Tuvimos que evadir a la policia mostrando nuestro carnets de la universidad, nos llamaron niños entrometidos, y que además ya no hacían falta más reporteros en la ciudad.
No digo que no tengas razón, somos muy entrometidos, pero lo otro... eso si dolió.
Ennio y yo nos subimos al auto. Sin decir nada.
—¿Crees que el La Haya... tu sabes...
—¿Violado?-preguntó el.—Es un hombre con poder, tal vez lo haya echo y compro el silencio.
—Eso está horrible verdad...
—Si... y es nuestro deber averiguarlo.-y Lo mire asustada.—¡Vamos! ¿Se te olvida para que estudiamos?
—¡No!-dijo.—Pero sabes que le tengo miedo a la gata negra.
—Con el miedo no llegarás a ningún lado....
Llame a Harry unas 80 veces y no contesto, llame a Liz y si voz me sorprendió.
—¿Que pasó? Todo está bien? ¿Normie? ¿Donde está Normie?
—Todo está bien...
¡HARRY OSBORN! Bájate de ese toro y vamos a Nueva York ahora mismo.
Se escuchó del otro lado del teléfono.
¿Toro?
—¿Donde están?-pregunte.
—Estamos en Texas...
¿Texas? ¿Como mierda...
—¿Y cuando piensan volver?-pregunte.
—¡NUNCA!-escuchó a un eufórico Harry gritar desde el otro lado.
—¡Compórtate! M.J nuestro vuelo sale en 25 minutos, llegaremos mas tarde esta noche ¿no hay problema?
—¿No iban a visitar a tu suegro?
—¡Más cerveza por favor!-era Harry y se escuchó un vaso romperse.
—¡Harry!
Tranco el teléfono y me quede asombrada, mire a Ennio que revisaba su laptop, y no se en que momento hizo una pequeña oficina en la guantera de mi auto, tenía un teléfono conectado y miles de números en la pantalla que se movían, tenía papeles viejos y arrugados por el carro, ¿En 5 minutos?
—¿Que te dijo?
—Están en Texas, o bajas los pies del auto o te los meto por el culo, tu decides.-dije y el los bajo sin quitar la mirada de la pantalla.—¿Que estas haciendo?
—Shhhh.-me hizo.
—¡Es mi auto no me hagas Shhhh!
Y volvió a hacerlo.
—Ennio...
—Shhh
—¡Te juro que no fui yo!-chilló Ennio cuando vio que me puse roja de la ira.
—Shhh.-ambos nos volteamos a ver a Normie haciendo el ruido varías veces. Golpee mi frente.
—¡Listo!-dijo.—¡Maneja!
—¿A donde?-pregunte.
—¡A la baticueva!
Resulta que la cueva era en Central Park de noche.
—¿Quien te dio esta información?-dije.
—Mira querida.-y me mostró un reloj muy moderno, y vi que tenía sangre seca.
—¡Es el reloj del muerto!
—¡Era cariño, era!
—Ennio vamos a ir a prision, ¿estas loco?
—No te preocupes use un papel del baño para quitárselo.
—¿Y que mierda hacemos aquí?-dije.
Abrió su computadora de nuevo, y comenzó a reproducir un audio.
—Este aparato graba todo lo que está sucediendo 24 horas, logra hackearlo y pasar la información a mi teléfono ahora todo está en esta computadora, y no te preocupes no nos pueden rastrear es una computadora vieja y el wifi está dañado así que no tiene internet.
Eso no me calmo para nada.
¿Que haces aquí?
Una voz masculina que parecía la del gobernador sonó después de unos segundos.
¡No te acerques!
¡Dime donde está!
Y la voz femenina y que hacía un extraño ronronear apareció.Jamás te lo diré. ¡Ah! ¿Quien eres?
Se escuchó un golpe seco y después el hombre preguntó. La mujer tardó en responder.
¡No puede ser!
Otro golpe y una risa nerviosa.—supongo que viniste por tu venganza ¿No? Ya deberías haberlo superado; han pasado que... ¿2 años? El rencor no te sienta bien...
Otro golpe. Y no pude evitar pensar, "golpes al bastardo anda".
—Tu sabes por que estoy aquí...
—Claro que lo se y al parecer eres más tonta de lo que creí si de verdad crees que voy a darte un el vibranio.
—Y tú eres más tonto si crees que te lo iba a pedir por favor...
Se escucharon unos gritos aterradores que por un segundo nos congelaron el cuerpo, era como si estuviéramos ahí.
—Yo te diré todo... solo para, para por favor para...
Ella rio. Y entendí lo qué pasó por su cabeza en ese momento, como si el hubiera tenido piedad con ella.
Ay mírenme, opinando como si supiera lo qué pasa.
—¿Cuanto tiempo más sigue gritando?-pregunte.
Ennio adelantó más de 7 minutos; donde ahora se escuchaban jadeos casi sin vida del hombre.
—Central Park...
Y se escuchó un último golpe, y la ventana rompiéndose.
—Estas loco si crees que le voy a bajar aquí, con Normie.-dije seriamente.—Te he dicho que le tengo miedo. Y ahora más.
—No va a pasar nada M....
Y un golpe fuerte llamo nuestra atención, alguien había saltado encima del auto, y por su pose sabía que estaba bien enojado.