Endless Love (Steve Rogers y tú) (Steve Rogers & tú)

T2 - Capítulo LXXIX: Cambio

************T/N KINGSTON************

Los días seguían pasando y no recibía ninguna llamada de Steve, el tiempo se me agotaba, sabía que en cualquier momento Strange encontraría la forma de salir de la dimensión espejo e intentaría devolverme a mi línea temporal, y yo no quería volver, no estaba dispuesta a hacer ese sacrificio, después de que todos han sido unos malagradecidos, además tengo otra oportunidad con Steve, él solo está confundido, y es que todo ese amor que sentía por mí no podía acabarse, él dijo que nuestro amor era sin fin.

-        Hola, guapo – dije saludando a Steve – mi invitación llegó tarde a mi buzón – John me había contado sobre la exposición de Clarke, sabía que Steve no se lo perdería.

-        Carajo – dijo Tony al notar que ambas teníamos el mismo vestido, la vi comprarlo y no pude resistirlo, es que es muy bonito, además sabría que la haría enojar, y hacerla enojar es divertido, al menos para mí.

-        Gracias, era justo la reacción que quería generar – respondí sonriente, pasó un mesero y tomé dos copas de champaña, probé una – tiene la temperatura perfecta, iré a felicitar a la artista – Steve me tomó del brazo – tranquilo, querido, no quiero peleas, es la noche de mi doppelganger – sí, había visto la serie, y Elena es una molestia, se cree la mujer más inocente del mundo como Clarke, pero en esta ocasión, yo sí me quedaré con el indicado, caminé hacia ella, su sonrisa se borró al verme – debo admitir que no está nada mal – le dije extendiéndole la champaña, la miró por unos segundos – no tiene nada, la tomé del mesero de allá – dije señalando con la mirada.

-        ¿Qué haces aquí? – preguntó dejándome con el brazo extendido, terminé una copa para entregársela a quien las estaba recolectando.

-        Solo quería hacer las paces – dije, ella rio.

-        Tu cinismo escala a niveles impresionantes – me dijo – así que sí viniste por Steve, llévatelo y márchense, estoy ocupada – dijo para darse la media vuelta.

-        Tenemos gustos similares ¿cierto? – volteó a verme otra vez – ese vestido casi te queda tan bien como a mí.

-        El vestido no hace a la dama, la dama hace al vestido – dijo Loki apareciendo, sonreí.

-        Lo mismo digo, y jamás podrás lucirlo tan bien como yo – dije dando una vuelta – ¿Quieres que me lleve a Steve para que tengas privacidad con Loki? Tranquila, dilo sin pena, ya te dije que esta bien que te gusten ambos – suspiró pesadamente.

-        Solo quiero estar tranquila, ____, así que te pido que te retires porque a esta exhibición solo se entra con invitación y claramente no eres mi invitada – me dijo.

-        ¿Entonces no me invitas a mí, pero a Steve sí? – pregunté sonriente.

-        No actualicé la lista – respondió.

-        No sé por qué estás a la defensiva conmigo, no te estoy haciendo nada de malo, ya te dije que vine a apoyar el arte, hasta debo admitir que tu trabajo es decente.

-        Haz lo que quieras – dijo resignada dándose media vuelta.

-        Quizás estás molesta conmigo porque cada vez que me ves no piensas en otra cosa más que no sea a Steve y yo juntos, no es mi culpa que él no te ame, querida – volteó.

-        Si tanto quieres a Steve ¿por qué no solo tomas su mano y se van juntos de una vez? – preguntó alzando ligeramente su voz – ya entendí, de acuerdo, él y tú se aman y siempre lo harán, ahora, por favor solo vete, si quieres tomarlo de esta forma, tú ganaste y yo no – sus ojos estaban cristalizados, era la primera vez que se dejaba ver de esa forma ante mí, Loki me hizo una seña con los ojos para que me fuera.