Lo primero que vi cuando volví en mi, fue a Cletus limpiándose la sangre furioso, de otro lado del cristal, como si lo hubiera agarrado por sorpresa.
Peleamos, si eso es lo que se preguntan, no recuerdo mucho pero fue una locura, jamás pensé que podría hacer esas cosas, me recosté en el suelo adolorida y cerré los ojos.
Comencé a pensar en si volvería ver a Peter otra vez, si me iba a dar chance de poder arreglar mi vida, si iba a poder salir de aquí, las lagrimas comenzaron a bajar.
Y me di cuenta de que ya mi cuerpo no dolía, como si me hubiera curado mágicamente.
¿Por que a mi?
Recordé la explicación que me daba Peter, parte de Flash estaba dentro de mi, lo cual hacía que el simbionte se pegara bastante bien, pero ¿Que es bien?
Recordé a Flash la última vez que lo vi, vomitando, con sus ojos blancos... ¿Eso es bien?
Me esta dominando.
Recuerdo que decía, ¿va a dominarme a mi también? Yo no quiero ser esto, no lo quiero. Tal vez por eso Cletus y el señor Osborn siempre me han buscado, por lo que tengo, que ni yo misma sé que lo tengo.
Cerré los ojos con mas fuerza, quería irme a casa ahora, quería estar con mi familia teniendo mis dramas personales y no esta basura.
Suspire derrotada.
Para cuando se hizo de noche, pensaba en que no iba a morirme ahí en ese laboratorio como cualquier rata, no, no, yo iba a dar pelea, iba a ver a Peter otra vez, lo haría de nuevo.
Y es que se preguntarán de donde salió tanto amor de repente.
Mierda ni yo lo sé.
Siempre lo e querido, y cuando él estaba con Gwen lo veía como a un hermano, por que ella era mi mejor amiga, y además, yo tenía a Flash...
Yo amaba a Flash, no tenía ojos para nadie mas que el. Y Peter no tenía ojos para nadie que no fuera Gwen. Pero cuando ambos los perdimos...
Tal vez solo era cuestión de tiempo para darnos cuenta de que, merecíamos una oportunidad, pero fui muy ciega, fue demasiado ciega, y ahora que lo tengo, van a matarme.
Las lágrimas comenzaron a salir rápidamente, y me llenaba de ansiedad, iba a salir de ahí, lo juro.
La cápsula se reventó en miles de pedazos al mismo tiempo que yo alcanzaba una velocidad que no creía mía, mire hacia la puerta, era momento de salir.
Pero obvio, Venom quizo lo extremo. Y se lanzó por la ventana, también rompiéndola, cayendo lo que parecían más de diez pisos a toda velocidad.
Pensé que me estrellaría contra el suelo y que moriría, pero al llegar todo salí corriendo disparada lejos de ahí, pensé que por fin había escapado, pero cuando casi en rompo la cabeza contra la pared que me lanzó Carnage entendí que no iba ser tan fácil.
Es que eres bien ilusa.
¿Que? De donde...
Mis piernas comenzaron a correr solas lejos de ahí.
¿Puedes estar pendiente del camino?
Una voz grosera y diabólica habló dentro de mj cabeza, me paré en seco, en medio de la calle, y varios autos que pasaban comenzaron a tocar sus cornetas tratando no llevarme por delante.
¡Qué haces! ¡Muévete!
Y mis piernas comenzaron a andar pero las paré de nuevo.
No.