CARLA POV
Odio la humedad. Por varias razones, pero la principal es mi cabello. Parezco la versión rubia de Oprah Winfrey en sus comienzos.
Samuel, como siempre, dice que me veo "deslumbrante". No sé si el enamoramiento lo ha dejado ciego o si solo lo hace para que deje de quejarme, pero sea lo que sea, me pone los nervios de punta.
Hoy tenemos una cena para despedir las vacaciones con el grupo. Obviamente, fue idea de Lu... quien obligó a Valerio a aceptar, quien fue obligado a obligar al resto para que Lu no se vea como una tirana que obliga y amenaza a la gente. Lo es, pero así la queremos.
Samuel ya está sentado en el sofá esperándome con sus jeans y camisa blanca que, sobra aclarar, yo elegí. Si fuera por él, viviría con tan solo dos prendas de ropa que sortearía día de por medio para lavarla.
- Si tanto te preocupa parecerte a Diana Ross, mi afeitadora está en el baño.- me molesta desde su lugar.
- Eres muy chistoso. Espero que aún sea así cuando lo único que hagas esta noche al volver a casa sea dormir.- aparezco desde la puerta ya lista. Pude conseguir rizar mi cabello para que el frizz no lo consuma y me coloqué un lazo celeste que combina con mi vestido.
- ¡Hey! Estoy intentando consolarte y tú me castigas.- bromea antes de voltear a verme y que su sonrisa divertida cambie a una expresión indescriptible.
- ¿Qué te parece?- pregunto dando una vuelta para que el vuelo de mi falda acampanada haga su magia.
No recibo respuesta alguna, más que un extraño "Mm-mh" seguido de una mirada distraída que me observa de arriba a abajo.
El viaje en auto hasta el apartamento de Lu y Nadia fue igual que siempre. Yo escojo la música desde mi móvil, cantamos y hablamos de cualquier cosa o a veces de nada, quedándonos en ese cómodo silencio que solo nosotros sabemos compartir.
Pero aún así había algo raro en él. Como si no estuviera por completo en el planeta tierra.
Al llegar al piso de las chicas, somos recibidos por Valerio, que predeciblemente fue el encargado de ser el botones hasta que todos llegasen.
Normalmente, los varones subieron a la parrilla en la terraza y nosotras nos quedamos en la sala hasta que la comida estuviera lista.
- ¿Puedes creer la vista que tiene este lugar?- siento a Lu sentarse a mi lado ofreciéndome una copa de vino.
- La verdad se han encontrado un lugar encantador.- comento aceptándole la copa y llamando a Nadia con la mirada.- Y además lo han decorado de maravilla. Se notan ambas personalidades en el lugar.
- Sí...- fue todo lo que Nadia logra decir. Su mirada esta perdida y toma sorbos ausentes de vino sin voltear la cabeza de la ventana. No lo tomo como una ofensa o como si estuviera molesta conmigo porque, por la cara de Lu, puedo descifrar que se trata de Guzmán.
- ¿Todo bien?- para mi sorpresa, mi voz se escucha preocupada en vez de confortante como yo esperaba.
- Es el idiota de su novio.- interviene Lu sin dejarla hablar.
- Guzmán,- la corrige reprochándole con la mirada antes de dirigirse a mi.- no está de acuerdo con que yo haya elegido vivir con Lu en vez de rentar un apartamento en pareja.
- Si lo piensas bien, la miseria de Nadia es toda tu culpa.- comenta Lu señalándome con un dedo.
- ¿Y eso por qué?
ESTÁS LEYENDO
Mío o de nadie
FanfictionDespués de que el su plan terminara en fracaso (terminada la segunda temporada), Samuel termina por convencer a Carla de que le de una oportunidad para demostrarle que nada fue un juego para él. Con mutuo esfuerzo para vivir una relación sin mentira...