Salió de la habitación, y me concentré en el televisor frente a mi, la luz me molestaba, pero aún así trate de entender lo que decían.
--Hablamos del ataque del Duende verde a la ciudad de New York este lunes, ¿Qué opinas de eso Frank?-dijo la mujer.
¿Qué? ¿Cuál ataque?
--Bueno Jenna, pensábamos que estábamos seguros del duende verde y que jamás regresaría pero todos nos equivocamos, regresó la tarde del lunes, cerca de la torre de Tony Stark, pero él no estaba en la ciudad, así que Spiderman trato de ayudar, y lo que parecen sus nuevos amigos.
--Estamos claros en que lo vencieron pero dejó muchas muertes.-dijo la mujer.
--Si, además de la destrucción masiva que hizo en el centro de la ciudad, hemos verificado la muerte de once personas cerca de la zona. Además de que dejó varias bombas cerca que explotaron en varios locales llenos de gente.
--Dejó heridos a más de 246 personas que ahora mismo están en el hospital.-dijo la mujer.
Entonces eso fue lo que pasó.
Mi mama entró con una enfermera y lo que parecía un doctor. Me revisaron la cabeza y me dieron unas pastillas.
--¿Y papá? ¿Está bien?
--Si, esta a unas habitaciones de aquí:
--¿Y qué le pasó?-pregunté.
--Tuvo unas quemaduras graves pero ya está mejor.
--¿Qué te refieres con graves?-dije.
--Tu papá tuvo unas quemaduras en segundo grado, si no fuera por toda la ropa que traía hubieran sido peor.-dijo el doctor.
Asentí.
Horas más tarde, Peter llegó con unas flores algo maltratadas, rei y las metio en un vaso de agua.
--Están muy lindas Peter. Gracias.-dije, el sonrió y se sonrojó.--¿Por qué estás tan golpeado?-pregunté.
El se tocó donde sabía que tenía el golpe morado en el rostro, puso cara de dolor.
--Ignóralo, son solo tonterías. Todo se puso loco el día del juego.
--Si, supe que habíamos perdido. ¿Cómo estuvo?
--¡Fatal! Fue horrible... O eso me dijeron.-dijo el.--¿Y cómo estás?
--Me rompí la cabeza pero todo está bien, sólo duele un poco y tuve algunos puntos. ¿Quieres ver?-dije.
--No, gracias.-dijo el riendo. La puerta se abrió, y venían Jessica, Luke, Danny, Sam y Ava.
--Te trajimos esto.-dijo Sam acercándose con una tarjeta.
--Y esto.-dijo Jessica y sacaron detrás de Luke un peluche pequeño de un cochinito algo... Diabólico.
--¡ES HORRIBLE!-chille, todos rieron.--Me encanta.
Pasaron unos minutos ahí, conmigo, pero podía notarlos extraños.
--¿Hay algo que quieran decirme?-pregunté. Todos negaron con la cabeza.
Fruncí el ceño sin entender y abrí la carta, que era muy chistosa y cuando la abrías salía una canción horrorosa.
--Nosotros tenemos que irnos.-dijo Danny.--Nos vemos cuando salgas ¿ok?
--Ok...-dije, me dejo un beso en la mejilla, al igual que los demás y se marcharon. Mire a Peter.--Tu me vas a decir que está pasando.-dije seriamente.--Por qué lo veo en la mirada de todos.
El trago saliva.
--Yo no sé nada, te lo juro.-dijo el.
--Peter eres malo para mentir... ¿Qué pasó?
El suspiro.
--Te voy a decir, pero no digas que fui yo el que te dijo.
--Habla ya.
--Flash está en el piso de abajo, en terapia intensiva.
--¿QUÉ?-grite, y la cabeza me ardió.--¿Por qué? ¿Qué le pasó? ¿Qué hizo ahora?
--No lo sé Mary Jane, ninguno de nosotros sabemos, fue Liz la que nos avisó.
--Pero...
Recordé que ellos no sabían lo que hacía Flash, ni de su extraño traje negro, ni nada.
--¿Por qué?-las lágrimas salieron y bajaron por mis mejillas.--¿Está bien? Me refiero a que.... ¿Saldrá bien de esta?
--No lo sé.-dijo el tomando mi mano.--No llores, sabía que no tenía que haberte dicho, soy un idiota.
--No eres un idiota.-dije quitándome las lágrimas.--Pero ¿me puedes hacer un favor?-pregunté, el asintió.--¿Puedes averiguar más? Digo... Como pasó todo y si está bien.
El suspiro.
--Claro, no te preocupes, yo te avisaré.-dijo, beso mi frente y se fue, apagando la luz y dejando solo el televisor encendido.
Esperaba a que mi mama llegará para preguntarle muchas cosas, pero no lo hacía, ya eran las 7:47 y a las ocho se acababa el tiempo de visita.
La puerta se abrió, con muchas flores, y unos globos, y pude ver detrás de todo eso a Harry, que parecía asustado.
--¿Estás bien?-preguntó el, colocando los globos por la habitación, y sobre la mesa varios potes de helado y chocolates.
Las flores las puso en el mismo caso que las de Peter.
--Si... Eso creo, ¿cómo estás tú?-pregunté.
