[En Edición]Los Merodeadores: Encuentros

Capítulo 65

Regulus Black.

Bostezo antes de abrir la puerta, espero encontrarme un cuarto vacío, pero termino viendo a Severus en una esquina con un libro en las manos y a Thomas sentado en el suelo frente al espejo.

—Creí que estaban en el dormitorio —digo cuando cierro la puerta a mis espaldas. Camino lentamente hasta quedar en el centro. Severus baja su libro y levanta la ceja.

—Tú también deberías estar en el dormitorio —dice Roxanne quien aparece en la esquina contraría, siento un susto de muerte al escuchar su voz, pero intento disimularlo y la volteo a ver. La chica tiene un pastelillo seguramente proveniente de las cocinas. ¿Desde cuándo Roxanne toma comida de la cocina?

—Nos encontramos aquí — aclara Severus. — Primero llegó Roxanne, luego yo y hasta el último Thomas, supongo que es una coincidencia.

—Las ilusiones son malas —comento acercándome a Thomas que está sentado con las piernas cruzadas.

—Entonces tú tampoco deberías estar aquí — responde Roxanne.

Me siento a un lado de Thomas y dejo que mi reflejo me hipnotice.

Sirius a unos metros a mi espalda con su usual sonrisa burlona y el cabello despeinado, aun más alejados están los demás chicos conversando entre ellos. Me pregunto si esté estúpido espejo mostrará la prioridad de tus deseos o simplemente los acomoda así para confundirme, porque finalmente a mi lado está sentada Abbott con esos lindos broches que le sostienen el cabello y algunas flores en el regazo como si las estuviera recolectando. Sonríe y casi siento que el corazón se me detiene. Envidio al chico reflejado en el espejo, que tiene aquella oportunidad de sostener su mano.

—¿Qué ves? —pregunta Thomas a mi lado con una voz tranquila.

—Pensé que eran cosas privadas — dice Severus a nuestras espaldas. Permanece de pie y a él se le une Roxanne.

—Me veo a mi misma como la encargada de la Mansión Malfoy, mi hermano a mi espalda en espera de órdenes y mi padre un poco más atrás con orgullo en sus ojos —dice la rubia.

—Yo también veo a mi padre y a mi hermana — dice Thomas. — Arrodillados ante mí. Incluso aparece ese idiota de William Parkinson. Supongo que después de todo, mis aires de grandeza nunca desparecen.

Miro a Abbott guiñarme el ojo y a mi hermano acercándose a mi espalda hasta poner una mano en mi hombro, casi puedo sentir que me está tocando.

—Me veo al frente de la familia Black — miento centrado en mi reflejo. — Mejor que mi padre incluso.

—Supongo que tenemos un fetiche por ser superiores a nuestros padres — dice Thomas.

Miramos a Severus a través del espejo en espera de que nos diga lo que ve, pero este nos devuelve la mirada.

—Porque ustedes hayan confesado abiertamente lo que ven no significa que tenga que hacer lo mismo — dice serio.

No preguntamos más al respecto, pero algo en mi interior me dice que Severus no quiere mentir como hemos hecho el resto. Thomas en lo último en lo que se ve interesado es en el poder que antes moría por poseer, y Roxanne, nunca se intereso en su familia tanto como para llegar al punto de desear estar en la cabeza del apellido Malfoy. Sin embargo, no nos cuestionamos y dejamos que lo que hay dentro de ese jodido reflejo siga siendo sólo nuestro, una mentira más que nos mantiene hipnotizados.

La puerta se abre bruscamente y por ella entran Nora y Sirius, se sorprenden al vernos a los cuatro frente al espejo, pero no se atreven a preguntar nada más.