Endless Love (Steve Rogers y tú) (Steve Rogers & tú)

Capítulo X: Serías una gran Vengadora

- Será mejor que busques un lugar seguro – me dijo Bucky quitándose los lentes, el gorro y su chaqueta.

- Yo quiero ayudar – dije imitando su acción.

- No es buena idea – dijo Yelena haciendo lo mismo – esta es una amenaza nivel Vengadores, ponte a salvo o el Cap nos matará.

- Sé que podré ayudarlos – insistí.

- Puedes ayudarnos poniendo a ese grupo de niños a salvo – dijo Bucky, asentí, buscaría el momento perfecto para ayudar, me acerqué a los niños, estaban solos al parecer los profesores se fueron corriendo dejando a los niños a su suerte, todo el equipo llegó y empezó a pelear contra los seres espaciales que trajo Loki.

- Ok, niños, hay que buscar un lugar seguro – les dije, este grupo de niños no debe pasar los cinco años por lo que se pusieron a mi alrededor y dos niñas tomaron mis manos, estaban asustados, yo no soy buena para esto – necesito que me den espacio para poder llevarlos a un lugar seguro – ellos simplemente no entendían y seguían pegados a mí, suspiré pausadamente, debía ser amable con ellos después de todo solo son niños, me agaché a su altura – escuchen, no hay nada que temer ¿de acuerdo? Estamos en el Complejo de los Vengadores, sus héroes favoritos nos mantendrán a salvo – les sonreí – pero tenemos que darles espacio para que puedan salvar al mundo nuevamente – el peligro estaba un poco lejos, por eso seguíamos permaneciendo aquí – ¿quién es tu Vengador favorito? – le pregunté a una niña.

- Black Widow – respondió.

- Pues la conozco y sé que es muy valiente y fuerte – me sentía tan tonta hablando así – ella no dejará que nada te pase, te protegerá como a su hermana, Yelena, otra Vengadora muy fuerte y determinada – la niña me sonrió, poco a poco los niños fueron diciendo los nombres de sus Vengadores favoritos – todos nos mantendrán a salvo, así que tranquilos, solo vamos a buscar un lugar seguro, será como un juego – ellos asintieron, empecé a buscar, no podía meterlos al Complejo, ya que estábamos lejos y Tony ya había activado los protocolos, había un pequeño almacén entre dos árboles que estaba lejos de todo el caos, señalé el lugar – todos entraremos ahí, tómense de la mano y a la cuenta de tres, iremos corriendo – hice la cuenta regresiva y corrimos hacia el lugar, la puerta estaba con un candado, la rompí y entré con los niños, rompí el vidrio de la única ventana por seguridad y me puse a observar – solo esperemos aquí.

- ¿También eres una Vengadora? – me preguntó un niño – porque eres fuerte.

- No soy una Vengadora – respondí mientras seguía observando la pelea.

- ¿Te gustaría serlo? – preguntó otro niño, ¿cómo los ponía en silencio?

- Sí, me gustaría serlo.

- ¿Cuál es tu Vengador favorito? – preguntaron nuevamente.

- El Capitán América – respondí sin pensarlo.

- ¿Lo conoces? – seguían preguntando.

- Sí, de hecho, él ya me salvó una vez, hará lo mismo otra vez por todos nosotros.

- Mi mamá dice que es lindo – dijo otra niña.

- Sí, es lindo, tiene un par de ojos muy bonitos – dije recordando que fue lo primero que vi de Steve.

- ¿Tienes miedo? – volteé a ver de quien se trataba, era una niña, me recordaba un poco a mí, era una de las que había estado tomando mi mano.

- No – respondí – el miedo solo te hace débil y si quieres sobrevivir en este universo, no puedes serlo, uno no debe ser una víctima, sino una guerrera – dije recordando la primera lección que me dio mi padre, haciendo que dejara de pensar en los ojos bonitos de Steve, todos los niños me habían escuchado atentamente – la guerrera más feroz del Universo – dije recordando como me llamaba mi padre, no podía fallarle, debía salir de aquí y demostrar que soy mucho mejor que todos.