•ꜱʜɪɴɢᴇᴋɪ ɴᴏ ᴋʏᴏᴊɪɴ• ⚔️ One shots

𝑬𝒓𝒘𝒊𝒏 𝑺𝒎𝒊𝒕𝒉

Salí de casa y caminé unos minutos hasta llegar al cuartel de la instrucción.

Esperé unos minutos y los cadetes comenzaron a salir.
Mi hermano menor vino corriendo hacia mí y me abrazó, levantándome un poco del suelo.

—Oi, bájame, te harás daño, Nile.

—Soy fuerte, en la instrucción nos formamos bien, ¿sabes?

Reí y golpeé su brazo.

—Vamos, nos están esperando en casa.

Se giró y miró entre la multitud de cadetes, al parecer buscando a alguien.

—¡Erwin! ¡Estoy aquí!

Un chico rubio salió de la multitud y caminó hacia nosotros. Vi que era bastante alto a pesar de su edad y algo musculoso. Su pelo tenía un pequeño brillo bajo el sol.

Cuando estuvo más cerca pude ver que era bastante apuesto y sus ojos eran hermosos.

Yo no aparté la vista y él tampoco, mientras se acercaba a nosotros.

—Buenas, soy Erwin Smith —dijo tendiendo su mano con una sonrisa.

—[Tn] —dije estrechando su mano—, la hermana de Nile.

—No sabía que tenías una hermana —dijo palmeando el hombro de su amigo.

Nile rodó los ojos y dirigió su mirada a mí.

—Hablé con mamá para que Erwin se quede unos días con nosotros.

Asentí con un nudo en la garganta. Iba a ser duro convivir con tal hermosura.

Caminamos hacia casa tranquilamente. Ellos me contaban anécdotas sobre sus entrenamientos y yo les explicaba lo aburrida que era la vida en la ciudad.

—¿Sigues ayudando a papá en la tienda?

—Como te has ido, tengo que trabajar aún más —dije golpeando su brazo.

—Oi, no te quejarás tanto cuando entre a la Policía Militar y pueda vivir en el muro interior. Podré llevaros conmigo, tonta.

—Eso si quedas de los diez primeros en la promoción.

—Si me permites intervenir... tu hermano saca puntuaciones muy altas, seguro que podrá ingresar en la Policía Militar.

—Gracias, Erwin. Al menos tú me apoyas.

Él sonrió y llevó su mano a su nuca, nervioso.

Llegamos a casa unos minutos después. Nuestros padres estuvieron muy contentos de ver a su hijo y a su nuevo amigo.

—¿Vives muy lejos de aquí, Erwin?

—Un poco. Desde que mi padre murió vivo con unos familiares lejanos en el este del Muro Rose.

—Oh, lo siento mucho —dijo mi madre.

—Está bien. En parte, estoy en la instrucción por él. Iré al Cuerpo de Exploración.

Nos quedamos en silencio unos segundos, analizando lo que había dicho.

—Eso es muy peligroso, hijo —advirtió mi padre.

—Tranquilo papá, estoy en progreso para quitarle esa idea de la cabeza. Si sigue como está, acabará de los diez primeros y podrá ingresar a la Policía Militar —dijo Nile, intentado quitarle tensión al ambiente.

Erwin se distanció un poco de la conversación, mirando a la nada.

Mis padres prepararon una habitación para que el rubio se quedara a dormir y él lo agradeció.