- Despierta – me dijo Loki levantándome.
- ¿Qué? – dije fastidiada.
- Tony quiero que te vayas de aquí pasado mañana, así que más te vale hacer algo ahora.
- ¿Cómo sabes eso?
- Oí hablando a Sam, Bucky y el Capitán, ellos le dijeron eso a Steve, obvio él se negó y hablará con Tony.
- Entonces todo está bien, Steve hablará por mí.
- Sí, pero necesitas demostrar que tienes poderes, sobre todo que no los puedes controlar y que puedes poner en peligro a los simples midgardianos.
- Entonces ¿qué hago?
- Haz una pequeña demostración de tus poderes, sé que tienes varios trucos bajo la manga.
- Bien, veré qué hago, ve a tu habitación y luego vienes como todo los demás – él asintió y desapareció, empecé a pensar qué podía hacer, solo se me ocurrió hacer retumbar las cosas a mi alrededor, así que eso hice, a los segundos mi puerta se abrió, el primero en llegar fue Steve, fingí estar realmente asustada y abrazarlo, la habitación se fue llenando de los demás.
- ¿Estás bien? – me preguntó Steve mientras seguía abrazada a él, negué con la cabeza mientras lloraba – ¿Qué pasó? – vi a los demás para hacerle entender que solo quería hablar con él – ¿nos dan un momento? – preguntó en señal de que entendió lo que quise, todos se fueron, salvo Natasha, quien me miraba fijamente – Nat deja de verla así, solo la estás asustando más – yo solo me pegaba más hacia Steve, ella se fue en silencio – ahora sí, dime qué paso, tuvimos un buen día – dijo como si estuviera preocupado por mí.
- Yo solo empecé a tener sueños de personas alrededor mío inyectándome cosas que me lastimaban – dije diciendo lo que realmente hicieron conmigo para tener mis poderes – yo estoy asustada, Steve – él volvió a abrazarme.
- Tranquila, ya te dije que te cuidaré, nada malo te pasará – dijo con un tono de voz relajante.
- ¿Lo prometes, Steve?
- Sí, te lo prometo – respondió, todo esto será suficiente para quedarme para poder buscar las gemas, como dijo Loki, él tiene que creer que necesito que me cuide, esto es demasiado cursi para mi gusto, pero a la vez, se sentía ligeramente bien que alguien te cuide, durante todos esos años, siempre he sido yo, mi padre me cuidó por un tiempo, pero dijo que debía aprender a cuidarme sola porque si yo misma no lo hacía, nadie lo haría y fue así como crecí, cuidándome yo sola en un universo donde la mayoría de seres quería matarme por ser una hija de Thanos, pero a la vez me temían; sin embargo, este hombre que me tenía rodeada entre sus brazos, no me temía ni quería matarme, sino todo lo contrario, él se quedó un buen rato abrazándome, llenándome de su calidez humana hasta que no sé en qué momento, me había quedado dormida entre sus brazos, jamás había hecho algo así, debo admitir que su pecho era incluso más cómodo que la suave almohada que tenía.
******STEVE******
Noté que ella se había quedado profundamente dormida entre mis brazos, me quedé observándola detenidamente por unos segundos, lucía en paz, la acomodé en la cama para luego cubrirla con las frazadas, noté que tenía el peluche que le regalé a su lado, solo le sonreí mientras dormía y salí de su habitación para encontrarme con Nat y Tony.
- ¿Ya terminaste de arrullar a tu novia? – dijo Tony.
- Tony, ella no es mi novia, solo alguien de quien me siento responsable, además cómo se te ocurre que puedo pensar románticamente sobre ella, tiene 21 años recién cumplidos, le llevo 77 años.
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Endless Love (Steve Rogers y tú) (Steve Rogers & tú)
FanfictionÉl y yo éramos tan distintos, como la luz y la oscuridad, como el calor y el frío, pero sobre todo como el bien y el mal. Vine con un propósito, entré a su vida con un objetivo, pero la calidez de su corazón abrigó el mío, su amor hacía que quisiera...