Mío o de nadie

65- Escaleras abajo

Los alumnos del último año de Las Encinas estaban ansiosos por lo que el fin de curso significaba: la fiesta de fin de curso.

Lu proponía organizarla ella de principio a fin, pero recibió una negativa por parte de todos sus compañeros; Carla quería algo alocado, ya estaba harta de ser la niña elegante y perfecta de siempre; Nadia prefería algo más familiar sin hacer tanto alboroto... y ¿los muchachos? Solo querían que les dejaran de preguntar y pedir opiniones del tema, ya que siempre que omitían opinión alguna, sus novias terminaban por negar con la cabeza y mirarlos cuestinantes ante la decepcionante elección de el celeste por arriba del cerúleo, que aprendieron que era un color... igual al celeste... pero con diferente nombre.

Habían decidido ceder a la idea de Lu y hacer la fiesta en uno de los hoteles más importantes y caros de Madrid, con la condición de que todos vieran el lugar antes.

- Tienen sauna.- comentó Valerio tomando un folleto y mostrándoselo a Nadia que caminaba a su lado por el inmenso pasillo de ventanas de vidrio que conectaba el lobby del hotel con la playa del frente.

- ¡Y habitaciones de escape!- agregó Carla sacudiendo una copia del folleto en el rostro de Samuel.

- ¡No jodas!- ahora Valerio pasaba las páginas para encontrar dicha sección.

- He oído que es uno de los mejores del país.- Guzmán comentaba sonriente tratando de que Nadia se percatara de lo que quería.

- No iremos allí.- decretó Samuel dirigiéndose a Carla.

- ¿Disculpa?- Carla lo miró indignada.-¿Así que ahora eres tú el que decide lo que hacemos en su totalidad?

- Tienes razón, déjame reformular.- le sonrió irónico.- No iré allí.

- ¿Y se puede saber por qué?

- Carla, cuando te encuentras en situaciones de estrés y que no puedes controlar o levantas la voz innecesariamente, o comienzas a mandar a todos al diablo, o me pegas, o todas las anteriores juntas.- enumeró mientras caminaba.- Y no pienso arriesgarme a eso encerrado en una habitación contigo con un reloj en cuenta regresiva.

- Pero yo también quiero ir.- Cayetana intervino poniéndose del lado de Carla.

- Pues vayan ustedes.

- Que raros...- le susurró Guzmán a Nadia, ya que habían oído toda la conversación.- Estoy libre luego del recorrido.- insinuó.

- Pues bien, que te diviertas.- lo cortó en seco.

- ¿No iremos juntos?- cuestionó mirándola extrañado.

- Déjame pensar... ¿pasar el día contigo, el más competitivo y ambicioso que conozco, jugando un juego?- apuntó de forma sarcástica.- No, gracias. Paso.

Valerio estaba por proponerle a Lu la idea rechazada por las dos parejas anteriores, pero esta lo vió venir a tiempo para levantar un dedo y limitarse a decir "No".

- Pues entonces Carla, Guzmán, Cayetana y yo, iremos por nuestra cuenta.- Valerio de frenó en su lugar y señaló a sus compañeros.

Samuel se mofó y Nadia lo miró rodando los ojos.

- ¿Qué se supone que significa eso?- Guzmán se cruzó de brazos.

- Nada, nada.- la palestina rió por lo bajo mirando a Lu, que levantaba una ceja.

- Pues definitivamente parece que algo les causa mucha gracia.- Caye los miró frustrada.

- Val, tienes una tendencia de entrar en pánico cuando te sientes claustrofóbico.- Lu comentó con una sonrisa burlona de lado.