzulDonde viven las historias. Descúbrelo ahora