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Lie si oe Neteyamur
Nawma Sa'nokur mìfa oeyä
Atanti ngal molunge
Mipa tìreyti, mipa 'itanti
Lawnol a mì te'lan
Lawnol a mì te'lan
Ngaru irayo seiyi ayoe
Tonìri tìreyä
Ngaru irayo seiyi ayoe
Srrìri tìreyä
Ma Eywa, ma Eywa

(Experimento Neteyam
A través de la Gran Madre dentro de mí
Trajiste la luz
Nueva vida, nuevo hijo
Gran felicidad en el corazón
Gran felicidad en el corazón
Te damos gracias
Por las noches de la vida
Te damos gracias
Por los días de la vida
Oh Eywa, oh Eywa).

Los gemidos de dolor de Neytiri habían cesado después del parto, un lágrima cayó sobre su mejilla al escuchar el llanto primerizo de su bebé, el primer hijo de Jake Sully y Neytiri había nacido.

Larga recuperación para la madre tras llevar un punzante dolor durante el parto, sin embargo la felicidad de Neytiri era mayor que su dolor agonízate en su bajo vientre. Al fin pudo sostener a su pequeño hijo entre sus brazos, el pequeño cuerpo de su bebé, era tan frágil, tan pequeño, tan delicado, no pudo contener su felicidad mediante el llanto y una sonrisa plasmada en su rostro, el vínculo de amamantar a su hijo reforzaba su lazo entre madre e hijo, el pequeño bebé durmió en los brazos de su madre, sintiéndose seguro entre sus brazos.

Jake siendo el nuevo Olo'eyktan de los Omatikaya, presentó a su primer hijo ante todo el clan, cada na'vi recitando cánticos y entrelazados con otros, acompañados de los pocos seres humanos que se han quedado en Pandora después de la guerra contra las "personas del cielo".Jake tomó el pequeño cuerpo de su hijo y con cuidado lo elevó para demostrárselo a todo el clan, Neytiri sonrió y no pudo evitar en derramar una lagrima de felicidad al ver a su primer hijo, el hijo del hombre que ama y gracias a su unión dio fruto a una familia.

-Neteyam. —Exclamó Jake el nombre del bebé que alzaba entre sus manos.

-¡Neteyam!. —Repitieron todos el nombre del bebé con orgullo.

El pequeño Neteyam parecía sonreír, sus frágiles extremidades se movían con emoción al mirar la resplandeciente luz del sol que atravesaba en los altos árboles del bosque. Pronto comenzaría caer las primeras gotas de lluvia, sin embargo estas solo eran como hilos de agua cayendo sobre los cuerpos y rostros de aquellos que se encontraban bajo ella. Neteyam comenzó a reír al sentir las gotas rebotar sobre su cara, era una sensación nueva para el pequeño pero no negaba que era agradable la presencia de la lluvia sobre el.

Había llegado el momento de su bautizo, su primera conexión con Eywa, al lado de su nueva hermana, Kiri, nacida del avatar de la Dra. Grace Augustine, cuya concepción fue un completo misterio. Encontrándose debajo del Árbol de las Almas, Mo'at era la encargada de llevar la conexión de los bebés a Eywa, quien empezó primero con Neteyam, descansado sobre los brazos de su madre, la Tsahìk de los Omatikaya tomó uno de los largos zarcillos bioluminiscentes del árbol al igual que tomó la pequeña cola neuronal de Neteyam, además de recitar una oración y su nombre que sería reconocido por todo el clan Omatikaya.

-Náwma Sá'nok, Eywa, ngári e hì'i 'itan. [Gran Madre, Eywa, conoce a tu pequeño hijo]. —Dijo Mo'at con una sonrisa. —Neteyam te Suli Tsyeyk'itan.

Inició la vinculación con uno de los zarcillos, al entrar en contacto el zarcillo se iluminó de un color lila a comparación de los otros, las pupilas del pequeño Neteyam se dilataron al sentir una nueva carga energética en su cuerpo, al parecer sonrió junto a su madre, la Gran Madre lleva a todos sus hijos en el corazón, Eywa vive en nosotros y nosotros en Eywa.

✨𝓜𝓪 𝓝𝓮𝓽𝓮𝔂𝓪𝓶✨Donde viven las historias. Descúbrelo ahora