•ꜱʜɪɴɢᴇᴋɪ ɴᴏ ᴋʏᴏᴊɪɴ• ⚔️ One shots

𝑹𝒆𝒊𝒏𝒆𝒓 𝑩𝒓𝒂𝒖𝒏

Parte 2/2

Pasó el tiempo y comencé a sentirme más unida con mi escuadrón.

Todos me apoyaban por lo que había pasado.
Sobre todo Armin, principalmente porque se sentía culpable de haberse comido a uno de mis antiguos amigos.

—Te dije que no era buena idea tener novio —me reprendió Sasha.

—Pero no se lo recuerdes, idiota —dijo Connie, golpeando el hombro de la morena.

—Él fue quien me lo pidió, y yo estaba enamorada...

—No te preocupes, [Tn]. Pronto lo olvidarás —dijo Eren.

Lo dudo —pensé.

Lo que pensaba era absolutamente cierto.
Incluso ahora que el equipo esperaba órdenes para ayudar a Eren a conseguir en Titán Martillo de Guerra en el centro de Marley, ansiaba ver a Reiner.

Era consciente de lo que él había hecho, pero mis sentimientos parecían no querer asimilarlo.

•••

El momento decisivo se acercaba, en menos de una semana elegiremos el cuerpo militar al que nos queremos unir.

La agitación se notaba en la división 104. Algunos ya tenían decidido su futuro y otros aún pensaban cuál era la mejor opción.

—¿En serio vas al Cuerpo de Exploración, Reiner?

Connie aún no se creía que un compañero estuviera tan decidido a ello, a parte de Eren.

—Si, ya te lo he dicho —afirmó el rubio.

—¡Pero es una locura!

—Lo sé, pero... debo proteger a alguien —dijo alzando la vista para mirarme.

Desvié la vista, avergonzada, mientras Connie atacaba a preguntas al rubio.

Me levanté de la mesa cuando terminé mi cena, iba saliendo por la puerta del comedor cuando noté una mano sobre mi muñeca, que suavemente me hizo girar.

—¿Tienes un momento? Quiero hablar a solas —dijo Reiner, con una mirada decidida.

—¡No puede ser! —dijo uno de los cadetes saliendo del comedor, mientras hablaba con una compañera.

Reiner bajó la vista, decepcionado.
Los cadetes ya salían del comedor y, dada la hora, no podríamos ir a ningún sitio tranquilo sin que alguien que estuviera de guardia nos pillara.

La mirada de Reiner me hizo comprender que era importante, así que aproveché que su mano se había deslizado un poco por mi muñeca para entrelazar nuestros dedos y arrastrarlo fuera de allí.

—Vamos.

Aproveché para colarme entre la multitud y escondernos en la parte trasera del comedor.

Me aseguré de que todos se fueron y me giré hacia él.
Estábamos bastante cerca y eso me puso nerviosa.

—[Tn], yo...

No le seguí escuchando, ya que la mirar a su espalda vi a unos superiores, hablando mientras se dirigían hacia un lugar cerca de nuestra posición.

Agarré de nuevo su mano y le arrastré rápidamente hacia el almacén, donde se guardaban los equipos de maniobras tridimensionales.
Cerré la puerta tras nosotros y miré por las pequeñas rejas en la madera para asegurarme de que los superiores se alejaban.