Sirius Black
Normalmente el desayuno es de mis comidas favoritas del día. James lee el periódico frente a mí, mientras mezcla su té con su cuchara. Remus y Peter discuten como de costumbre de un tema sacado al azar. Van seis años que comemos en esta misma mesa y nunca han repetido un tema, todavía no entiendo como lo hacen.
Intento comer mi desayuno tranquilamente, unos bollos rellenos de mermelada de fresa junto con un vaso de jugo de naranja, mi favorito. Había acostumbrado a leer aquel libro de transformaciones que tomé de la biblioteca y que cargo a todos lados con la esperanza de encontrar algo de ayuda, pero creo que Nora ha dejado en claro que no necesita ayuda y tal vez Regulus tiene razón. Debería respetar esa decisión.
Sin embargo, siento que las páginas del libro gritan que las lea y algo en mi interior quiere hacerlo. Tal vez por el hecho de que si consigo ayudarla puede que regresemos a la amistad que teníamos antes o por lo menos puede que deje de ignorarme.
Lo más discreto que puede recorro con la mirada la mesa de Ravenclaw, pero no la veo por ningún lado. Probablemente no ha venido a desayunar, o se quedó dormida.
—Está en la mesa de atrás — dice James sin apartar la vista de su periódico. — Pero no creo que sea buena idea que voltees.
—¿Por qué?
—Sólo no lo hagas Sirius — comenta Remus que está sentado junto a James.
Peter voltea sin discreción alguna y abre los ojos como platos sorprendido, cuando me voltea a ver, niega con la cabeza.
—Son unos exagerados — les digo antes de voltear.
La mesa de Slytherin tiene una extraña forma de desayunar calmadamente y puede que alguna que otra maliciosa risa se cruce entre su calma, pero suelen conversar con más propiedad que los demás.
Recorro con la mirada la mesa hasta que encuentro a Regulus conversar con ese idiota de Quejicus intentando ignorar lo que sucede junto a ellos. Thomas Avery con una enorme sonrisa toma el rostro de Nora y la besa sin pudor alguno. Ella lo aparta y le dice algo con esa típica sonrisa de lado que suele tener cuando está tramando algo. Siento que algo en mis entrañas se retuerce y me hace apartar la mirada. Vaya regalo de cumpleaños.
—¿Estás bien? — pregunta Remus.
—Se me fue el hambre... — digo, alejando el delicioso platillo frente a mí. Tomo mis cosas y me despido con un movimiento de mano.
¿De todos los chicos posibles tenía que ser Thomas Avery? ¿De verdad? Camino sin rumbo alguno porque mil preguntas no me dejan pensar en nada más, hasta que alguien me sostiene del brazo y me hace voltear a mirarla.
Rox me sonríe y toma mi rostro para plantarme un dulce beso.
—Luces terrible para ser tu cumpleaños.
—No dormí mucho anoche — contesto sin muchos ánimos. — Además nunca me ha gustado mi cumpleaños.
—Eso es porque nunca has tenido un cumpleaños conmigo.
Sonrío por su entusiasmo y la tomo de la cintura para acercarla más.
—¿Y que hace diferente los cumpleaños contigo Malfoy? — pregunto coquetamente.
La chica sonríe de igual forma y toma mi mano para guiarme entre los pasillos hasta un salón oculto y que rara vez está en uso. Roxanne me obliga a cerrar los ojos antes de entrar.
—No soy muy fanático de las sorpresas Malfoy.
—Te gustará, confía en mí. —Cierra la puerta a nuestras espalda y hace que camine ligeramente hacia adelante. —Cuando quieras Black.
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[En Edición]Los Merodeadores: Encuentros
FanfictionJames Potter, Sirius Black, Remus Lupin y Peter Pettigrew, son el grupo de revoltosos, conocidos como los Merodeadores. Cuatro chicos que harán lo que sea el uno por el otro. Severus Snape, Lily Evans y Mila Abbott, los chicos reservados y intelig...